La suya es una historia de sueños y metas cumplidas, pero no de un sencillo camino de rosas. Detrás del éxito de Inés Arroyo hay mucho esfuerzo, dedicación, autoexigencia, miedos e incertidumbre, pero a base de no rendirse y de creer en sí misma ha logrado crear una firma que se ha consolidado como una apuesta sostenible de moda. Su nombre comenzó a sonar con fuerza en las redes sociales, donde destacaba como influencer y su estilo conquistó a miles de seguidores, pero poco a poco fue centrándose en su faceta de empresaria y directora creativa de LAAGAM, lo que comenzó siendo una ilusión y ha terminado siendo una realidad en la que siempre ha contado con el apoyo de su familia. “Mis padres son mis grandes referentes y quienes me han apoyado para luchar por mis sueños”, nos explica sobre sus comienzos.
Ahora, en pleno mes de celebraciones y reuniones familiares, Inés posa para ¡HOLA! con moda para estas fiestas y hemos podido hablar con ella de su estilo, sus apuestas para esta época del año y sus próximas metas.
“Soy una fanática de la Navidad. Es mi momento preferido para apostar por “looks” donde la fantasía y las lentejuelas se mezclan con tejidos y piezas más de diario”
—¿Qué es para ti la moda? ¿Qué es lo que te apasiona de esta industria?
—La moda envuelve mi vida por completo. A nivel personal y profesional. Soy una amante del producto, pero también me parece un mundo maravilloso que no solo se queda en las prendas; involucra tantas cosas, desde la parte creativa hasta la parte de materializar todo ese imaginario, hay muchísimas partes implicadas y todas me parecen superinteresantes. Es un sector donde se une la racionalidad con las emociones, me fascina. ¿Lo que me apasiona de la industria? Que, aunque es mucho más complicada de lo que la gente cree, siempre hay un reto divertido detrás.
—¿Cómo te definirías?
—Soy una persona con las ideas muy claras y, a la vez curiosa, ambiciosa y sensible. Soy muy de mi gente y me encanta luchar por mis sueños hasta conseguirlos, por eso soy muy consciente de que nadie te regala nada y que hay que trabajarlo mucho. Pero, por encima de todo, y es lo que me han inculcado siempre desde pequeña, soy buena persona y creo que es el adjetivo que deberíamos ser capaces todos de tenerlo como definición.
—¿Cómo dirías que es tu estilo?
—Siempre digo que mi estilo cambia cada día. Con esto me refiero a que me encanta mezclar, y siempre lo defino como muy ecléctico. Hay días que voy más básica o neutra, pero siempre con un toque que eleva el look con accesorios, por ejemplo, y al día siguiente, mezclo texturas y estampados diferentes para looks más arriesgados. Me aburren las tendencias y sé que no todas son para mí, aunque me pueda encantar ver cómo otra persona lo adapta a su estilo. Creo que es lo divertido de la moda, que te deja jugar, pero siempre tienes que sentirte tú.
—Eres directora creativa de una firma de moda que es referente de estilo. ¿Vives muy pendiente del reloj? ¿Gestionas mucho tu tiempo o prefieres improvisar?
—Me encantaría improvisar más, pero por mi trabajo necesito gestionar muy bien mi tiempo para llegar a todo. El reloj es un accesorio imprescindible para mí.
—Aún no has cumplido 30 años y llevas una década triunfando en la moda, ¿ha sido duro emprender?
—Más de lo que la gente cree. Es un camino de mucha incertidumbre, donde los problemas son diarios y donde te conoces a ti misma en situaciones que nunca has vivido. Pero es magia también, aprendes cada día algo nuevo y siempre miras hacia atrás con orgullo y al futuro con ilusión.
“Emprender es un camino de mucha incertidumbre, donde los problemas son diarios y donde te conoces a ti misma en situaciones que nunca has vivido”
—¿Cuáles crees que son las claves de tu éxito?
—Supongo que la constancia y no tirar la toalla en momentos complicados. Siempre te pones más creativa en momentos adversos y esos actos son los que nos han llevado a estar donde estamos. Remar siempre con fuerza e ilusión, que es lo que mueve todo.
