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Sofía Palazuelo siempre fascina por su estilo. Sus apariciones generan una gran expectación y en la boda de su cuñado, Carlos Fitz-James Stuart, y Belén Corsini, volvió a deslumbrar con la elección de su estilismo. Para el acontecimiento social del año, la duquesa de Huéscar confió en uno de sus diseñadores preferidos, Jan Taminiau.
El creador holandés, favorito de Reinas como Máxima de Holanda y Matilde de Bélgica, realizó para Sofía un vestido de alta costura fluido, en georgette de seda color azul profundo, de largo midi, con capelina delantera y un gran escote en forma de uve en la espalda. El detalle que elevaba el look era un cinturón a modo de fajín, bordado a mano en tonos dorados, a juego con sus sandalias de tiras finas.
© GettyImagesDesde su casa atelier del Barrio de las Letras —desde hace seis años vive a caballo entre Ámsterdam y Madrid con su pareja, el historiador de arte y coleccionista Juan Várez—, Taminiau, desvela a ¡HOLA! los secretos del diseño de la duquesa, a la que ha vestido en numerosas ocasiones.
“Con las clientas, es muy importante que exista entendimiento y complicidad. Aquellas que confían siempre sacan de mi los mejores diseños. Sofía es un gran ejemplo de esta complicidad”, señala el diseñador con una mezcla de halago y orgullo, consciente de que la aristócrata ha sido una de las invitadas más elegantes de la boda.
–En el boceto original, presentas el modelo con un tocado. Al tratarse de una boda de día, ¿le hubieras añadido este accesorio al look de Sofía?
–La idea inicial era llevarlo con guantes largos y tocado. Juntos decidimos cambiarlo por un fajín bordado con una rica técnica y narrativa, y vimos que ya no era necesario el tocado.
© GettyImages–En origen, el vestido era largo. ¿La idea de acortar la falda fue tuya o de ella?
–Empezamos por una falda larga y Sofía prefirió acortarla, todo un acierto.
–¿Ayudaste también a la duquesa con la elección de los complementos?
–Este es un tema importante. Me lo comentó y lo hablamos para ponernos de acuerdo, pero la elección fue suya y muy acertada también, por cierto.
–Sofía parece tener las ideas muy claras y ser una mujer muy segura de sí misma. ¿Cómo es tu relación con ella? ¿Se deja asesorar?
–Se deja asesorar mucho y tiene muy claro lo que no le gusta. Esto ayuda a la hora de tomar buenas decisiones.
–¿La consideras una de tus musas?
–Sin duda, es una musa, con un gran porte, energía y un humor maravilloso.
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© GettyImages–¿Qué cualidades destacarías de ella?
–Naturalidad, frescura. Su energía me estimula en mi proceso creativo.
–¿Volverás a vestirla pronto, quizás para el bautizo de su hija, Rosario?
–Siempre será un placer vestirla, de día o de noche.
–¿Qué opinas del traje de la novia, Belén Corsini?
–No me gusta opinar de los vestidos de otros diseñadores. Pero a toda novia le deseo mucha felicidad en su nueva vida.
–Ahora que se han relajado las restricciones sanitarias, ¿Volverás pronto a mostrar tus colecciones en tu casa, como hacías antes de la pandemia?
–Mis desfiles de costura nunca son muy multitudinarios. El último fue en septiembre 2019 y mi nueva colección de costura está muy avanzada. Me encantará presentarla en septiembre en Madrid y en Ámsterdam.
© Jan Taminiau–¿En estos momentos, estás trabajando en algún diseño especial, para una novia o invitada de la realeza o la aristocracia?
–En realidad en varios diseños y muy especiales que se verán este otoño y en 2022. Además, estoy fascinado con el mundo de las madrinas con peineta. Tuve mi primera clienta de estas características en 2019 y me quedé prendado de esta imagen.
–¿Cuál es tu próximo proyecto más inmediato?
–Ahora estoy en un momento muy interesante. En unas semanas se incorpora un nuevo director que llevara Jan Taminiau al siguiente ciclo. Además, estamos cerrando el nuevo espacio para mostrar costura y wardrobe (su línea para el día a día) en Madrid. Un laboratorio que no dejará indiferente a la gente.
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