Es muy bonito cuando las nuevas generaciones siguen los pasos de sus padres. Sofía Tcherassi ha crecido hablando de moda, respirando el mundo de la moda y en la visión de la firma que su madre, Silvia Tcherassi, ha construido hasta convertirla en la más famosa del mundo latinoamericano. Y no solo. Ser una Tcherassi implica mucha disciplina, gran pasión, sensibilidad innata, gusto por los colores, feminidad para traducirla en las formas, audacia en la gestión de objetivos y concreción en la gestión del aspecto comercial en el justo equilibrio con la creatividad.
Sofía ha sido educada en esto y está lista para gestionar el futuro de la empresa junto a su madre. Hoy es la directora del ready to wear , diseña vestidos que mantienen su identidad lujosa y elegante, pero en una visión natural que hace que se lleven con espontaneidad y sin constricciones, valorando la identidad de sus propias clientas. Sofía es el gran éxito de Silvia, quien ve en ella la esencia de su pensamiento y estilo; su relación madre-hija es también de mentora-amiga, hablan el mismo idioma fashion, piensan en la misma onda y parecen idénticas, ya que tienen la misma actitud. Sofía, sin duda, se ha convertido en la mejor embajadora de su moda y de su visión estética.
—Sofía, ¿qué significa ser una Tcherassi?
—En el mundo de la moda el apellido Tcherassi se relaciona con una nueva aproximación al lujo y la elegancia. En muchos casos hemos sido pioneros y hemos impuesto tendencias. Mi madre y mi abuela son mujeres de buen gusto, sofisticadas, elegantes con un encanto natural, además son visionarias, disciplinadas y con éxito. Ser una Tcherassi implica tener una gran responsabilidad ante este legado que la familia ha construido y del cual me siento muy orgullosa. También implica hacer crecer ese legado. Junto a mi hermano Mauricio nos hemos impuesto este reto para el que estamos listos y preparados.
“Mi madre es una inspiración permanente. Es mi amiga y mi mentora. Alguien a quien he admirado desde niña y que he visto crecer y evolucionar siempre siendo fiel a lo que es. Como madre, es extraordinaria”
—¿Qué representa tu madre para ti? ¿Cómo es tu relación con ella?
—Mi madre es una inspiración permanente. Además, es una mujer que sabe lo que quiere, es arriesgada en términos creativos y un poco más tradicional en términos de negocios. Eso, combinado con su aproximación intuitiva a la moda, me ha permitido aprender de la mejor. Pero, si Silvia, la diseñadora, es admirada, la persona es mucho más, es cálida, tiene un sentido del humor muy especial y descubre la belleza en cualquier cosa… Como madre, es extraordinaria. Es mi amiga y mi mentora. Alguien que he admirado desde niña, que he visto crecer y evolucionar, siempre siendo fiel a lo que es.
—¿Cuáles han sido tus desafíos en el pasado y a cuáles te enfrentas ahora?
—Creo que, en el pasado, las decisiones más importantes fueron qué estudiar, dónde y luego decidir en qué iba a trabajar. Y hasta el momento, he cumplido esos desafíos: estudiar Diseño de Modas en Parsons, en Nueva York; hacer prácticas en Óscar de la Renta, Gabriela Hearst y The Row, y luego vincularme formalmente a Silvia Tcherassi. Hacia el futuro, estoy comprometida totalmente con el éxito de nuestra marca.
“Soy de la generación a la que le ha tocado terminar la universidad frente a un ordenador y graduarse virtualmente, pero sueño con un futuro mejor… Eso debe ser una motivación”
—¿Cómo te cuidas? ¿Hay un secreto familiar para mantenerse tan al día y guapa?
—No hay ningún secreto. Llevo un estilo de vida sano y no sigo ninguna de las dietas de moda, simplemente como equilibrado y con moderación, así mantengo mis niveles de energía y duermo mejor.
—¿Cuál es tu visión de la vida actual y tu cómo ves el futuro?
