Jacqueline Kennedy © Getty Images

Los looks más icónicos de las primeras damas de la Casa Blanca: de Jackie Kennedy a Melania Trump

Recordamos los estilismos inolvidables de las mujeres que han marcado a varias generaciones


15 de noviembre de 2024 - 20:40 CET

A lo largo de las últimas décadas en Estados Unidos, las mujeres de los presidentes electos del país, han dejado su huella (en mayor o menor medida) no solo en la política y la cultura, sino también en la moda. Hay quienes la han usado como una poderosa herramienta para transmitir un mensaje, como hicieron Rosalyn Carter o Michelle Obama, pero también mujeres que convirtieron su armario en todo un museo de piezas de Alta Costura, como Nancy Reagan. Capaces de definir las tendencias de una época y continuar influyendo en las actuales, hacemos un recorrido por el estilo de algunas de las primeras damas más influyentes, sus looks más icónicos y algunas curiosidades.

Para ti que te gusta

Este contenido es exclusivo para la comunidad de lectores de ¡HOLA!

Para disfrutar de 8 contenidos gratis cada mes debes navegar registrado.

Este contenido es solo para suscriptores.

Suscríbete ahora para seguir leyendo.

TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE CADA MES POR ESTAR REGISTRADO.

Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.

16
© Getty Images

Jacqueline Kennedy, icono de elegancia (1961-1963)

"Jackie Kennedy y Marilyn Monroe, todas las mujeres son una o la otra", decían en la serie Mad Men, ambientada precisamente en la década de los sesenta. Una cita que refleja cómo la mujer del 35º presidente y la actriz, eran los referentes de moda más potentes de la época. Frente al glamuroso y explosivo estilo de la 'tentación rubia', estaba la elegancia clásica de Jackie. Nacida en Southampton en el seno de una familia acomodada, su armario estaba repleto de firmas francesas que poco a poco fue sustituyendo por otras afincadas en Estados Unidos cuando se convirtió en la Primera Dama. Aunque Chanel siempre sería una de sus favoritas.

© GTRES

John F. Kennedy y Jacqueline Kennedy en Texas, el 22 de noviembre de 1963

Convirtió los abrigos de doble botonadura, los conjuntos de tweed, los trajes de chaqueta y falda y aquellos sombreros pillbox, redondos y de borde alto, en las piezas más representativas de su vestidor. Es aquel Chanel rosa confeccionado en lana bouclé su atuendo más significativo, pues fue el que llevó el mismo día que asesinaron a John F. Kennedy en Texas y que no quiso quitarse hasta su regreso a Washington, al día siguiente. Más tarde, se reveló que aquel look era en realidad una copia autorizada elaborada en realidad por la marca Chez Ninon, según explicó la escritora Justine Picardie.

© Getty Images

Jacqueline Kennedy en 1966, en Florida

© Getty Images

Los Kennedy durante una cena en mayo de 1962

Aunque la maison francesa estaba muy presente en sus elecciones, más llegó a estarlo Oleg Cassini, diseñador y amigo, encargado de crear para ella más de 300 looks durante el tiempo que estuvo en la Casa Blanca. Entre ellos destacaron especialmente los vestidos de silueta en forma de A, de líneas rectas y elegantes, que acompañaba con guantes y llevaba a menudo en eventos.

26
© Getty Images

Jimmy Carter y Rosalynn Carter en 1977 durante el Baile Inaugural

Rosalynn Carter, estilo práctico (1977-1981)

Cuando en 1977 la esposa del presidente Jimmy Carter apareció con aquel vestido azul de gasa y tul con brillos durante el baile inaugural con el que celebraban el inicio de su mandato, dio mucho que hablar. Y es que se trataba de un diseño que ya había llevado años antes, cuando antes de ser presidente nombraron a su marido senador. Entonces no era nada habitual que las primeras damas reciclasen looks, especialmente en eventos tan señalados como aquel. Pero Rosalynn Carter demostró que su paso por la Casa Blanca no iba a ser convencional.

© Getty Images

Jimmy Carter y Rosalynn Carter durante su mandato presidencial

Destacó por su papel activo, siendo la Primera Dama que contó con su propia oficina y convirtiéndose en la mejor consejera de su marido. Defensora de la salud mental e involucrada con causas humanitarias, cambió el papel que hasta entonces habían tenido las mujeres de los presidentes. Fue criticada a menudo por su estilo pragmático, un tanto austero, en el que destacaban vestidos lisos de líneas sencillas y firmas no tan conocidas. Una forma de vestir práctica, que sorprendía a veces por el uso de la moda vintage y que tenía sentido en el contexto de la época, marcado por la crisis energética y las tensiones de la Guerra Fría.

© Getty Images

Rosalynn Carter en Texas, 1971

© Getty Images

Rosalynn Carter en Florida, 1980

"Las mujeres son las arquitectas de sus propias vidas", llegó a decir Rosalynn, una filosofía que aplicaba también a su armario, tomando sus decisiones. Apostaba por conjuntos monocromáticos, huía de los estampados de la época e incluso llegó a prescindir de los zapatos de tacón durante un evento público, todo un pequeño gesto revolucionario por aquel entonces.

36
© Getty Images

Nancy Reagan, glamur y Alta Costura (1981-1989)

Antes de llegar a ser Primera Dama, Nancy fue actriz durante los años dorados de Hollywood, lo que tendría sin duda que ver en la forma en la que aterrizó en la Casa Blanca. Ordenó cambiar la vajilla por una nueva de precio desorbitado y llenó su vestidor con diseños de Alta Costura, lo que causó al principio tantas críticas como fascinación después. Tenía una estrecha relación con diseñadores como Oscar de la Renta, James Galanos o Bill Blass y sus elecciones estaban planificadas al detalle, incluidos sus peinados, pues viajaba siempre que podía con su peluquero. "Ha hecho honor cada día durante ocho largos años a la palabra «estilo»", aseguró entonces la periodista Barbara Walters de ABC News.

