Este domingo se ha disputado la gran final del torneo de tenis de Montecarlo, con un Carlos Alcaraz que se ha coronado como el absoluto vencedor del Masters. Hablamos de una cita deportiva tradicional que, como de costumbre, ha estado presidida por Alberto de Mónaco y su esposa Charlene. Como ocurre con Wimbledon, dicho acontecimiento congrega, año tras año, a numerosos rostros conocidos, entre los que se encuentran royals como la princesa, que no dudan en hacer del espacio su propia pasarela. Y todo, con estilismos tan cómodos como sofisticados. ¡Repasamos los detalles del look que ha lucido la exnadadora olímpica este mediodía!
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El lujoso Monte-Carlo Country Club ha sido el escenario escogido para una disputa en la que Charlene de Mónaco ha decidido hacer gala de su buen gusto al vestir. La natural de Zimbabwe se ha enfundado, para esta ocasión, en un conjunto de dos piezas de inspiración sartorial con efecto denim. Un matching set constituido, en primer lugar, por blazer cruzada con solapas en pico, bolsillos falsos y botonadura doble y, en segundo lugar, por pantalón de perneras anchas. Una propuesta de lo más funcional que, de seguro, no dejaremos de reciclar a lo largo de la presente Primavera/verano 2025.
En lo que a complementos se refiere, Charlene de Mónaco se ha subido a unos zapatos de tacón con puntera afilada en color blanco, pieza encargada de elevar el estilismo. Pero eso no ha sido todo. En realidad, el accesorio que ha acaparado todas las miradas y que, sin duda, se ha erigido como el verdadero protagonista de la apuesta ha sido el collar de perlas de tres vueltas que ha llevado. Un guiño a Grace Kelly que ha despertado auténtico furor. La influencia de la oscarizada intérprete no tiene límites. Tanto sus trajes de invitada como sus tocados y joyas históricas continúan viéndose en forma de pequeñas reminiscencias en looks actuales de las royals.
Del traje retro en marrón chocolate que acogió Alexandra de Hannover para el Día Nacional de Mónaco al peinado trenzado de Beatrice Borromeo para el Baile de la Rosa, pasando por el icónico collar triple de perlas cultivadas y diamantes que heredó Carolina de Mónaco. Este último ha sido precisamente el tesoro que ha querido recordar Charlene de Mónaco en la jornada de hoy. Una alhaja que guarda similitud con la gargantilla con la que Grace Kelly se dejó ver en el filme Rear WIndow, de Alfred Hitchcock (1954).