Este año se celebra el 50 aniversario de una de las marcas más conocidas de nuestro país, Pedro del Hierro, y desde la firma han querido conmemorarlo con dos eventos muy especiales que tienen el mismo fin: poner en valor el trabajo de su fundador y demostrar que es "mucho más que un logo en un polo". De esta forma, se ha organizado una exposición en el Museo Lázaro Galdiano de Madrid que recorre la historia del maestro y que ha servido como acompañamiento perfecto al espectacular desfile que tuvo lugar ayer en el Instituto del Patrimonio Histórico Español. Fue una velada única y muy especial a la que no faltaron celebrities de la talla de Isabel Preysler, María Pombo, Eugenia Silva, Alaska o Juana Acosta, entre otros muchos rostros conocidos, quienes quisieron conocer de primera mano las propuestas de la casa para la próxima Primavera/Verano 2025, ideadas por Álex Mirallés y Nacho Aguayo.
Nos damos cita con este último, el director creativo de la línea femenina de la empresa, para que nos explique de primera mano cómo han vivido este 'cumpleaños' tan especial y repasar algunos de sus grandes hitos a lo largo de estos últimos años, como haber podido vestir en numerosas ocasiones a la reina Letizia, con quien se deshace en halagos.
HOLA.COM: Este año la cosa va de honrar y celebrar el 50 aniversario de Pedro del Hierro. ¿Qué legado crees que dejó este diseñador en la moda de nuestro país?
NACHO AGUAYO: Lo más destacable para mí, o lo el resumen que saco de todo lo que le conozco, es que Pedro del Hierro fue un visionario, un gran artista y que tuvo una gran intuición comercial, que fue visionario a la hora de plantear que el futuro era democratizar la moda. Fue un amante de la belleza y de todo lo bello no solo en moda, sino también en música y en danza, era un gran experto, pero además tuvo mucha visión comercial e industrial para hacer un gran negocio.
¿De qué forma continúas tú ese legado? ¿Cómo le tienes presente a la hora de idear las colecciones?
Pedro al final es como una columna vertebral, y los que trabajamos en la marca vamos un poco habitando ese cuerpo. Es como una canción, Pedro asentó las bases y nosotros vamos cantando canciones a su alrededor, o haciendo melodías cada temporada. Él decía una frase que yo repito mucho, que para él la elegancia es belleza, pero también es novedad. Entonces, tenemos que esforzarnos en mirar para adelante, no solo mirar hacia atrás con el legado, archivo y demás, sino que también tenemos la responsabilidad de buscar novedad, la clienta de Pedro del Hierro está ávida de que la sorprendamos, de que demos opciones nuevas, que vea que somos contemporáneos, que se sienta identificada con nuestras propuestas, con la interpretación de la tendencia llevada a sus necesidades… Es un poco el tipo de mujer, el tipo de belleza y el tipo de industria al que se refería pero llevado al 2024/2025, que es lo que querría Pedro que hiciéramos.
Esta colección está bautizada como La leyenda del tiempo. Explícanos un poco cómo fue la búsqueda de este nombre y por qué lo elegisteis al final.
La leyenda del tiempo es un disco que sacó Camarón de la Isla a finales de los 70, justo a la vez que Pedro del Hierro presentaba sus primeras colecciones de hombre y mujer. Él estuvo durante muchos años haciendo solo mujer, y luego se atrevió a hacer hombre, nosotros hacemos ambos, y hemos partido de ese hito que fue la primera vez que Pedro se atrevió a hacer hombre. Justo en ese momento, Camarón de la Isla sacó un disco, que se llamaba La leyenda del Tiempo, en el que quiso ser disruptivo y quiso introducir al flamenco modernidad y novedad, le criticaron muchísimo pero el flamenco no ha vuelto a ser lo mismo.
Por su parte, a Pedro del Hierro le criticaban porque también era muy rompedor, tiene looks totalmente actuales si ves los archivos, puso faldas a los hombres cuando nadie lo había hecho, le hizo la falda pantalón a Miguel Bosé, le vistió para el Florida con un mono azul que fue muy comentado, era un valiente y el tiempo al final le ha dado la razón, igual que a Camarón de la Isla. Nos servía este punto de partida para hacer un tema que también es mucho de la casa, que es la tradición la tradición española, y partiendo de esa tradición española, de un flamenco llevado al 2025 pero mezclado con siluetas de los 80. Dentro de ese cajón de ideas ha salido la nuestra colección de para el verano que viene.
La inspiración de las prendas de cara a la próxima primavera/verano 2025 está clara, pero cuéntanos un poco más que podemos encontrar en esta colección.
