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Nació en Málaga, y gran parte de su familia vive en Marbella. A los 13 años, Adriana Villapadierna se fue a estudiar al colegio Ampleforth sin saber muy bien que aquella experiencia cambiaría su vida , ayudándola a crecer como persona. “Fue una etapa que me hizo madurar de manera independiente y segura. Estar expuesta a un ambiente internacional me hizo abrir la mente y reforzar los valores que hoy en día mantengo muy presentes”, nos cuenta una de las benjaminas de la familia Villapadierna, con quien conversamos en estas líneas.
© Chesco López
© Chesco López-¿Te sientes vinculada de alguna manera con el mundo de la moda y el diseño?
-La moda ha estado muy presente desde mi infancia. Mis dos abuelas son un gran referente de estilo para mí, y, por supuesto, mi tía Alicia. De pequeña pasaba tardes disfrazándome con ropa del armario de mi abuela Elena.
-¿Qué lecciones vitales importantes atesoras de tu familia?
-Siempre me he considerado una persona muy familiar y, a medida que he ido creciendo, me he dado cuenta de la importancia de pasar tiempo con ellos. Soy la única niña de los Villapadierna, pero tengo la gran suerte de tener a mis primos.
“La moda ha estado presente desde mi infancia. Mis abuelas y mi tía Alicia son un gran referente de estilo. De pequeña pasaba tardes disfrazándome con ropa del armario de mi abuela Elena”
© Chesco López-¿Quiénes son tus grandes referentes en la vida y qué te han enseñado?
-En lo personal, mi tía Alicia y mi madre son, sin duda, mi gran ejemplo por su lucha frente a las adversidades y entrega hacia los demás. Y en lo laboral, mi tío Ricardo, quien es un gran referente en cuanto a esfuerzo y trabajo. Por otro lado, mi abuelo Juan siempre nos ha insistido en la importancia de la humildad y la generosidad. Él es cofundador de la ONG Amsudán.
-¿Qué cosas te preocupan especialmente de la sociedad en la que vivimos?
-A veces me preocupa que la tecnología nos aísle de los que nos rodean y, sin darnos cuenta, pase la vida mientras miramos una pantalla. También considero que existe una falta de empatía hacia aquellos que más lo necesitan, como los afectados por las guerras o la pobreza.
“Siempre he sido muy familiar y, a medida que he ido creciendo me he dado cuenta de lo importante que es pasar tiempo con ellos. Soy la única niña de la familia Villapadierna, pero tengo suerte de tenerlos”
© Chesco López-¿En qué momento vital dirías que te encuentras en la actualidad y cómo te gustaría verte de aquí a cinco o diez años?
-Estoy viviendo un momento feliz y estable. He aprendido la importancia del equilibrio, priorizando pasar tiempo con mis seres queridos y conmigo misma. Por ello, me encantaría seguir valorando esta suerte y poder responder lo mismo dentro de cinco o diez años.
-¿Y un plan irrechazable que te haga feliz?
-Al ser de Marbella, asocio los mejores planes con el mar: salir a navegar o pasar el día en la playa con mis amigas son algunos de ellos. También, me encanta disfrutar de un fin de semana en el campo con mi familia jugando a juegos de mesa, junto a la chimenea y paseando.
“Mi abuelo Juan siempre nos ha insistido en la importancia de la humildad y la generosidad. Él fundó su propia ONG”
© Chesco López-¿Cómo cuidas tu físico y tu salud?
-Le doy mucha importancia a un buen cuidado de la piel, evitando la exposición solar y manteniendo estrictamente mis rutinas de día y noche . En cuanto al deporte, estoy trabajando en mantener una rutina constante, aunque en ocasiones me resulte difícil encajarlo.
-¿Cuál dirías que es tu libro de cabecera?
-Intento dedicar un espacio a la lectura en mi tiempo libre. El último libro que me he leído -y recomiendo- es: El poder del espejo , de Louise Hay. Creo que puede ayudar a conocerse a uno mismo en mayor profundidad y aprender a quererse mejor. Siguiendo esa línea, también me encanta la lectura de Marián Rojas.
“Al ser de Marbella, asocio los mejores planes con el mar, como salir a navegar o pasar el día en la playa con mis amigas. También, me encanta disfrutar del campo jugando a juegos de mesa y paseando”
© Chesco López
