Solo un par de días después de dar por culminados los Juegos Olímpicos de París 2024, el rey Guillermo Alejandro y la reina Máxima ofrecieron una recepción a los atletas ganadores de medallas de la delegación de Países Bajos en el palacio Huis ten Bosch, una de las cuatro residencias oficiales de los Orange, ubicado en La Haya.
El look que Máxima repite desde hace una década
Máxima dejó en casa todas las prendas casuales, deportivas y de colores patrióticos que llevó durante su estadía en la capital francesa, y sacó a relucir una faceta más sobria con este vestido recto de color gris, el cual tiene la firma de Natan. No es la primera vez que se lo vemos, de hecho, porque lo adquirió hace más de una década.
Estamos ante un look repleto de guiños al estilo por el que se hizo conocida cuando aún ni siquiera era reina sino princesa de Países Bajos porque combinó este vestido gris de escote drapeado y falda tubo con un cinturón fino de cuero rojo, el mismo que lleva incorporando a esta pieza para definir su cintura desde hace más de una década.
Como calzado escogió unos salones de patente rojo, de Miu Miu, con tacón alto y grueso y un lazo sobre el empeine. Se trata de un par que estrenó por allá en 2011 y que, al menos según hemos podido saber, se ha calzado hasta 13 veces en actos oficiales dentro y fuera de Países Bajos.
Al darse la vuelta para saludar a los atletas laureados, pudimos apreciar que la reina neerlandesa recogió su pelo en un sofisticado moño trenzado, aunque prescindió de tocados u otros accesorios para la cabeza. De esta forma, dejó a la vista sus pendientes colgantes de piedras rojas con cuentas doradas, un par del que todavía no se conoce procedencia.
Conexión de moda con los Juegos Olímpicos
La reina Máxima lució este estilismo, pero con un tocado tipo pamela rojo y guantes a juego, en 2015, con motivo de la inauguración oficial de Casa Leontien, una fundación creada por la deportista olímpica Leontien van Moorsel que asesora a personas que sufren trastornos de la alimentación. Es por ello que tal vez no sea una coincidencia que la nacida en Argentina escogiera dicho look para recibir a la delegación tras los Juegos Olímpicos de París nueve años más tarde.