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Nos trasladamos de París, donde la Alta Costura tuvo toda nuestra atención hace apenas una semana, directo hasta Nueva York para los desfiles Otoño/Invierno 2025 más esperados de las firmas con sede en la ciudad de los rascacielos. Parada obligatoria en este recorrido es, por supuesto, la presentación de Carolina Herrera, a la que su fundadora ha acudido este lunes por la mañana en compañía de sus hijas, Carolina Adriana y Patricia. En esta oportunidad, Wes Gordon, director creativo de la marca, ha tomado inspiración de la película Bienvenido, Mr. Chance (1979) y el libro en el que se basa, Being There de Jerzy Kosiński, para construir el imaginario que da vida a sus novedades.
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Una mujer hermosa, joven y rica, esposa de un magnate financiero moribundo, consigue catapultar a un hombre, bueno para nada y venido a menos, al estrellato. La elegancia de Shirley McLaine, las abundantes y coloridas flores que habitaban el jardín que Mr. Chance solía cuidar con mimo, los trajes corporativos de Wall Street y esos códigos poderosos de la moda ochentera que tanto han nutrido a Carolina Herrera son los pilares para esta colección, en la que se plasma de maravilla la sofisticación, feminidad y elegancia de la casa neoyorquina.
Las modelos llevaban alrededor de la cintura fajas con rosetas de seda hechas a mano y completaban sus looks con bolsos de noche moldeados con forma de rosa y broches florales bañados en oro. Una de las pinturas preferidas por Gordon, Rhythm Color, de Sonia Delaunay, sentó las bases para la paleta de intensa color.