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Después de dos ediciones sin desfilar, Pedro del Hierro ha inaugurado en Ifema la 75º edición de Fashion Week Madrid con la colección Reverse. Con un front row donde se ha dejado ver incluso Victoria de Marichalar, la firma capitaneada por Nacho Aguayo y Álex Miralles ha reivindicado en la pasarela el regreso de la alegría y el espíritu desenfadado de los locos años 20. Sandra Gago ha sido una de las invitadas que no se han perdido esta cita con la moda española. Hablamos con ella sobre la nueva colección de la firma, las tendencias que ya ha fichado para la nueva temporada y sus proyectos futuros, entre los que la organización de eventos ocupa un sitio muy destacado.
“Estoy muy feliz de volver a estar aquí con Pedro del Hierro”, nos cuenta Sandra al terminar el desfile, “sobre todo en esta ocasión, que supone la vuelta a las pasarelas de Pedro del Hierro, ya que estuvo ausente las dos últimas ediciones y además han abierto el calendario de Fashion Week Madrid aquí en Ifema”. Desde la primera fila, ha podido fichar todos los detalles de estas propuestas para la temporada de otoño/invierno 2022-2023: “Me ha parecido interesante la puesta en escena del desfile, nos ha llevado a los locos años 20 y hemos podido redescubrir los límites entre lo masculino y lo femenino, con prendas que se adaptan y transforman para cualquier momento del día. Hay brillos, lentejuelas, terciopelo… Me ha gustado muchísimo”, nos cuenta.
Con la vista puesta en la temporada más próxima, la primavera, la modelo tiene claro que no hay que rendirse a todas las tendencias si no encajan con tu forma de vestir: “Creo que no van conmigo los pantalones pesqueros, que van por debajo de la rodilla. En algún momento creo que sí me los he puesto en piel y quedaban bonitos, pero para el día a día no me gustan este tipo de pantalones, por el corte. Igual para un evento depende de con qué lo combines queda bien”. Por otro lado, sí pasan su radar fashionista “las transparencias, según como las combines son elegantes y bonitas” y los monos “son muy cómodos y cool, lo puedes llevar con zapatilla o con tacón”.
Más de una década en la moda
Tiene solo 26 años pero lleva desde los 15 trabajando dentro de la industria de la moda, una profesión a la que está muy agradecida: “este mundo me dio la posibilidad desde el principio de poder trabajar desde muy joven, he podido tener esa independencia que todos deseamos cuando terminamos de estudiar, cuando empezamos a buscar trabajo”.
Reconoce que a día de hoy lo que más valora de su profesión es “la estabilidad” que le proporciona. “También soy muy afortunada por rodearme siempre de grandes equipos. Es genial la cantidad de gente que conoces de un día a otro. Y el poder plasmar en una fotografía no solo tu físico, sino también tu personalidad y tu forma de trabajar que al final la de cada uno es única y especial. En definitiva, siempre me he llevado una muy buena experiencia de todos esos trabajos”. Aunque en estos más de diez años es difícil encontrar un único momento para recordar, sí hay un proyecto que rememora con especial ilusión: “una sesión de fotos que hice estando muy embarazada y creo que es de los trabajos que recuerdo con más cariño por lo personal. Por lo que significaba para mí y por supuesto todos los trabajos con Pedro del Hierro, que siempre me han tratado muy bien porque tienen un equipo increíble, lo hacen todo muy fácil y todos los proyectos me hacen ilusión y no dejan de sorprendernos”.
La moda es uno de los motores de su vida, pero no su única pasión. Tras su boda con el tenista Feliciano López en 2019, empezó a interesarse por la organización de eventos. “Es un mundo que me llama mucho la atención, en el que me siento muy cómoda. Todavía me queda mucho por aprender porque el equipo con el que trabajo lleva 20 años trabajando en esto y yo estoy con ellas al pie del cañón. Es algo que hago en paralelo a la vez que la moda, en lo que estoy ahora mismo trabajando. Este aprendizaje que me puedo permitir porque tengo este otro trabajo, es de cara al día de mañana. De tener la opción B de algo que me guste, algo que me llene. Ojalá siga trabajando 20 años más en el mundo de la moda pero es muy complicado y el mundo del evento me gusta, me llena, me siento realizada y lo estoy disfrutando mucho”, apunta entusiasmada.
Sandra ha viajado desde Los Ángeles para acudir al desfile de Pedro del Hierro pero pronto regresa de vuelta. Esta vez ha venido sola y reconoce que le cuesta dejar a su hijo: “en mi tiempo libre intento dedicarle todo el tiempo del mundo a mi chiquitín. Me cuesta mucho separarme de él, pero soy una afortunada porque he vuelto por trabajo aunque es verdad que tengo un poco el corazón partido, como cualquier madre las veces que te separas de tu hijo".
En unas horas cogerá un avión de vuelta para reunirse con su familia en Los Ángeles. En el vuelo de vuelta quizá se entretenga con alguna serie de Netflix. “Estoy enganchada a The Blacklist, estoy deseando que saquen nueva temporada”, nos cuenta mientras bucea en el catálogo de la plataforma para enseñarnos algunos de sus nuevos descubrimientos. De momento, el regreso de Pedro del Hierro y el de Sandra Gago a la semana de la moda de Madrid significa que, poco a poco, la industria empieza a recuperar su ritmo, ralentizado en los últimos y duros tiempos.
