La tendencia medievalcore está ganando popularidad en 2025, trayendo elementos de la Edad Media a la moda actual. De la vestimenta propia de los campesinos de aquella época, pasando por las damas, hasta llegar, incluso, a los caballeros templarios. Repasamos cómo puedes incorporar esta nueva apuesta en tus looks del día a día de manera discreta.
Para ti que te gusta
Este contenido es exclusivo para la comunidad de lectores de ¡HOLA!
Para disfrutar de 8 contenidos gratis cada mes debes navegar registrado.
El corsé regresa como un símbolo de feminidad y poder, destacando la silueta en cualquier estilismo. Este año, se lleva con pantalones holgados, como los palazzo, o con faldas largas para un equilibrio entre lo medieval y lo contemporáneo.
Estas faldas, mejor si tienen volumen o efecto cancán. Con blusas ajustadas o los corsés que mencionamos anteriormente, resaltan la figura tal y como ya nos demostraron en su día las damas de la época.
Llevamos tiempo viéndolo, pero no encontrábamos en qué casilla encajarlos. Sin embargo, ahora queda claro: la cota de malla o las piezas metálicas, sea en la prenda que sea, en su totalidad o solo en acabados metálicos, aportan un aire templario moderno.
Las botas altas o con detalles de cuero y cordones también recuerdan las armaduras y calzado de los caballeros de época. Arrasan en las calles tanto con vestidos largos como por encima de algún pantalón. Si, en cambio, prefieres una apuesta más sofisticada, apuesta por la corriente contraria: unas sandalias planas o zapatos estilo slipper.
Los escotes que dejan los hombros al descubierto, estilo Bardot, aportan sensualidad y elegancia a cualquier atuendo. Además, encajan perfectamente dentro de esta estética, recordando a esos majestuosos trajes que llevaban las damas nobles en la Edad Media.
Más allá de proteger el pelo de la temperatura exterior, de ser un comodín idóneo para esos días en los que el cabello está rebelde, las pañoletas simples o bordadas son un guiño a la moda campesina medieval. ¿Lo mejor? Ya se llevan tanto en looks informales, como incluso en los que nos acompañan en las ocasiones más especiales.
Los mandiles reinventados como accesorio decorativo aportan un aire rústico y práctico a los looks. De hecho, y porque puede parecer demasiado atrevido añadir uno sobre una falda o pantalón, existen vestidos que ya crean ese efecto, también de inspiración campesina. Si los llevas de manera individual y quieres garantizar un look 100% adaptado a la tendencia, llévalos con faldas largas y blusas ligeras en tonos naturales.
Las capas largas son ideales para abrigarse con estilo y dan un poco de dramatismo a cualquier atuendo. Por ejemplo, una camisa larga o un vestido bajo un corsé encaja perfectamente en el medievalcore, dando un aire original a nuestros estilismos, y al mismo tiempo,recordando a la indumentaria de tiempos pasados.
Un atributo bueno de esta tendencia es que nos permite crear tantos looks delicados, como robustos. De hecho, la ropa efecto piel encaja en el segundo grupo por ser propias de los mercaderes de antaño, pero ahora se llevan en cualquiera de sus versiones para dar presencia a cualquier atuendo. Ya sea el corsé, un bolso, las botas o un cinturón ancho
En vestidos, blusas o chaquetas, las mangas acampanadas vuelven a dar de qué hablar en moda, recordando aquellos trajes propios de las damas o de las hechiceras. Una apuesta que triunfaba hace años y que recuperamos ahora en todas sus propuestas: extra largas, normales o incluso con detalles originales como los cut-outs.
No podían faltar las mangas abullonadas en este listado, una tendencia que bien recuperamos con el regencycore, y que ahora regresa (si es que alguna vez se fue) con esta reminiscencia a la Edad Media. Actrices que inspiran en estilo, como Natalie Portman, saben bien el poder que denotan, añadiendo guiños regios y teatrales a cualquier atuendo.
Los vestidos con efecto malla y escote cascada son perfectos para eventos nocturnos, mezclando sensualidad y modernidad. Basta con ver este diseño que lució Zendaya para darse cuenta de que, incluso en su versión plateada plena, pueden ser aptos para llevar esta estética. Más aún, si se combinan con peinados que presenten semirecogidos con trencitas pequeñas.