Hemos mezclado siluetas de los 80, la elegancia de esa época y el gusto por vestirte y arreglarte con otras siluetas muy del 2025. Queríamos tener algo con un punto flamenco, un toque español. Tenemos mucho blanco, hemos intentado huir del rojo como tal porque era un poco obvio, tenemos blanco negro, y luego tonalidades de rosas mezcladas con coral, azul pálido que con negro nos encanta, nos tiene enamorados. Por otra parte, hemos hecho prendas bordadas, tenemos a dos personas, una madre y una hija artesanas que están intentando recuperar todo el tema de los bordados, de la tradición, y nos han bordado dos piezas.
¿Qué tendencias crees que van a ser virales la próxima primavera?
Creo que va a haber mucha transparencia, un minimalismo maximalista, un gusto por lo minimal con accesorios ms potente, una vuelta a los 90, y luego mucha sastrería de mujer combinada con prendas súper femeninas. Me da que vamos a ir por ahí, que van por ahí los tiros, hacia ese Calvin Klein de los 90, Donna Karan, ese rollo siempre me ha encantado y creo que está empezando otra vez ese gusto por ese momento.
Comentabas antes la importancia de saber hacer moda comercial, fundamental para que Pedro del Hierro se mantenga como la empresa que es. ¿Cómo conseguís el equilibrio entre hacer prendas que luzcan en pasarela con otras que sean más ponibles y se vendan?
Pedro del Hierro tiene las 24 horas los 7 días a la semana presente a la clienta, y le da opciones para esas 24/7. Tenemos opciones desde casual hasta algo más going out o incluso alfombra roja. El desfile sirve como punto de partida para luego desarrollar las colecciones, será lo que vendamos más elevado, pero luego los colores, la estampación y la temática se derivan a las otras. Al final es defile es como la excusa, el punto de partida de las colecciones que luego se trabajan de manera comercial y de manera que industrialmente y comercialmente sean buenas, y yo creo que gracias a ese esfuerzo que se está haciendo de posicionar y de dar a conocer al creador de Pedro del Hierro, que la gente sea consciente que no solo es un logo, le estamos dando mucho valor a la marca y los resultados están siendo increíbles, estamos creciendo a nivel ventas, facturación, presencia… Estamos viviendo un momento muy dorado, y creo que en parte porque con la pasarela te das cuenta que es una marca de lujo, pero de lujo accesible. Al final son prendas, contemporáneas, apetecibles, es un fondo de armario que te arregla tu día a día y que tienes opciones para todo tipo de personas y todo tipo de eventos.
¿Por qué decidís esta vez sacar el desfile de Ifema, como es habitual, y hacerlo en un lugar tan distinto? ¿Qué ventajas e inconvenientes habéis encontrado a la hora de organizarlo?
Nosotros siempre apoyamos a Ifema, somos parte del calendario y estamos orgullosos, nos cuidan mucho, pero sí que de vez en cuando nos gusta salir, al final salir de allí te da la posibilidad de enseñar la ropa de otra manera y que no solo sea una caja negra. Luego, nosotros queríamos hacer una fiesta, y el hecho de tener otro espacio te permite tener esa celebración, tiene muchos pros, pero también tiene otras contras, por ejemplo, todo el mundo está en Ifema, hay que desplazarlo todo. Pero te da la posibilidad de enseñar tu producto de otro modo, para nosotros, el desfile no solo es un pase de modelos, al final es una experiencia lumínica, artística, sonora y, por supuesto, estética, entonces el poder llevar tu propuesta a un sitio en el que como que te englobe todo tu concepto… Esta vez lo llevamos a un sitio circular en el que el suelo parece agujas del reloj, el hecho de que sea la primera vez que se hace un desfile en un edificio tan increíble… hace que sea que sea bonito, especial, único y los 50 años de Pedro del Hierro lo merecían.
Se merecían un desfile especial, pero no solo eso. También se ha inaugurado una exposición que hace un resumen sobre la historia de la marca. ¿Qué vamos a encontrar en ella y por qué crees que la gente debería ir a verla?
En ella le damos valor a Pedro del Hierro como creador. En España hay mucha incultura de moda, no tenemos ese ansia de saber y de conocer, y mucha gente no sabe quién era él, no sabe qué hizo, qué logros tuvo ni que gracias a él la industria de la moda es distinta hoy en España. A mí me gustaría que la gente que vaya a la exposición saliese con la idea clara de que fue un gran creador, gran visionario y un gran empresario, y que le coja el cariño, o parte del cariño, que le tenemos nosotros.
Las nuevas generaciones, e incluso las redes sociales, han cambiado los hábitos de consumo también en la moda. ¿Buscáis adaptaros a esas novedades, la inmediatez y la viralidad o preferís manteneros al margen?
