A una yema cruda de huevo se le inyecta un misterioso líquido verde. Con esta escena, se da la bienvenida a los espectadores al universo de La sustancia, la nueva película protagonizada por Demi Moore y dirigida por Coralie Fargeat. En la cinta, se cuestiona la tiranía de los estándares de belleza, un tema que, a su actriz, una de las mujeres más hermosas del mundo, le pareció necesario abordar desde la perspectiva del terror.
Las claves en el vestuario de La sustancia
En la película, que llegó a cines españoles el pasado 11 de octubre, el color se emplea de manera simbólica, sobre todo si hablamos del vestuario. Tonos vivos de rojo, amarillo o azul marcan el comienzo de la trama para dejar en evidencia, a medida que avanzan las escenas, el borrado que nos infligimos al someternos a transformaciones físicas en favor de los cánones actuales.
Obsesión por mantenerse joven
La protagonista, una veterana estrella del aeróbic llamada Elisabeth Sparkle (Demi Moore), de 50 años, viste siempre de colores primarios saturados. Este leotardo azul cian que lleva en el episodio final de su programa, Sparkle Your Life, nos recuerda al que luce en el antiguo retrato que cuelga en su oficina. Ha sido su uniforme de trabajo durante décadas.
El uso estratégico del color
Su abrigo de paño amarillo, sin embargo, es la prenda clave de la cinta: lo usa de principio a fin, como un presagio visual del proceso que su cuerpo está a punto de experimentar, como el huevo que se parte al entrar en contacto con la sustancia. Elisabeth es la matriz de la que nacerá su nueva versión mejorada y más joven, Sue (Margaret Qualley), que tiene unos 20 años.
Belleza y decadencia
A medida que la película avanza hacia un final catastrófico para Elizabeth, el uso del color cambia para representar ese camino hacia la autodestrucción con colores turbios u opacos, de modo que este traje de terciopelo azul marino no es una elección casual sino que está dotada de intención. Sue, en cambio, viste de colores pastel con gamas de blanco que aluden a la inocencia, así como a la cosificación de la mujer.
La dama de rojo
Es un recurso que también observamos en Pobres Criaturas, una película en la que Emma Stone, a pesar de tener el cuerpo de una mujer adulta, piensa y actúa como una niña. Su vestuario de luminosos tonos se va oscureciendo conforme ella adquiere consciencia y experiencia. En La sustancia, los rojos profundos de la sangre y los azules de los cadáveres se apoderan del vestuario de Elizabeth, quien está dispuesta a todo con tal de no envejecer.
Complicidad máxima
Fuera de la pantalla grande, ambas actrices continúan interpretando a sus personajes de La sustancia, siguiendo la estela de otras intérpretes que, durante la promoción de sus películas, se han mimetizado con el papel a través de la moda. Recientemente, tenemos los ejemplos de Margot Robbie, quien hizo de Barbie, o de Jenna Ortega, conocida por el rol de Miércoles Addams.
Sensualidad pura a sus 61 años
El sensual vestido escote corazón de mosaico efecto espejo, con motivo de rosas rojas sobre fondo negro, que eligió Demi para la premiere de Los Ángeles tiene la firma de Oscar de la Renta; mientras que el de Margaret, mucho más naif, está realizado en tul rosa con lentejuelas plateadas y pertenece a la colección Alta Costura Primavera/Verano 2024 de Chanel.
Un cambio radical en sus looks de calle
En la presentación londinense de La sustancia, cuyo dress code era más informal, Demi Moore optó por un conjunto de sastrería oversize, de Loewe, que se compuso de una camisa de seda holgada, una americana en sarga de lana jaspeada, pantalones 'cargo' drapeados en viscosa y unos botines en lona con cuentas bordadas formando un motivo floral.
Más atrevida que nunca
La sastrería holgada, el denim y los accesorios de gran tamaño ahora conforman gran parte del vestidor de la intérprete, dejando en evidencia su transformación. Para el Festival de Tribeca 2024, llevó un tándem de chaleco y vaqueros blancos con botones dorados, imponentes joyas de latón dorado y unas impactantes zapatillas con diseño de puntera con dedos en relieve, todo de Schiaparelli.
La mejor vestida en cualquier evento
2024 ha sido un período de éxitos para la estadounidense, quien en febrero volvió a las pantallas como Ann Woodward, una socialité acusada de matar a su marido, en Feud: Capote vs. The Swans. La serie de HBO, escrita por Ryan Murphy, nos dejó con ganas de más y, por suerte, Moore tenía este nuevo proyecto pendiente por ver la luz, así que ha estado invitada a prácticamente todos los eventos señalados de los últimos meses.
Su melena XXL que provoca titulares desde Cannes
Del mismo modo que Sarah Jessica Parker, la reina Letizia o Andie MacDowell (quien además es madre de Margaret) han puesto de moda la aceptación de las canas, Demi Moore ha ocupado incontables titulares desde la celebración del 77º Festival de Cannes por su brillante melena XXL. Con ella, hace frente a la creencia errónea de que si tienes más de cierta edad, no puedes lucir el pelo largo, ¡y le sienta de maravilla!
Desafiando el paso del tiempo
El retorno por todo lo alto de Demi Moore a las grandes producciones en este último par de años ha desatado un verdadero furor en torno a su impresionante físico pasados los 60. Desde sus fotografías en bikini hasta las rutinas de ejercicio que le han permitido mantenerse en forma, nos atrae inevitablemente todo lo que tiene que ver con ella.
¿Por qué todos hablamos de Demi Moore?
Es por ello que fue la elegida para dar vida al personaje de Elizabeth, una presentadora en decadencia, sometida a la presión de cumplir con los cánones de belleza. Este culto a la juventud es precisamente lo que La sustancia ha querido resaltar con su ácida crítica, la cual ha cautivado a las audiencias de todo el mundo tras solo un fin de semana desde su estreno.
Una más entre sus hijas
A principios de 2024, Moore volvió a generar debate cuando posó en la alfombra roja de la fiesta posterior a los Oscar de la mano de sus hijas: Rumer, de 35 años, Scout LaRue, de 32, y Tallulah, de 30, que son fruto de su matrimonio con Bruce Willis. Entre la menor de las chicas y su madre existe una diferencia de tres décadas, pero la actriz de Ghost parece una más en esta fotografía.
El renovado estilo de Demi Moore
Esa noche, Demi nos dejó a todos boquiabiertos al enfundarse en esta creación de pronunciado escote corazón con aberturas en el pecho, de Atelier Versace, que se realizó a medida para ajustarse con ese exquisito satén marrón chocolate a su tonificada figura. Su melena larga, que por aquel entonces todavía no le rozaba las caderas, reforzaba aún más esa imagen desenfadada de la actriz que ha causado sensación en 2024.