Si bien no vimos a Máxima en la cena de gala del Louvre, donde sí estuvieron Mary de Dinamarca y doña Letizia, la neerlandesa dijo 'presente' en la ceremonia de apertura que se celebró el viernes, solo 24 horas después. Una vez inaugurados los Juegos Olímpicos de París, sus dos hijas mayores, Amalia y Alexia, se sumaron al plan, y notamos que en todos sus looks se aprecia claramente el estilo personal de cada una.
Los Orange acudieron a una de las competencias de natación este domingo. Allí, fiel a su estilo llamativo y vibrante, Máxima estrenó un conjunto fluido de blusa y falda larga, de Etro, que se adorna con un estampado colorido de cachemira. Para definir su cintura, incorporó un cinturón con hebilla de rafia, de Oscar de la Renta.
La primogénita de los reyes de Países Bajos se enfundó en un mono blanco de pantalón palazzo que cubrió parcialmente con una americana oversize color beige y llevó alrededor del cuello una bufanda naranja como homenaje a los olímpicos holandeses. Su bolso de mano, realizado en piel dorada con textura acanalada, es de Marina Raphael.
Con los años, la princesa Alexia ha desarrollado un estilo muy original, en el que conviven prendas más modernas y urbanas con otras muy sofisticadas. La mediana de las hermanas complementó un vestido largo naranja con esta chaqueta universitaria extragrande confeccionada en lana y cuero granulado, de la colaboración de moda entre Denham y la delegación neerlandesa.
Tanto la Reina como su hija Amalia remataron sus respectivos looks con bolsos de Marina Raphael, una de las diseñadoras de complementos que más les gustan, pero el diseño que realmente llamó la atención de la prensa especializada en moda fue el bolso de cuero trenzado color marrón, de Bottega Veneta, que llevó Alexia.
Horas antes, la familia se reunió con los deportistas de equitación y aprovechó el paseo por los establos para lucir ropa más práctica. Alexia se decidió por un look clásico, compuesto por una camisa a rayas, de Polo Ralph Lauren, vaqueros rectos y las zapatillas Nike Cortez con detalles en verde.
Máxima recurrió a sus confiables estampados bohemios, gracias a este tándem plisado de flores, de Alexis, que culminó con unas zapatillas de correr, de Anta Sports. Por su parte, Amalia encarnó un espíritu más deportivo con su camiseta de escote-lazo, de Sézane, un bolso efecto 'coco' en color crudo de la misma firma francesa, vaqueros anchos y unas zapatillas básicas, de Autry.
Las princesas Amalia y Alexia de Países Bajos se unieron a sus padres en París el pasado sábado 27 de julio para visitar la villa olímpica donde se hospedan gran parte de los atletas de su delegación. Los colores nacionales tuvieron protagonismo en los looks de las mujeres de la familia, aunque cada una interpretó de manera diferente este 'dress code'.
Máxima apostó por una fórmula que equipara la elegancia con la comodidad. En lugar de llevar pantalones vaqueros, como sí hicieron sus hijas, ella eligió una americana entallada en denim, de ME + EM, a juego con unos salones de punta fina con tacón bajito. El punto de color lo puso su vestido largo naranja, que va en sintonía con un bolso de hombro de croché.
Amalia lució una imagen más relajada, conjuntando una americana azul cobalto, de Zara, que actualmente está agotada en España, con unos vaqueros desteñidos de bajo ligeramente acampanado. Como calzado, escogió las zapatillas de la marca Autry en color crudo para combinar con su bolso efecto cocodrilo, de Sézane.
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