—¿Qué te dijo tu familia cuando les planteaste que ibas a crear una firma de moda?
—Tengo la suerte de tener unos padres que siempre han creído en mí en todo y para todo. Ellos son mis grandes referentes y quienes me han apoyado para luchar por mis sueños, siempre dedicándole mucho esfuerzo, sin perder jamás la ilusión ni la racionalidad. Además, mi firma, LAAGAM, es un proyecto completamente familiar: mi marido y mi hermano son mis socios.
—¿Hay alguien de tu familia que se dedique a ello?
—Mi madre es una enamorada del arte desde siempre, pinta unos cuadros maravillosos y desde pequeña me ha transmitido esa parte más creativa que yo he desarrollado hacia el mundo de la moda. Y también mi suegra, que es quien me enseñó a entender de confección, tejidos, patrones y amar el producto. Tiene tiendas de moda de lujo y con ella empecé mis primeros viajes a París y Milán en las semanas de la moda cuando tenía 17 años.
—¿En qué te inspiras a la hora de diseñar?
—En todo, en nada en concreto. Aunque sí es verdad que en estas últimas colecciones me he empapado de los álbumes de fotos de mi madre de cuando era joven y me divierte muchísimo cómo actualizar esas prendas al ahora. También en LAAGAM los estampados y los colores juegan un papel fundamental, así que siempre voy con los ojos superatentos a todo lo que veo, porque cualquier cosa me puede inspirar.
—¿Quiénes son tus referentes en el mundo de la moda?
—No tengo un referente en concreto, sino que me gusta el mix de diferentes chicas. Desde Alexa Chung a las hermanas Olsen o Chloë Sevigny, ellas están entre mis favoritas.
“Me aburren las tendencias y sé que no todas son para mí, aunque me encanta ver cómo otra persona las adapta a su estilo. Creo que es lo divertido de la moda, que te deja jugar, pero siempre tienes que sentirte tú”
—Las redes sociales han sido importantes en tu carrera, ¿es fácil vivir con cientos de miles de seguidores pendientes de tus pasos?
—Estoy superagradecida a mi comunidad, tengo la suerte de que es superrespetuosa y cariñosa conmigo. Yo siempre he querido limitar mi vida privada con la profesional de Instagram, así que me siento superlibre de poder compartir lo que quiero y creo que puede resultar interesante. Para mí ha sido clave mantener siempre los pies en el suelo.
—¿Qué es lo más positivo que has sacado de tu etapa como ‘influencer’?
—Las personas maravillosas (me he llevado grandes amistades) que he conocido y sigo conociendo. Como también las experiencias vividas, me siento superafortunada y agradecida.
—Este otoño has celebrado tu aniversario de boda, ¿qué balance haces de este año?
—¡Un año ya, sí! ¡Y qué año! Volvería a ese día siempre. El subidón posboda lo seguimos teniendo y realmente ha sido un año emocionante juntos, de mucho disfrute y de mucho mucho amor.
—Ahora que llegan las Navidades, ¿cuáles son los ‘looks’ a los que apostarás para estas fiestas?
—Soy una fanática de la Navidad. Y es mi momento del año preferido para apostar por looks donde la fantasía y las lentejuelas se mezclan con tejidos y piezas más de diario. Vestidos mini tipo bailarina, lazos con terciopelo, lentejuelas modo disco ball , y también soy fan de faldas extravagantes mezcladas con prendas de punto.
—¿Qué le pides al año que viene? ¿Cuáles son tus próximos retos?
—Le pido algo que seguramente muchos damos por hecho, pero salud y salud para los míos. Cada día es un regalo y soy más consciente de ello con esta vida tan frenética que llevo. Mis retos: llevar mi firma al siguiente nivel. En 2024 nos vamos a hacer “más mayores” y solo muero de ganas por todo lo que está por venir.
“Mi madre es una enamorada del arte, pinta unos cuadros maravillosos y me ha transmitido esa parte creativa que he desarrollado hacia el mundo de la moda”