Este sábado, 28 de septiembre, la catedral de la Anunciación de Santa María (más conocida como la Metropolitana) ha acogido la esperada boda de la princesa Teodora de Grecia con el abogado estadounidense Matthew Kumar. Una cita de renombre en la que, ha aparecido de la mano de su hermano Pablo de Grecia con un vestido de novia creado especialmente para ella por la modista Celia Kritharioti y una de las tiaras más importantes de la dinastía helénica, por fin se convierten en marido y mujer. Lo han hecho ante una larga lista de invitados de importantes Casa Reales europeas entre las que no ha faltado elegancia y el glamour a través de sus looks. Analizamos nuestros favoritos.
La mujer del jefe de la Casa Real de Grecia, Marie Chantal Miller, ha acudido junto a su familia al enlace convirtiéndose en una de las más espectaculares. Ha lucido un maravilloso vestido largo de seda en tono tierra de Louis Vuitton, con el cuerpo fruncido para conseguir un drapeado de ensueño, original cuello alto, manga tres cuartos y una falda con peso. Lo ha completado con un original bolso de mano transparente con pequeños cristales, el modelo Tequila Clutch de Aquazzura.
Las sobrinas de la novia, Olympia de Grecia y Arrietta Morales, han formado parte de las damas de honor que le han acompañado hasta el altar. Y como es tradición, llevan el mismo color, en este caso un precioso azul satinado. Olympia ha optado por un diseño de dos piezas compuesto por una blusa de manguita corta, cuello redondeado bajito y larga falda midi, en cambio, la de raíces españolas ha elegido una blusa con cuello drapeado.
Irene Urdangarin
Irene Urdangarin, la sobrina del rey Felipe V, se ha convertido en una de las invitadas más reveladoras. Si en la preboda triunfó con un estilismo chic, esta vez ha lucido un vestido negro largo de terciopelo con flores bordadas que ya llevó su madre, la infanta Cristina, en un evento en Nueva York en 2010. Como gran amante de la moda, ha añadido una capa semitransparente azul (una de las tendencias estrella entre las invitadas españolas) y a sus pies destacan unas... ¡sandalias metalizadas planas!
Esta vez Sassa de Osma ha apostado por la sobriedad para su look de invitada. Acompañada de su marido, Christian de Hannover y su familia política, su cuñada Ekatherina de Hannover y su suegra, Chantal Hochuli, ha deslumbrado enfundada en un romántico diseño largo de encaje que forman pequeñas flores en diferentes tonos azulados con cierre de botones delantero, mangas abullonadas y cuello baby, está firmado por Luisa Beccaria. En sus manos encontramos el bolso Couturier Micro de Aquazzura, ¡ideal!
El glamour llegó a la gran cita de la mano de la cuñada de Sassa de Osma, Ekatherina de Hannover, quien acompañada de su hermano y su madre ha deslumbrado con su elección. Se trata de un sencillo e impoluto traje largo azul clarito de cuello cerrado, de manga larga en la que destaca el detalle de las plumas cosidas a mano y una falda con gran caída.
Hace tres años Nina Flohr estaba entrando por la misma puerta de la catedral de Atenas para prometerse amor eterno con el príncipe Philippos de Grecia. Ahora regresa a este enclave como invitada estrenando un sencillo y acertado vestido azul de corte midi, manga larga y el detalle fruncido a la cadera que favorece a su figura. A este diseño de la marca Adam Lippes, le ha encajado a la perfección un par de salones a tono con broche joya y una cartera en mano.
Apostando por el color estrella de la boda, el azul, la infanta Cristina ha lucido un precioso vestido de inspiración griega con el que se ha posicionado como una de las mejores vestidas. Destaca porque el tejido satinado eleva su diseño, además del cuerpo de manga a la sisa que tiene pequeños frunces a los hombros y a la cadera y una larga falda. A sus pies hemos localizado unas sandalias de cuña y un bolso tipo clutch bañado de purpurina plateada.
La hija de la princesa Alexia de Grecia, nacida en España, ha sorprendido por su elección. Dejando a un lado las tendencias punteras, Amelia Morales ha rescatado del armario real de su madre un diseño de gala vintage que llevó nada más ni menos que en 1999. Compuesto por un favorecedor escote que deja parte de los hombros al aire y bañado de pedrería, se ha postulado como una de las más llamativas del evento.
,type=downsize)