© Getty Images

Nancy Reagan en la Casa Blanca con el vestido inaugural de James Galanos, en 1981

Sus vestidos de gala fueron icónicos, especialmente aquel que lució durante la gala inaugural de 1981, un brillante diseño blanco de tirante asimétrico, confeccionado por Galanos. La opulencia marcaba a veces sus looks, en los que no faltaban bordados exquisitos, volantes o joyas llamativas como los collares de perlas.

© Getty Images

Ronald Reagan y Nancy Reagan en 1985

© Getty Images

Ronald Reagan y Nancy Reagan

Aunque fue sin duda el rojo el color que marcó su vestidor, un tono que llegó a ser bautizado como el Reagan Red. Intenso, brillante y poderoso, dominaba sus vestidos, trajes de falda y chaqueta o abrigos. "No es sólo lo que llevas puesto. También es la forma en la que haces las cosas. Ella las manejaba de una manera muy elegante y glamurosa, que es lo que debe ser la primera dama del país", dijo la diseñadora Carolina Herrera de ella.

46
© Getty Images

Hillary Clinton, del poder al pragmatismo (1993-2001)

Aunque a lo largo de los años su estilo pasaría a ser reconocido por sus trajes elegantes, sus combinaciones prácticas con pantalones y los diseños que repetía, cuando llegó a la Casa Blanca suscitó la atención por todo lo contrario. Y es que escogió para el baile inaugural aquel icónico vestido en color azul noche diseñado por Sarah Phillips, una creación de encaje y gasa poco convencional.

© Getty Images

Hillary Clinton durante el segundo debate presidencial de candidatos, en 2016

“Mi querido Oscar de la Renta siempre se ha impuesto el enorme desafío de convertirme en un icono de la moda”, dijo la que fuera Primera Dama y posterior candidata a la presidencia durante los premios CFDA en 2013. "Se podría decir que defiendo el proyecto del traje con pantalón". Y es que es posiblemente el look más representativo de Hillary Clinton, gran amiga del diseñador de origen dominicano. Aunque fue Ralph Lauren la firma que se encargó de vestirla durante su campaña electoral, logrando despertar especial atención con aquel en color azul que llevó en 2016 cuando aceptó su nominación.

© Getty Images

Hillary Clinton en el campus de la Universidad de Carolina del Norte, en 2016

© Getty Images

Hillary Clinton en Las Vegas, 2016

Los tonos que bañaban con más frecuencia sus elecciones eran el azul, el rojo y el blanco, un guiño a la bandera de Estados Unidos que usó como  estrategia estilística durante su candidatura.

56
© Getty Images

Michelle Obama, un soplo de modernidad (2009-2017)

Inolvidable es aquel vestido blanco de inspiración nupcial que Michelle Obama llevó al baile inaugural, un diseño con detalles de tul y flores bordadas firmado por Jason Wu que arrancó tantos aplausos como la complicidad que el matrimonio demostró tener ante el público. La abogada y escritora, a quien llegaron a comparar con Rosalynn Carter por su implicación en la Casa Blanca y el tándem que formaba con Barack, destacó durante el mandato por su mezcla de prendas de lujo y marcas asequibles, entre las que incluía J.Crew, Gap o Target.

© Getty Images

Michelle Obama en el programa 'The Tonight Show With Jay Leno', en 2012

Los colores vibrantes fueron una de las novedades que aportó a la moda como Primera Dama, con looks en intensos fucsias, naranjas, amarillos, turquesas... Tampoco temía los estampados llamativos ni los geométricos, desafiando ese clasicismo asociado tradicionalmente a su cargo.

© Getty Images

Michelle Obama en Texas, 2019

© Getty Images

Michelle Obama en Miami, 2012

Su interés en la moda la llevó en aquellos años a apoyar a diseñadores emergentes como Jason Wu, Narciso Rodríguez o Thakoon Panichgul, utilizando sus diseños en actor relevantes.

66
© Getty Images

Melania Trump con un dos piezas gris

Melania Trump, moda de contrastes (2017-2021 y actualidad)

Al contrario que su predecesoras, la exmodelo evitó involucrarse activamente en debates políticos o legislativos, manteniéndose como una figura simbólica más que ejecutiva durante la presidencia de Donal Trump. Y ahora que el empresario regresa al poder, parece que seguirá la misma línea, pues parece que por el momento no planea mudarse a tiempo completo a la Casa Blanca. ¿Veremos algún cambio significativo en su estilo?

© Getty Images

Donald Trump y Melania Trump en el baile inaugural, en 2017

Durante los últimos años nos ha dejado elecciones con un enfoque lujoso y sofisticado, en las que no se ha limitado exclusivamente a diseñadores estadounidenses. Ralph Lauren y Calvin Klein han firmado algunos de sus atuendos más formales, pero también destacan entre sus preferencias Dior, Givenchy, Valentino o Hervé Pierre, creador de aquel vestido inaugural blanco de escote Bardot.

© Getty Images

Melania Trump en 2018

© Getty Images

Melania Trump en 2018

Su estética comulga más bien con la tendencia del lujo silencioso, con accesorios y joyas discretas, altos tacones de Louboutin y elegantes abrigos o capas de paño. Aunque también ha dejado espacio para looks polémicos, como aquel con una parka verde de Zara en la que se podía leer el mensaje I Really Don’t Care, Do U? (En realidad no me importa, ¿y a ti?) y que escogió en 2018 durante una visita a un centro donde se encontraban los niños hijos de inmigrantes que fueron separados de sus familias tras la política de su marido.