Este pasado jueves, 16 de enero, el príncipe Alberto y Charlene de Mónaco protagonizaron la celebración del 25º aniversario del Grimaldi Forum, cita histórica en la que, esta vez, inauguraron un espacio adicional en dicho Centro de Congresos y Cultura. La princesa monegasca retomó su agenda de 2025 tras el período navideño con un estilismo que, definitivamente, abrazaremos sin cesar en futuros ambientes de etiqueta. Hablamos de un look liderado por un traje de chaqueta. Los matching sets de carácter sartorial se han convertido en el gran habitual de los miembros de la realeza y no es de extrañar, pues son un recurso elegante, cómodo y súper versátil que permite ser moldeado en función de la personalidad de cada figura.
La princesa Charlene destiló suma sofisticación con un dos piezas que reúne algunas de las tendencias más relevantes del presente Otoño/invierno 2024-2025. Nos referimos a un conjunto constituido, en primer lugar, por una blazer cruzada con doble botonadura confeccionada en terciopelo granate y estampado floral. Si bien es cierto que el ante ha revolucionado por completo la industria esta temporada, parece que la suntuosa tela ante la que ha caído rendida Charlene de Mónaco es la favorita de las mujeres más exquisitas del globo.
Un tejido de textura lujosa de lo más atemporal que, junto al burdeos, uno de los tonos virales de la estación, conforma la alianza idónea para deslumbrar en las ocasiones más especiales. La americana en cuestión, además, cuenta con solapas en pico de color negro para potenciar el juego cromático y botones forrados. Y en segundo lugar, por unos pantalones negros tipo pitillo a juego. Apuesta clásica de aires masculinos que, sin duda alguna, querrán incorporar en su colección invernal las más entendidas. ¿Te preguntas cómo culminarla? ¡Analizamos los complementos que sumó la princesa Charlene al look!
El estilismo de Charlene de Mónaco fue completado, en términos de calzado, por unos zapatos de tacón en satén. Un modelo perteneciente a Christian Dior con puntera en pico y hebilla en la zona del tobillo. Tampoco podemos pasar por alto el clutch con forma rectangular y la joyería escogida para el acto: unos exclusivos pendientes de diamantes de botón en talla esmeralda.
En lo que a propuesta beauty se refiere, la princesa Charlene lució espectacular con un peinado ya habitual: una melena corta con flequillo lateral de ondas marcadas al más puro estilo Old Hollywood. Una acertada elección que conjugó con maquillaje conseguido a partir de sombras de ojos brillantes, máscara de pestañas y labial rosado y manicura en granate, a tono con la prenda protagonista.
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© Cordon Press
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