Una sonrisa permanente se dibuja en sus labios, desde que aterriza en París. Se nota que está en un momento espléndido y qué mejor ocasión que esta para sumergirse en la magia de la alta costura. Margarita Vargas , en su 40 cumpleaños, y tras diecinueve años de feliz matrimonio con Luis Alfonso de Borbón, padre de sus cuatro hijos, dice ‘sí’ a la belleza de la moda con mayúsculas, desde su olimpo sagrado: la ciudad de París.
-Margarita, 2023 es el momento de tu 40 cumpleaños, cuatro hijos y casi 20 años junto a Luis Alfonso de Borbón, el amor de tu vida. ¿Se puede pedir más?
-La verdad es que no puedo pedir más a la vida, solo dar las gracias por lo afortunada que soy de tener un marido, al que cada día quiero más, y unos hijos tan maravillosos ¡Feliz es poco para describir cómo me siento!
-Posas por primera vez con espectaculares diseños de alta costura. ¿Qué te ha parecido la experiencia?
-Me lo habían propuesto varías veces y me daba un poco de reparo... pero ha sido una superexperiencia: me ha encantado y ¡me lo he pasado fenomenal!
“Es increíble ver la perfección con la que están hechos estos vestidos haute couture, lo que hay detrás de cada uno de ellos, de cada diseño único… Son una maravilla, auténticas joyas”
-¿Qué te sugiere este trabajo tan minucioso y artesanal de la moda?
-Es increíble ver la perfección con la que están hechos estos vestidos, lo que hay detrás de cada uno de ellos, de cada diseño único… Son una maravilla, auténticas joyas.
-En tu armario, ¿hay algún diseño ‘haute couture’?
-No... ¡ya me gustaría!
-En un tiempo en el que todo es para ‘ya’, la inmediatez es una virtud, y la calidad se sacrifica en pos de lo comercial. ¿Cómo ves el futuro de la alta costura?
-Es cierto que el mundo actual está muy acelerado y la inmediatez está a la orden del día, pero estamos hablando de alta costura, de piezas de arte, únicas y hechas a mano. A pesar de que tome su tiempo y sea laboriosa, yo pienso que esta faceta de la moda siempre tendrá un lugar para aquellas personas que la aprecian.
-En los últimos años, tu estilo ha experimentado una evolución hasta ser un referente. ¿Eres consciente de este cambio, o lo has vivido de manera natural?
-La verdad es que ha sido muy natural. Según vas cumpliendo años, te sientes más segura y te vas afianzando más con el estilo con el que, realmente, te sientes más identificada.
“¿Cómo veo el futuro de la alta costura?En el mundo actual, la inmediatez está a la orden del día, pero estamos hablando de piezas de arte, únicas y hechas a mano. Pienso que esta faceta de la moda siempre tendrá un lugar para aquellas personas que la aprecian”
-¿Cómo definirías el tuyo a día de hoy?
-Yo diría que casual, me encanta ir cómoda, de sport pero con un toque especial, por ejemplo ir con sneakers y con una blusa romántica. De noche, me gusta el estilo lady like, mezclado con alguna tendencia que me guste.
-¿Qué te parece el buen momento que atraviesa la moda española?
-¡Me parece estupendo! En España hay diseñadores que me encantan y cada día surgen más.
-¿Tienes algún diseñador favorito?
-De alta costura, me encantan Armani, Ellie Saab, Valentino, Schiaparelli y Fendi.
-¿Siempre sentiste interés por el mundo de la moda, o ha sido un descubrimiento a lo largo de los años?
-Toda la vida he sido supercoqueta y me ha encantado arreglarme, aunque el gusto por la moda lo he ido adquiriendo con los años.
“Es increíble ver la perfección con la que están hechos estos vestidos, lo que hay detrás de cada uno de ellos, de cada diseño… Son una maravilla, auténticas joyas”
-A pesar de tu discreción, sabemos que estás comprometida con muchas causas solidarias. ¿Cómo podría ayudar la moda a crear un mundo mejor?
-Yo creo que hay muchas maneras de ayudar a crear un mundo mejor. Cuando se quiere ayudar, siempre hay un camino, todo depende de lo que se quiera hacer. Me encanta la iniciativa que han tenido algunas marcas, diseñando una prenda cuyas ventas se destinan a fines benéficos
-Te casaste muy joven y te convertiste en madre a los 23 años. ¿Cómo viviste la maternidad entonces?
