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Los tejidos ligeros y los cortes veraniegos exigen una lencería bien elegida. De lo contrario, pueden aparecer marcas, transparencias o ajustes incómodos que arruinen el look.
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Para evitar estos problemas, es clave optar por prendas de calidad que se adapten al cuerpo sin oprimir. Chantelle domina el arte de la invisibilidad con tejidos ultraligeros y acabados sin costuras.
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Uno de los errores más comunes es usar una talla incorrecta. Si es demasiado pequeña, puede marcarse en la piel; si es grande, no ofrecerá sujeción y se moverá.
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El blanco no es la mejor opción para la ropa blanca. Aunque parezca lógico, este color suele notarse bajo ciertos tejidos. Los tonos nude o tierra son la alternativa ideal.
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No todos los tejidos ‘invisibles’ lo son en realidad. Algunos materiales sintéticos generan fricción y pueden marcarse. Las opciones sin costuras y de efecto segunda piel garantizan un mejor resultado.
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No probar la lencería con la ropa antes de salir puede jugar malas pasadas. La iluminación y el movimiento pueden revelar detalles que no esperábamos.
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Algunas prendas sin costuras siguen dejando marcas. La clave está en elegir diseños con bordes ultrafinos y tejidos que se adapten perfectamente al cuerpo.