Su embarazo le hace irradiar una luz especial. Y es que la actriz y modelo Annabelle Belmondo, nieta del inolvidable Jean-Paul Belmondo, está en un momento dorado en lo personal y también en lo profesional. Con su característico estilo afrancesado y su desenfado ‘a la americana’, nuestra protagonista nos acompaña en un soleado día en la Ciudad de la Luz, para demostrar, una vez más, que nadie como ella para expresar con moda qué es el verdadero ‘allure’ parisino.
-Annabelle, tu carrera en el cine se está consolidando y en la moda eres todo un referente, además estás iniciándote en la música y la fotografía. ¿En qué momento vital te encuentras?
-Estoy disfrutando mucho de todos los proyectos creativos en los que participo, pero también estoy priorizando mi vida personal. Voy a aumentar la familia y siento que este es el trabajo más importante que nunca he tenido. Adoro esta nueva fase de mi vida.
-Si tuvieras que elegir entre todas tus facetas artísticas, ¿por cuál te decidirías?
-Por cualquiera que me parezca interesante, me haga implicarme y aprender. De la actuación, me encanta la búsqueda y el trabajo que supone interpretar a alguien que no se parece en nada a ti.
“Mi vida es un mix total de París y California. Y mi estilo, una contradicción constante y una mezcla de las dos culturas con las que he crecido”
-A la hora de aceptar un personaje, ¿qué te resulta determinante para decidirte?
-Me gustan las historias que hablan de situaciones cotidianas con las que todos lidiamos, pero de las que se saca algo bello, aunque sea un momento en el tiempo, y que el espectador no puede pasar por alto.
-¿Qué te inspira a la hora de crear un personaje, cómo los preparas?
-Depende en gran medida del tipo de papel. Dedico mucho tiempo a leer y ver películas que me ayuden a crearlo.
-Posar como modelo es también como actuar. ¿Cómo afrontas cada sesión?
-Creo que modelar es más directo que interpretar. Te piden una forma de actuar concreta, que te muestres de una determinada manera y, lo cierto, es que me divierto mucho metiéndome en este rol y viendo el resultado de las fotos.
-En este editorial nos descubres París, tu ciudad natal, con los diseños de otoño-invierno de Roger Vivier. ¿Qué te sugiere esta colección?
-He tenido el honor de trabajar con la firma en muchas ocasiones y es que ¡es una marca tan icónica! Esta colección es desenfadada y muy fácil de llevar; los zapatos, los bolsos y demás accesorios son todo lo que necesitas para realzar cualquier look.
-¿Siempre ha estado entre tus favoritos?
-Sí. Las grandes firmas como Roger Vivier que se han reinventado a lo largo de décadas, pero fieles a su estilo y esencia, siempre me han fascinado.
-Defines tu estilo como una mezcla de toques parisinos y californianos. ¿En qué se traduce en tu día a día?
-Sí, mi vida es un mix total de París y California. Me encanta trasnochar con amigos en una terraza, tomando una copa de vino, pero también adoro levantarme pronto para practicar yoga y empezar el día con un buen zumo. Creo que mi estilo es una contradicción constante y una mezcla de las dos culturas con las que he crecido.
“Hace cinco años que no consumo fast fashion, procuro comprar cosas que en un futuro puedan usar también mis hijos”
-Has afirmado en alguna ocasión que te gusta la moda atemporal. ¿Te preocupa la sostenibilidad del sector?
-Mucho. Es devastador ver los vertederos con ropa que aún lleva, en algunos casos, la etiqueta. Y ver cómo la gente se pone la ropa una o dos veces y la tira. Hace cinco años que no consumo fast fashion, procuro comprar cosas que, en un futuro, puedan usar también mis hijos.
-¿Qué podemos hacer para conseguir un equilibrio entre ‘fast fashion’ y ‘eco responsabilidad’?
-No lo sé... Pero sí sería de ayuda que la gente cambiase de mentalidad y comprase pensando en la atemporalidad y en algo que puedan cuidar, para que perdure para siempre. Nuestras abuelas lo hacían. Mi abuela, por ejemplo, tenía ropa y bolsos en perfecto estado y no era una gran consumidora.
-Tu abuelo, el inolvidable actor, Jean-Paul Belmondo, destacó por su talento, pero también por su carisma y estilo. ¿Cómo era en su vida cotidiana?
-Muy divertido y cariñoso. Siempre tenía una sonrisa en su cara, era valiente y atrevido. Y estaba muy pendiente de los que le rodeaban. He tenido mucha suerte de tenerlo en mi vida.
-¿Qué recuerdas con más cariño de tu relación con él?
-Siempre quería estar cerca de él porque me hacía muy feliz.
“Mi abuelo Jean-Paul Belmondo era muy divertido, y cariñoso. Siempre tenía una sonrisa en la cara, era valiente y atrevido. Y estaba muy pendiente de los que le rodeaban”
-¿Te dio algún consejo para tu carrera de actriz?
-Que me divirtiera, que trabajase duro, pero sin olvidar esa parte de diversión. Me explicó que él eligió ser actor porque disfrutaba haciéndolo.
-¿A qué actrices/actores admiras?
-Me encantan Margot Robbie, Jennifer Lawrence y Meryl Streep, siempre.
-Como actriz y modelo, tu imagen es también una herramienta de trabajo. ¿Te cuidas mucho?
-Siempre me ha gustado cuidarme. Practico yoga, natación, boxeo, procuro dormir bien y como sano. Pero no me obsesiono, ni me resisto a un buen queso o al pan.
“Estoy disfrutando mucho de mi profesión, pero también estoy priorizando mi vida personal. Voy a aumentar la familia y siento que este es el trabajo más importante que nunca he tenido”
-¿Te preocupa envejecer?
-Claro, pero lo que me preocupa es dejar de ser capaz de hacer cosas, como viajar, practicar ejercicio o disfrutar la vida como lo hago.
-¿Qué te gustaría tener en tu vida, en un futuro no muy lejano?
-¡Mi propia familia!