Me considero un afortunado por tener este trabajo y me pellizco a veces, pero también tienes que ponerlo todo en una perspectiva de que hoy estás aquí y mañana estás en otro sitio. Mi trabajo no es un sprint, es una carrera de fondo”, nos dice el diseñador de vestuario Paco Delgado. Su carrera jalonada de éxitos le ha llevado dos veces a los Oscar, en 2013 por Los Miserables y dos años después por La chica danesa . “La primera flipé, me decía “pero bueno ¿Qué es esto? ¿Qué hago yo aquí?” comenta. La suya es la historia de un joven de Lanzarote que se fue a Madrid a estudiar Física y terminó dejando la carrera. Y, sin duda, su vida hubiera sido muy distinta si no se hubiera presentado al examen de ingreso del Institut de Teatre de Barcelona. Lo aceptaron, cursó sus estudios y comenzó a trabajar en teatro. Hoy tiene una trayectoria jalonada de premios internacionales -incluido el del Costume Designer Guild, el sindicato profesional americano-, ha ganado dos Goya (Blancanieves y Las Brujas de Zugarramurdi), y entre sus últimos trabajos se encuentran las películas Un pliegue en el tiempo, con Oprah Winfrey, y Jungle Cruise con Dsayne Johnson y Emily Blunt.
Con él hablamos de Muerte en el Nilo el remake de clásico de Ágatha Christie dirigido por Kenneth Branagh (de nuevo el detective belga Hércules Poirot) que nos traslada el exótico Egipto de los años treinta, y con un reparto de lujo que incluye a Gal Gadot, Annette Bening, Rose Leslie, Russell Brand… Un equipo de 65 personas, incluidos artistas de patronaje, tintoreros y sombrereros, entre otros, trabajó con el diseñador de vestuario desde la idea primigenia hasta las prendas terminadas. En total se crearon 150 trajes y cerca del 92% se hicieron a mano.
“Estar sentado en una habitación con Annette Bening no te pasa todos los días. ¡Claro que impresiona!”, dice riendo.
- ¿Cómo ha sido el proceso de participar en Muerte en el Nilo?
- Yo estaba en mi casa muy tranquilo, me llamó el productor y me dijo que Kenneth quería contar conmigo para esta película, si tenía fechas libres y si me interesaba. Me enviaron el guion, me lo leí… Y, además de que me gustó, llamé porque me pareció muy interesante, ¡no todos los días llama Kenneth Branagh! Luego quedé con él, hablamos y bueno, entonces me lo ofreció y la verdad que no sé, fue todo tan simple y tan complejo como esto -ríe-.
- ¿Qué indicaciones te dio para los personajes?
- Él quería una película donde el vestuario de época se viera un poco como contemporáneo y que se vieran las pasiones humanas que hay detrás de todos estos personajes. Que hay amor, desamor, traición… Y luego también que pensáramos que esa película transcurre casi toda en Egipto en un momento que parece vacacional, donde hay una intención de que todo el mundo está divirtiéndose.
- Eres especialista en investigar momentos históricos, la película está ambientada en los años treinta, pero ¿cómo buscas ese lado contemporáneo?
- En cada época hay piezas o ideas que han conseguido viajar en el tiempo hasta nosotros. Muchas cosas, los vestidos al bies, por ejemplo, siguen funcionando hoy en día, y si te las pones no quedan como un disfraz.
La idea principal de la investigación de este trabajo fue siempre intentar mirar con ese ojo contemporáneo de ver qué piezas podrían ponerse hoy en día y no quedar como de la época. También intentar no accesorizar porque esta es una época donde se hacía muchísimo. Llevabas el sombrero que pegara con el color, el bolso, los zapatos… Es una cosa que hoy en día no te planteas. Hoy nada pega con nada, o todo pega con todo. Porque tenemos una mente mucho más abierta en cuanto a la combinación de colores y de estilos. Así que yo intenté mirar a la época con esa visión. Obviamente todo lo que sale es de época y lo hemos construido de acuerdo a como se construía en la época, pero con esta mirada un poco inquisidora de que no haya nada que tú te pudieras poner hoy y que pareciera un disfraz.
“La primera vez que estuve nominado al Oscar flipé, pensaba: ¿pero qué hago yo aquí?”
- ¿Te ha gustado especialmente vestir a alguien? Gal Gadot, Anette Benning, Rose Leslie…
- Obviamente Gal Gadot es una mujer bellísima y es un privilegio vestir a una mujer así porque es facilísimo, no porque sea bellísima sino porque hay gente que tiene un glamour innato y cualquier cosa que le pongas le queda bien, Pero en esta película ha habido gente de todo tipo y de todas las formas, y a todos ha sido un reto maravilloso vestirlos. Es una película coral, casi como las de Berlanga de alguna manera, que eran películas con todos los actores en el plano. Tienes que pensar que hay que trabajar no con personajes individuales, sino con personajes que están interactuando con otros y cuando veas la escena tienes que ver algo armónico. Todos han sido interesantes de vestir.
- ¿Cómo ha sido trabajar con Gal Gadot?
- Es una persona increíble, muy divertida y muy normal, y, como te decía, pongas lo que le pongas siempre le queda bien. Le gusta la ropa, le gusta lucirla, ponerse cosas… Es clara. Si algo no le gusta te lo dice y eso está muy bien. La verdad que me lo he pasado muy bien con ella, no solo vistiéndola sino en el día a día. Es una persona con gran sentido del humor.
“Es un privilegio vestir a Gal Gadot, no solo porque sea bellísima, sino porque hay que gente que tiene un glamour innato y cualquier cosa que le pongas le queda bien”
- ¿Te has inspirado en alguna actriz de los años dorados de Hollywood?
- Sí, claro. Por ejemplo, para el personaje de Gal hemos pensado muchísimo en Carol Lombard. Aunque era rubia y Gal es morena me parecía que tenía un tipo de glamour y de chispa… La propia Carol Lombard y las películas que hacía, que eran comedias, tenían algo que ver con el personaje de Gal. Y luego para Annette Bening, en Katherine Hepburn. En la película Euphemia Bouc, su personaje va vestido casi siempre con pantalones. Esto era muy de Katherine Hepburn, una mujer de la época muy contemporánea con su propio sentido de la moda, que no iba en la misma dirección de lo que proponían las revistas. Me gusta mucho vestir a Annette Bening, pero no sólo por el personaje sino ¡porque es Annette Bening! Impresiona verse trabajando en una producción de este tipo y tener a una actriz como ella enfrente. Alguien que has visto desde tu juventud en películas. Son personas que tiene una resonancia increíble, que resuenan.