Existe un halo de misterio sobre lo que sucede en la vida de Ana de Armas ahora y lo que conocimos de ella cuando la vimos debutar en nuestro país. Ana Celia de Armas Caso nació en Cuba y a los 14 años ingresó en laEscuela de Arte de este país, sin embargo, tardó muy poco en darse cuenta de que si quería cumplir su sueño de ser actriz , tendría que volar lejos de su familia. Su primera parada fue Madrid; gracias a sus abuelos palentinos, consiguió el permiso para entrar en España y, a los dos meses, ya estaba rodando la serie El internado. Su destino parecía escrito. En 2009 se mudó a Nueva York, aunque ese no fue el paso definitivo, ya que una propuesta televisiva de nuevo en España la hizo volver para protagonizar 17 capítulos de la serie Hispania, la leyenda. Tras este pequeño break, la actriz lo volvió a intentar en Los Ángeles e hizo lo que para muchos aterra y emociona a partes iguales, comenzar de cero.
Ana de Armas no sabía inglés, así que ese fue su primer reto: aprenderlo bien y en poco tiempo. No quería que la encasillaran en personajes escritos específicamente para actrices latinas. Tampoco contaba con un respaldo de papeles protagonizados o grandes producciones que avalaran su talento, pero, en esos momentos en los que la vida te pide ser valiente, la actriz hispano-cubana confío en su decisión y comenzó a crearse su camino con vista a un objetivo: el éxito del que ahora somos todos testigos.
Dos veces nominada a los Globos de Oro (2020 y 2023), este año por primera vez estrena candidatura en los Premios BAFTA a mejor actriz y en los Premios Oscar, gracias a su papel de Marilyn Monroe en la película Blonde.
Keanu Reeves fue su primer compañero de reparto en una producción americana, Knock Knock (2015). La experiencia fue tan positiva que no dudó en invitarla a protagonizar en 2016 el thriller Exposed, película producida por el actor.
Nominada a su primer Oscar, Ana de Armas ha hecho historia gracias a su papel en Blonde
Tras siete años de duro trabajo, compañeros de la talla de Jamie Lee Curtis, quien ha catalogado su talento de “inconfundible”, y una larga lista de producciones cinematográficas,el momento de Ana de Armas ha llegado gracias al desgarrador biopic de Marilyn Monroe : “Inconscientemente, empecé a descubrir un paralelismo que, por experiencias personales de la vida, había entre ella y yo. Fue un personaje que me ha dejado sacar todas las cosas que yo tenía dentro y que no había tenido la oportunidad de usar. Tratar de crecer como actriz, encontrar la manera de orientar mi carrera y hacer los personajes que quiero... Toda esa lucha y esa insistencia en ser reconocida por el tipo de actriz que quiero llegar a ser, me sirvió para poder construir el personaje. Marilyn fue una actriz que luchó muchísimo por lo mismo, por ser respetada como profesional, como intelectual, y siempre estaba encasillada en un tipo de personajes. Quizá eso fue lo que me hizo entender ese reto, crear algo más acorde con lo que ella sentía que podía ofrecer”, declaró Ana de Armas durante la presentación en el Festival de Cine de San Sebastián.
Esta fue de la última vez que vimos a la actriz, nominada al Oscar, por nuestro país. Ahora sus apariciones son contadas y estudiadas, pero ella, en la alfombra roja, se mueve como nadie. Su belleza es tan hipnótica que pocas veces ha apostado por maquillajes estridentes o demasiado llamativos. Sus ojos color ámbar, su rostro aniñado de facciones dulces y sensuales y esa sonrisa de haber cumplido un sueño hace que cualquier aderezo sea casi innecesario.
“Empecé a descubrir paralelismos que, por experiencias personales de la vida, había entre Marilyn y yo” (Ana de Armas)
Rodeada de los mejores profesionales, en 2022 ha cambiado de estilista. Si antes, su consejera en cuestiones de moda era Karla Welch, una de las más reconocidas en Hollywood, ahora ha decidido dejarse llevar por Samantha McMillen, artífice de la imagen de Elle Fanning o January Jones, y de los looks más importantes de la carrera de Ana de Armas, durante estos últimos 12 meses.
“Toda esa lucha para ser reconocida por el tipo de actriz que quiero llegar a ser me sirvió para poder construir el personaje de Marilyn” (Ana de Armas)
En cuanto a sus diseñadores de cabecera, Louis Vuitton es una de las firmas francesas por las que siente verdadera predilección, tanto es así que, durante la promoción de Blonde, la actriz ha elegido los diseños de Nicolas Ghesquière para deslumbrar frente a los focos. ¿Uno de los últimos? El palabra de honor mosaico con el que pisó la alfombra de los Globos de Oro o el espectacular vestido plisado, escote en pico y color rosa chicle con el que homenajeó a Norma Jean durante la Mostra de Venecia. Su estilo lo tiene claro. Excepto alguna nota de color, como fue el caso del espectacular look de diva anteriormente citado, la actriz apuesta por colores como el blanco, el negro y el azul marino para enfrentarse al escrutinio de los medios y, casi siempre, está en la listas de las mejores vestidas.
Ella ha sabido construir, con armonía y lejos de parecer poco cercana hacia el público, un icono que admiramos desde los que la vimos dar sus primeros pasos en la pantalla. Por ello, tras su nominación a los Premios Oscar, vemos un excelente trabajo de superación y confianza en ella misma. Ana de Armas fue valiente y creyó que era posible conquistar la meca del cine y nos lo ha demostrado. Todos nuestros mejores deseos y, por supuesto, gracias por hacernos ver que los sueños, con esfuerzo y tesón, se pueden cumplir.
Las claves de una estrella
Cambio de rumbo
La experiencia, las tablas sobre la alfombra roja y un toque diferente. Algo ha cambiado en la puesta en escena de Ana de Armas. ¿Lo más reseñable? Samantha McMillen, una de las estilistas más conocidas en Hollywood, se ha puesto manos a la obra durante este pasado 2022 para construir la impecable imagen de la actriz. Destacamos su apuesta por looks glamurosos, en sus acabados glitter, pero sin perder el toque minimal en cortes y colores. Han conseguido el perfecto equilibrio.
Secretos beauty
Su belleza es incuestionable. Pero sí podemos aprender los trucos que han puesto a prueba a los focos más exigentes. Ana de Armas siempre apuesta por potenciar la mirada: tonos tierra, malvas o dorados son el match perfecto para su ojos color miel. En cuanto a la piel, jugosa y fresca, por lo que siempre apuesta por fórmulas ligeras y una buena preparación. Para ella la hidratación es la clave. ¿Un tip que nunca falla? Aplicar el contorno de ojos previamente enfriado en la nevera. El efecto flash está asegurado.