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"Estas botas están hechas para caminar" ("These boots are made for walking") cantaba Nancy Sinatra en 1966 sin ser consciente de que su frase se convertiría en una de las más repetidas del universo de la moda. La estadounidense pronunciaba uno de los lemas que más se apropiarían las firmas de moda en las décadas posteriores, sentenciando un himno que, incluso hoy, bien podría tener sentido, pues si este calzado ya es una opción válida sea la temporada que sea, este Otoño/Invierno 2024-2025 se lleva siguiendo los códigos estéticos de uno de los últimos términos en hacerse viral en Internet, la horse girl.
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La horse girl, como su nombre indica, arrastra tras su denominación la estética que toma como punto de partida el vestuario característico de las mujeres que practican hípica, pero al mismo tiempo, de aquellas que bien podríamos ver en un rodeo en el Lejano Oeste. Tanto una vertiente, como la otra, parecen estar siendo las dos fuentes de inspiración a la hora de vestir de muchas de las chicas y mujeres que inspiran en moda. Nada que llegue por casualidad, pues si echamos la vista atrás y repasamos la línea del tiempo de la vida de muchas de las referentes de estilo del momento, encontramos que muchas de ellas han publicado fotografías suyas en redes sociales cuidando, o montando, a caballo. Algunas, como la actriz española María Pedraza, se han declarado fanáticas de este deporte, y otras, como Kendall Jenner, han confesado que les ayuda en su gestión emocional a modo de terapia. Pero aún hay más, pues otros nombres, como Beyoncé, también han recurrido a los caballos para presentar las imágenes promocionales que acompañan a sus proyectos. Uniendo todos estos acontecimientos, y sumando la reciente aparición de Bella Hadid subida a un caballo por Nueva York a propósito de un evento, era tan solo cuestión de tiempo que la tendencia horse girl aterrizara en nuestras vidas.
La pequeña de las Hadid, que fue la responsable de que muchos usuarios de TikTok definieran su estilo bajo el nombre de weird girl ("chica rara"), ahora encarna a la perfección la estética cowboy, sin embargo, la última actualización de esta tendencia va un paso más allá y extiende su estética a un abanico más amplio de looks y prendas. Si bien vestir como si estuviéramos en el rancho resulta la opción más fiel a la estética, lo cierto es que para las amantes de la discreción también hay hueco en esta apuesta. Pero vamos por paso, pues primero hablemos de cómo podemos recrear al 100% a una horse girl estilo Bella Hadid.
Cómo ser una horse girl del Lejano Oeste
La modelo lleva semanas sorprendiéndonos con atuendos plenos de ropa que encajan perfectamente en esta categoría. Ella es pura inspiración, por lo que, si queremos imitarle, podemos escoger tres tipos de looks diferentes. Por un lado, el más adecuado para estos días en los que todavía hace un poco de calor es ese que apuesta por lucir mini vestidos con faldas en vuelo con botas camperas. Por otro, y también para los días en los que el frío todavía no amenaza nuestros días, escoger un top encorsetado y combinarlo con faldas vaqueras midi y las mismas botas puede ser una opción estupenda, así como, de noche, sustituir esa misma falda por un pantalón de piel que llevemos dejando ver tan solo la punta del calzado. Si, en cambio, ya empieza a refrescar, podemos lucir una camisa de manga larga ceñida al cuerpo, desabrochar algún botón del escote para darle un aire más sensual, combinarla con pantalones vaqueros campana, e, imprescindible, un sombrero de ala ancha. Para darle todavía más notoriedad, un truco acertado para poner el broche final definitivo con estilo es el de añadir un cinturón con hebilla plateada al atuendo.
Guía para unirse a la tendencia en la calle
Aclarada la manera de vestir de las horse girls más Western, llega el momento de hablar de aquellas que prefieren atuendos más discretos, pero que no se quieren quedar atrás en la tendencia. Para ello, una buena manera de crear un look es tratar de pensar que se va a ir a una clase de hípica. Un pantalón ceñido beige (podemos sustituirlo por unos leggins), con una camisa metida por dentro, una americana, y botas de montar o ecuestres (sean de salto, de doma clásica, de polo o con polainas) es suficiente. Y, como sucede con cualquier estética, podemos jugar con diferentes prendas y sustituir algunas de las piezas. Por ejemplo, la americana puede sustituirse por una chaqueta de flecos, o una de cuero. Las botas, si queremos, pueden tener un poco de tacón. Incluso, si queremos una apuesta más informal y adaptada a la generación Z, una pauta de estilo que no falla es la de escoger el tejido vaquero como protagonista, llevándolo tanto en total looks, como, al menos, protagonizando la mayoría del conjunto.
La estética horse girl no solo es una oda a la vestimenta ecuestre, sino que se convierte en un juego de prendas clave que permiten infinitas combinaciones, adaptándose tanto a los estilos más atrevidos como a los más discretos. Desde los mini vestidos con botas camperas hasta los pantalones ceñidos con camisas ajustadas, esta tendencia ofrece opciones para todas. These boots are made for walking, decía Nancy Sinatra. Cuánta razón tenía, porque hoy, más que nunca, este tipo de calzado parece estar hecho para llevarnos a conquistar el asfalto.