Este domingo 2 de febrero, se entregan los Premios Grammy 2025 en el Crypto.com Arena de Los Ángeles. Una 67ª edición donde se espera el triunfal regreso de Shakira, que será una de las estrellas que actuará sobre el escenario. Sin embargo, en esta galería fotográfica, queremos recopilar los mejores looks de alfombra roja que nos han dejado estos galardones de la industria musical durante las últimas décadas. De Beyoncé a Taylor Swift, pasando por Jennifer Lopez, Cher o Miley Cyrus.
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Absolutamente icónica es la elección que la artista, que por aquel entonces tenía 26 años, llevaba a los Grammy. Un conjunto de falda fluida con un top de inspiración bikini adornado por una enorme mariposa brillante a juego con la del pasador de su cabello.
La cantante y compositora brillaba aquel año con un vestido largo de lentejuelas y detalles de pedrería que reflejaban la luz de los focos creando un efecto de lo más llamativo.
Siempre fiel a su estética disruptiva, la jamaicana pisaba la alfombra roja con un vestido negro formado por un chaleco de fibras de palmera y una maxipamela de ratán, una creación del diseñador Issey Miyake.
La que fue reina de la música tejana posaba un año antes de su trágica muerte con uno de los vestidos más sofisticados de aquella edición, un modelo blanco de lentejuelas con cuello halter y escote 3D de Lillie Rubin.
Inolvidable el atrevido vestido de gasa semitransparente que lució. Una creación de Versace que despertó tal interés que propició el nacimiento de Google Imágenes y que JLo volvió a llevar en 2019 durante un desfile de la firma.
Parece que la del Bronx marcó tendencia un año después, cuando el grupo apareció en los Grammy luciendo looks coordinados en verde con transparencias, confeccionados por Tina Knowles, la madre de Beyoncé.
Sorprendía la cantante con un vestido inspirado en el que Marilyn Monroe llevó en 1962 cuando le cantó el feliz cumpleaños a Kennedy (el mismo que lució Kim Kardashian en la gala MET). Una pieza color maquillaje que se ceñía al cuerpo creando un 'efecto segunda piel'.
Las estratégicas transparencias eran sin duda el toque distintivo de este llamativo diseño que la cantante llevó a la gala, un vestido del libanés Georges Chakra.
Dejando la espalda al descubierto y con marcadas aberturas a los costados, estaba espectacular con este diseño de lentejuelas azul marino de Calvin Klein Collection.
Embarazada de su primera hija posaba la modelo, muy elegante con un vestido largo y recto en color blanco que llevaba una espectacular capa adornada con cristales.
Fue una de las mejor vestidas con este conjunto de dos piezas formado por una voluminosa falda de cintura alta y top joya repleto de pedrería, de Giorgio Armani Privé.
Como una princesa vestida de rojo posaba la cantante de Tennessee, decantándose por un vestido de escote Bardot con voluminosa falda de la coleccón Pre-Fall de Zac Posen.
La artista se rindió al volumen en su máximo explendor con una maxifalda confeccionada con decenas de pequeños volantes de tul, y a juego, un cropped top palabra de honor. Un vestido firmado por Monsoori.
La cantante de country se convertía en un hada del bosque con un romántico y delicado diseño de Valentino, formado por un slip dress en rosa empolvado y una capa con brilantes mariposas bordadas a mano.
Se enfundó en una emblemática pieza creada en 1992 por Gianni Versace, bautizada como 'el vestido bondage'. Un diseño formado por un corsé transparente con cintas de cuero decoradas con hebillas doradas que finalizan en un cuello halter tipo chocker.
La cantante sueca deslumbró con un vestido de Atelier Versace elaborado en malla metálica plateada con un trabajo de confección de 800 horas, con detalles deshilachados, cadenas y cristal.
Un look 'gótico chic' de lo más llamativo llevó la brasileña el pasado año, con este vestido de palabra de honor y voluminosa cola confeccionado por Atelier Versace.
La modelo defendía la elegancia del color negro con un precioso vestido de Erin Nesmith con abertura y cuerpo estructurado bañado en pedrería brillante.
Uno de los más virales de la noche: llevó un vestido escotado compuesto porun body azul oscuro y una falda transparente XL finalizada en volantes, de Gucci.
La cantante estadounidense, una de las estrellas que arrasa en estos premios, lució un look de Schiaparelli, que estaba compuesto por un vestido blanco con cuerpo encorsetado y volúmenes en las caderas, que acompañó de guantes negros de ópera y sandalias de alto tacón.
La cantante impactó en esta edición con un minivestido transparente de Maison Margiela, una creación tipo joya que se confeccionó con un tejido de red embellecido con pedrería dorada. Lo complementó con zapatos de ante con altísimo tacón.
La cantante arrasó en esta edición con su vestido de archivo, un diseño en color crudo, cuajado de abalorios de cristal y doble tirante que creo Versace en 1994. Lo complementó con sandalias de Aquazzura (modelo Nude Block 85).
La modelo alemán y presentadora de televisión llevó un vestido negro con detalles cañeros de Valdrin Sahiti. La pieza presentaba transparencias en el abdomen, aberturas estratégicas y detalles brillantes.
La cantante se decantó por un vestido que estaba confeccionado con pequeños flecos metalizados de color plata, tenía pronunciado escote, manga larga e innovadores aberturas en la cadera; un diseño personalizado de Courrèges. Lo complementó con joyas de Tiffany & Co. y salones Romy de Jimmy Choo.
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