En la Avenida Diagonal de Barcelona está ubicado el showroom de Yolancris —su atelier está emplazado en L'Hospitalet de Llobregat—. Es un espacio con grandes ventanales, techos altísimos y habitaciones diáfanas en las que están expuestos buena parte de sus vestidos de novia. Aunque la colección que van a presentar en la pasarela de Mercedes-Benz Fashion Week Madrid es de prêt-à-porter y no nupcial —esa la veremos en abril durante la Barcelona Bridal Fashion Week—, hablar de la firma es hacerlo de vestidos blancos, los que llevan creando desde hace 20 años, los que eligió la influencer María Pombo para su boda (llevó dos diseños), o Delicious Martha, o miles de novias anónimas. Pero también es hacerlo de celebrities. Pero empecemos por el principio, porque aunque a Yolanda Pérez, directora creativa de la firma, no le gusta demasiado lo de mirar hacia atrás, en este caso está justificado.
Yolancris nació en 2005 como continuación de un legado familiar, el que había comenzado, tres décadas antes, la madre de Yolanda y Cristina Pérez. Poco después la firma empezó a cruzar fronteras, aunque no de forma intencionada. Y fue así como llegaron los primeros nombres internacionales: Christina Aguilera, que las eligió en su esperado regreso; Kim Kardashian, que seleccionó algunos de sus vestidos para que Khloé, Kourtney, Kendall y Kylie, sus damas de honor, los lucieran en su boda en Florencia; Beyoncé, al recibir el premio al Video del Año en los MTV Video Music Awards... Y también nacionales, porque Laura Escanes (y antes que ella Rosalía o Dulceida) se enfundó en uno de sus diseños en las pasadas campanadas, y también en la última edición de los Premios Goya.
Cuando grabamos esta entrevista, Yolanda está ultimando los diseños que forman parte de su colección para el invierno de 2026, los que veremos en la pasarela de Mercedes-Benz Fashion Week Madrid, pero también su viaje a Nueva York, donde ha llevado sus propuestas. Ahora hace una breve parada en Madrid. Después toca París, y su Semana de la Moda. Y, entre tanto, sigue dando forma a sus vestidos de novia, los que veremos en abril. En realidad, Yolanda no para nunca.