-Siempre he dicho que era un bebé teniendo un bebé, pero es lo mejor que me ha pasado en la vida: aprender y crecer con mi hija ha sido un privilegio. Al ser tan joven, lo quería hacer todo perfecto pero, luego, te das cuenta de que no necesitas perfección, sino disfrutar de cada momento con mucho amor.
-¿Fue muy diferente a como la afrontaste hace cuatro años, con tu hijo menor?
-Sí, ¡muy diferente! Enrique vino de sorpresa y fue el mejor regalo que nos ha dado la vida… Al tener treinta y cinco años, lo vives de otra manera. Lo disfrutas desde el principio, sabiendo que si no duerme la siesta a la hora establecida, no pasa nada; que si se cae, va a estar bien, sin agobios y disfrutando cada etapa, descubriendo la maternidad de una manera más relajada y desde la experiencia.
-Entre tu trabajo, tus cuatro hijos y tu labor humanitaria, ¿te queda tiempo para ti?
-¡Me queda poco!, pero me organizo bien... Siempre hay que sacar un ‘huequito’ para uno mismo.
“Diría que mi estilo es casual, me encanta ir cómoda, de sport, pero con un toque especial, por ejemplo ir con sneakers y con una blusa romántica. De noche, me gusta el estilo lady like”
-Entonces, ¿estás de acuerdo en que, para cuidar, hay que cuidarse?
-Sí, definitivamente; es importante estar bien para poder dar lo mejor de ti a los demás.
-Siempre has sido una gran amazona. ¿Sigues practicando equitación?
-¡La equitación es mi gran pasión! En este momento no puedo montar, ya que me operaron de cervicales el año pasado; todo salió bien, pero la recuperación se está haciendo un poco dura y larga. En septiembre retomaré este deporte que tanto me gusta.
-¿Qué tiene de especial el mundo de los caballos, que tanto te fascina?
-Los caballos son los animales más nobles del mundo y, cuando tienes la suerte de poder conectar con ellos mediante un deporte... ¡es una sensación preciosa! Para mí, los caballos son la unión a mi familia, a mi pasado y a quien soy…
-Luis Alfonso, tu marido, es también un gran deportista. ¿Han heredado vuestros hijos esta afición por los deportes?
-Sin duda. Los mellizos son superdeportistas, como su padre, y ahora están muy entusiasmados con el fútbol. Eugenia está montando a caballo muchísimo y le encanta. Enrique aún es muy pequeño, pero es al que más le gustan los caballos.
“No puedo pedir más a la vida, solo dar las gracias por lo afortunada que soy de tener un marido, al que cada día quiero más, y unos hijos tan maravillosos. ¡Feliz es poco para describir cómo me siento!”
-¿Qué valores tratáis de inculcarles?
-Honestidad, respeto, empatía, solidaridad, amor, perdón, gratitud, responsabilidad... entre otros. Lo que queremos es que nuestros hijos sean buenas personas de corazón. Eso es lo más importante.
-Hace poco, Luis Alfonso ha lazando Juega España para aprender, entre otras cosas, historia o geografía de nuestro país. ¿Cuéntanos un poco más sobre esta iniciativa?
-Efectivamente, creó el juego Juega España durante la pandemia, para dar a conocer, de una forma divertida, la Historia de España. Es un juego en el que pueden participar de 2 a 8 personas, y es ideal para jugar en familia, o con amigos. Yo que he estudiado magisterio, y he sido maestra, me pareció una idea fabulosa: qué mejor manera de aprender que jugando.Tras el éxito cosechado con el primer juego, han surgido otras temáticas que mi marido ha ido desarrollando como: Conoce España que ayuda a repasar la geografía española; Gánate el cielo, para descubrir la vida de los santos; Juega para nota, con el que descubrir los cantantes y grupos musicales españoles; o Juega al refranero. Ideas no le faltan, el problema es sacar tiempo para redactar los juegos, ya que llevan mucho trabajo.
-¿Qué os gusta hacer en familia a vosotros?
-Nos encanta ir a comer; al cine, o ver una ‘peli’ en casa, con palomitas; viajar, jugar a juegos de mesa… En definitiva, estar juntos.
-Por último, después de la magia de este posado, ¿te gustaría repetir experiencia como modelo de excepción?
-¡Sí! Me lo he pasado estupendamente durante un día, ha sido un lujo poder vestir esas prendas, verdaderas obras de arte.