Nosotros por supuesto estamos atentos a todas las formas de consumo, a las tendencias, a las fomas de entender la moda, no podemos negarnos a lo obvio y no podemos negar que existe esa necesidad, pero yo creo que nuestra clienta no está en ese mood. Nosotros seguimos presentando colecciones, ideamos una colección global en toda la temporada que vamos alimentando mes a mes y seguimos en ese en ese empeño. Tenemos una historia que contar, tenemos unas colecciones que vender y no creo que que la solución sea ‘lo quiero, lo tengo’, pero es verdad que, cuando sí que lo pueden tener, somos los primeros que queremos que lo compren, porque lanzamos unas campañas apetecibles, unas promociones, siempre tenemos un gancho para que la clienta lo consuma. A veces hacemos lo de ‘see now, buy now’ con Pedro el Hierro o con otras marcas del grupo, vamos probando y vamos haciendo, dependiendo de la marca, lo que mejor se adapte a ella, pero sobre todo a su clienta.
En Tendam trabajáis con figuras muy conocidas. Por ejemplo, en Pedro del Hierro con Tamara Falcó, que tiene su propia colección cápsula. ¿Qué crees que os aportan este tipo de colaboraciones tanto a nivel empresarial como de imagen?
De imagen, es innegable que trabajar con Tamara te posiciona y es tremendamente comunicable, te da visibilidad. A nivel marca y propuestas, es un soplo de aire fresco, es una persona que es una gran consumidora de moda, entonces tiene el listón muy alto, tiene claras las tendencias, los colores, todo esto nos lo transmite, y luego nosotros junto con ella llevamos a cabo la colección. Es una suerte que alguien externo a nuestra burbuja de día a día tenga una idea y unos conceptos que tú ni siquiera te habías planteado, para mí, eso es un regalo, como creador me nutre y la verdad es que trabajar con ella, que es extremadamente educada, simpática, agradable, y que luego su trabajo sea tan visible es un privilegio.
Uno de los sueños que nos confiesan muchos diseñadores al hablar con ellos es que quieren vestir a la reina Letizia, y tú ya lo has hecho varias veces. ¿Cómo es ese momento en el que una de las grandes exponentes de nuestro país también a nivel de moda vista algo que has creado?
A mí me emociona muchísimo, una de las mayores suertes que tengo de vestirla es conocerla, y conocer a la Reina es quererla. A mí me emociona que apueste por nosotros, lo que más me gusta son los ratos que tenemos probándola y hablando con ella, porque es un gusto. Yo siempre digo que todo el mundo debería tener la suerte de conocerla, porque es una persona extremadamente educada, simpática, inteligente… ya la admiraba como reina, pero, además, como persona, hace que cuando se pone tu ropa te llene un orgullo, una felicidad tremenda. Yo me siento un privilegiado por haber podido conocerla y por seguir teniendo su confianza en mí y en la marca. Además, da mucha visibilidad, y cuando se ha vestido de nosotros siempre ha tenido muy buenas críticas, y eso te da mucha satisfacción, el ver que hacemos buen tándem.
Para visibilidad enorme, la de vestir a Cristina Pedroche en las campanadas, aunque, en ese caso, las críticas son algo diferentes, ¿no?
Es verdad que ella te preparar para esas críticas, en esta vida hay que pasárselo bien, a mí me gustó, porque ese año fue el año de la pandemia y el mensaje que tenía era muy claro, a mí me pareció una oportunidad de hacer algo distinto, de salir de la zona de confort. Cristina tiene muy claro el espectáculo que tiene que dar, creo que lo hace bien. Ella está en abierta a esas críticas, que también es de agradecer que una persona sepa que no va a gustar a todo el mundo, y a mí me gustó porque en ese momento había un mensaje que dar, era un año muy duro en el que hacer algo lúdico y bonito, algo que nos hizo disfrutar, nos hizo emocionarnos y nos hizo soñar lo agradecimos muchísimo.
Hay que ponerlo todo en contexto, y es verdad que Cristina tiene un espectáculo muy concreto que no es al que estamos acostumbrados, pero su mensaje cala y había que darlo, necesitábamos ese soplo de aire fresco y creo que lo consiguió. Y luego, tengo que decir que el look, que lo criticaron mucho, luego se lo puso mucha gente, el edredón se lo puso Rihanna, y mil ejemplos más. Fue visionaria.
Después de estos (y otros) grandes hitos, ¿qué sueño te queda por vivir con Pedro del Hierro? ¿A quién te haría ilusión vestir?
Pues quiero seguir vistiendo a quien visto, soy un afortunado por contar con el apoyo de tantísima gente que confía en nosotros y nos quiere, para ocasiones, además, súper especiales en su vida, como los Goya, una alfombra roja, un momento único… Eso me encanta, yo quiero seguir vistiendo a la Reina, me hace muy feliz trabajar con ella y su equipo, nos da, además, la posibilidad de hacer cosas también distintas. A nivel empresarial, seguir creciendo con Pedro, yo sueño con soñar todavía más a lo grande y más internacionalmente, pero estamos por buen camino, y seguir creciendo seguir vendiendo y seguir despiertos para para no caer en el olvido.