Conocimos a Valentina por ser la hermana pequeña de Chiara Ferragni, sin embargo, paso a paso y con mucho esfuerzo, ha sabido encontrar su hueco en el competitivo mundo de las redes sociales y la moda. Ahora, dueña de su propia firma de joyas y con una legión de fans en Instagram que asciende a los cuatro millones de seguidores, podemos decir que la benjamina del clan tiene voz propia. Nos citamos con ella en Madrid, en medio de la vorágine de su reciente diagnóstico de cáncer de piel, en una sesión de fotos donde profesionalidad, fuerza y carisma se unen en esta influencer, diseñadora y mujer valiente.
“Mi hermana Chiara me ha enseñado a creer en mi misma, en mi voz y a no tener miedo del juicio de la gente”
-Tu hermana Chiara es la ‘reina’ de las redes sociales, ¿qué has aprendido de ella en todos estos años?
-Chiara me ha enseñado a creer en mí misma, en mi voz y a no tener miedo del juicio de la gente.
“En octubre fue cuando mi dermatólogo me dijo que algo no iba bien. Lo mejor era analizar qué me sucedía para entender lo que me estaba pasando”
-¿Cómo empezó tu carrera en Instagram?
-Empecé en 2012, subiendo fotos de una manera muy natural. Mis looks del día a día, en la universidad… No tenía nada que ver con lo que es hoy en día. Era una manera diferente de comunicación.
-¿Qué es lo que más te gusta de la relación que tienes con tus hermanas? Sois inseparables.
-Mis hermanas y yo no nos llevamos muchos años de diferencia y, por ello, siempre hemos hecho muchas cosas juntas. Cuando me fui a vivir a Milán en mi época universitaria nos volvimos inseparables, como cuando éramos niñas. Confiamos entre nosotras y nos apoyamos mucho.
“Empecé En Instagram en 2012, subiendo fotos de una manera muy natural. Mis looks del día a día, en la universidad… No tenía nada que ver con lo que es hoy en día”
-Además, sois muy parecidas, ¿qué os diferencia?
-Chiara y yo somos muy parecidas físicamente, ambas somos como mi madre; Francesca es la más similar a mi padre. Sin embargo, a todas nos encanta la moda, porque hemos crecido con los gustos de mi madre. No me gusta decir que existen diferencias entre nosotras, ya que no tengo miedo a decir que somos similares. Lo único que intentamos es ser nosotras mismas.
-Ahora tu vida ha dado un giro de 180º, ¿cómo te diste cuenta de que tenías algo diferente en tu piel?
-En octubre fue cuando mi dermatólogo me dijo que algo no iba bien y que era mejor que miraran lo que me sucedía en la piel de una forma más específica para entender lo que me estaba pasando.
“Mis hermanas y yo no nos llevamos muchos años de diferencia. Cuando me fui a vivir a Milán, en mi época universitaria, nos volvimos inseparables, Confiamos mucho entre nosotras y nos apoyamos”
-¿Cómo te sientes ahora, después del diagnóstico?
-Ahora me siento feliz, sé que no es algo bueno, pero tampoco es malo. Soy muy afortunada. En mi caso, lo han visto a tiempo y me ha ayudado a tomar más conciencia de la importancia de la piel y sus cambios.
-Todos tenéis un papel público en las redes sociales, ¿cómo lográis unir vuestra parte privada con la pública?
-Es fácil, ya que hemos crecido con las redes sociales; es algo que tenemos muy integrado. Entendemos muy bien la diferencia entre los dos mundos. Nosotros terminamos sacando lo que queremos mostrar.
-Ahora vais a estrenar un reality show, ¿cómo fue el rodaje?
-Ha sido muy divertido rodar The Ferragnez. Nos ha encantado poder pasar tiempo juntos, teníamos que ser nosotros mismos. Antes de empezar, yo sí pensé que quizá iba a ser un poco extraño que nos grabaran, pero finalmente no ha resultado nada difícil.
-¿Cómo te afectan los ‘Me gusta’?
-No me preocupan tanto los likes, sino el compromiso y las personas que me siguen. Quiero ser muy transparente, darles mis valores y mostrarles lo bueno de lo que me enseñaron mis padres.
-Tienes tu propia línea de joyería. ¿Te gustaría saltar al diseño de prêt-à-porter?
-No, me gusta mucho hacer joyas y complementos, pero no estoy lista para saltar al prêt-à-porter, por el momento.
“Mi familia lo es todo. Quiero a mis padres y a mis hermanas y, ahora, a mis sobrinos. Me encanta porque somos únicos y divertidos. Estoy muy orgullosa de mi gran familia”
-¿Cómo surgió la idea de poner en marcha tu propia firma?
-Soy una persona muy ambiciosa y me encanta hacer muchas cosas diferentes, así que no sé cuándo parar. Espero no parar nunca.
-¿Qué significa para ti tu familia?
-Lo es todo. Quiero a mi padres y a mis hermanas y, ahora, a mis sobrinos. Me encanta porque somos únicos. Estoy muy orgullosa de mi gran gran familia.
-Siempre compartes el romanticismo con Luca, ¿te gustaría casarte?
-Llevo ocho años con Luca, es muy romántico, pero todavía no hemos sentido el paso de casarnos. Vivo con él, tenemos una casa y claro que me gustaría casarme, pero no tengo prisa. Cuando nos sintamos listos, lo haremos.