—Los últimos años han sido particularmente complicados: primero, la pandemia, y ahora, soplan vientos de guerra. Yo soy de la generación a la que le ha tocado terminar la universidad frente a un ordenador y graduarse virtualmente, pero sueño con un mejor futuro… Eso debe ser una motivación, porque si dejas que el pesimismo te domine, no vas a llegar a ninguna parte. Espero que después de todo esto haya un renacer y una nueva forma de apreciar la vida y el mundo.
—¿Cómo es tu vida? ¿Qué te gusta hacer?
—A pesar de que me encanta viajar, siempre añoro mi rutina y no me gusta dejarla. Mi rutina siempre es constante. En este momento estoy haciendo yoga tres veces a la semana y camino durante las mañanas en Coconut Grove, que es el barrio donde vivo. Me encanta porque es de los más antiguos de Miami y poder estar frente a la bahía de Biscayne me ayuda a empezar bien la mañana. Trato de leer, por lo menos, diez paginas al día. Ayer justo me terminé Normal People, de Sally Rooney, y lo recomiendo.
“Ser una Tcherassi implica tener una gran responsabilidad ante este legado que la familia ha construido y del cual me siento muy orgullosa”
—¿Te gusta vivir en Miami ? ¿Te gusta el arte, por ejemplo, y la energía del Design District?
—El Miami de hoy es totalmente diferente a cuando estudiaba en el colegio. Es una ciudad que se está convirtiendo en un centro internacional de innovación que ha capturado la atención de jóvenes emprendedores alrededor del mundo. Y creo, sin ninguna duda, que Art Basel fue lo que ayudó a reposicionar la ciudad ante el mundo. Proyectos como el Miami Design District, el Faena District, los nuevos museos o edificios de grandes arquitectos como Zaha Hadid, Renzo Piano, Herzog & de Meuron y Frank Gehry crean el marco para una ciudad que está apostando por su futuro. Siempre me ha gustado el arte, es una de mis grandes pasiones y una fuerte permanente de inspiración. Recientemente mucha gente de Nueva York y San Francisco se han mudado a Miami y eso le ha inyectado una energía especial. Me atrevería a decir que Miami está pasando por su mejor momento.
—¿Cómo te defines a ti misma?
—Creo que soy alguien que tiene una personalidad muy definida. Soy lo que ves. Tengo mis propias opiniones y mi propia visión. Y lo más satisfactorio de estos dos primeros años trabajando en la compañía es que se tienen en cuenta mis opiniones. Me complemento bien con mi madre porque, mientras ella es intuitiva, yo soy pragmática y eso definitivamente lo heredé de mi padre, Mauricio. Puedo decirte también que soy una persona observadora y puedo ver lo que otros no pueden.
Autenticidad y naturalidad
—¿Qué es lo más importante para ti ?
—Para mí lo más importante es la autenticidad y la naturalidad. No me gustan las pretensiones ni los excesos. En un mundo cada vez más “virtual”, creo que es importante que reflejemos lo que somos.
—¿Hacia dónde quieres ir? ¿Qué proyectos tienes?
—A corto y medio plazo, espero continuar como directora de ready to wear, ofreciendo una visión renovada en cada temporada y creando prendas únicas y especiales que reflejen esa “elegancia sin esfuerzo” que nos caracteriza y no el uniforme de la temporada. Y, en particular, me gustaría seguir desarrollando nuestra línea de accesorios, a la que veo con mucho potencial, y colaborando con mi madre en la ejecución de la visión de la marca familiar en todos sus aspectos. Y espero pasar más tiempo en nuestra boutique de Madrid.
“Me complemento bien con mi madre porque, mientras ella es intuitiva, yo soy pragmática y eso, definitivamente, lo heredé de mi padre”
—¿Cómo definirías el estilo de la moda Tcherassi?
—Nosotros tenemos una visión de lujo casual, como te decía antes, buscamos que la mujer se vea elegante pero sin esfuerzo, porque lo que no se ve natural no es elegante. Cuando mi madre presentó su primera colección en Milán, hace veinte años, la crítica la definió como prêt-à-couture por la calidad de los materiales, la impecable técnica y una visión única… Eso todavía nos sigue motivando. Trabajamos los mejores tejidos, incorporamos técnicas de alta costura y nos gusta innovar y siempre sorprender. Nos fijamos mucho en los detalles, nuestras prendas son tan bellas por dentro como por fuera…