Ayer se celebró el desfile de Primavera/verano 2025 de Dolce & Gabbana en el marco de la Semana de la Moda de Milán. Colección con la que Domenico Dolce y Stefano Gabbana han aprovechado para homenajear a Madonna, la diva absoluta (y eterna) del pop. Para ambos diseñadores, la reina de la música y la estética rebelde es comprendida como una musa desde el inicio de su relación, cuando la cantante vistió la firma por primera vez en 1991 con motivo de la promoción de su documental Madonna: Truth or Dare. Tal es, a día de hoy, su amistad que los directores creativos no dudaron en rendirle culto con la esperada presentación.
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La estadounidense es sinónimo de transgresión, personalidad y seguridad en una misma, imagen que cualquiera que la observe comparte acerca de la misma. Tanto la puesta en escena como las modelos que se subieron a pasarela recordaban a un icono de moda que no deja de inspirar. De las pelucas rubias, inspiradas en el icónico peinado noventero de Madonna, a los diseños de indumentaria con copas cónicas, pasando por las creaciones de carácter lencero en tonos oscuros.
Y en el front row, ella. Se presentó al encuentro con una configuración de la casa italiana. La también intérprete lució un vestido largo en encaje con abertura sobre un bodi de color negro. Completó el atuendo con un velo de grandes dimensiones, una corona de oro con incrustaciones negras y perlas a contraste, un collar de aires maximalistas de diamantes y calaveras, medias de rejilla, guantes largos y zapatos de tacón con tira en la zona del empeine.
Y eso no fue todo. Después, se organizó una fiesta que, por supuesto, contó con el mismo hilo conductor que el show. Un evento con amigos para el que volvió a regalarnos una de sus combinaciones imposibles tan hipnóticas. En dicha ocasión, mantuvo el bodi, los guantes, las medias y el collar y añadió un vestido blanco semitransparente con detalles drapeados, corsé, estola de pelo y minivelo para cubrir su cabellera. ¡Le han bastado dos fórmulas para reafirmar que su magnetismo sigue intacto!