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La frescura de su rostro y la madurez de sus ideas sobre su futuro hacen que Chloé Peyrouzet deje claro que lleva el talento en el ADN. De su madre, Ana García-Siñeriz, ha heredado también una elegancia innata y, además, en ella encuentra a su mejor consejera sobre su rumbo profesional, su auténtica prioridad, en la que trabaja sin prisa, pero sin pausa. Hablamos con Chloé para conocerla de cerca y descubrir sus planes.
© Papo Waisman-Ahora mismo estás en tu último curso de carrera, ¿dónde ves tu futuro profesional?
-Estoy terminando la carrera y trabajando a la vez que la finalizo. Cuando acabe, me gustaría dedicarme a la gestión de empresa, dentro del mundo de la moda.
“Mi madre (Ana García-Siñeriz) me da muchos consejos: que me comporte de manera profesional, que sea trabajadora y colaboradora con el equipo, que dé lo mejor de mí y que hay que trabajar mucho para progresar”
-Ya has hecho prácticas en un showroom de moda, ¿qué ha significado esta experiencia para ti?
-Sí, trabajé en París y me encantó. Fue mi primera experiencia real en el mundo laboral e hice un poco de todo; aprendí muchísimo, sobre todo de la parte comercial y de cómo funciona la producción de una colección. Todo el trabajo que hay detrás y que muchas veces damos por sentado.
© Papo Waisman
© Papo Waisman-En este reportaje te vemos con ropa de Dior, ¿cuál crees que es la aportación de Maria Grazia Chiuri?
-Le ha dado un impulso increíble; ha acercado la marca a las nuevas generaciones, gracias a que sus creaciones son mágicas y románticas y, a la vez, roqueras y bohemias… Me siento muy identificada con su espíritu reivindicativo y su diseño exquisito.
“Trabajé, en París, en el ‘showroom’ de una marca de moda. Aprendí, sobre todo, cómo funciona la producción de una colección. Todo el trabajo que hay detrás y que muchas veces damos por sentado”
-¿Tienes pensado compaginar tu trabajo en la industria de la moda con el de modelo?
-No siempre es fácil. Hago algunos trabajos de modelo esporádicos, pocos y bien elegidos. Hoy día es difícil encontrar un trabajo para los jóvenes, así que me empleo a fondo en mi trabajo de cada día.
-¿Te ha dado tu madre algún consejo antes de sumergirte en este mundo fashion?
-Me da muchos consejos, pero para todo: cuando hago algún trabajo, o en mi día a día. Que me comporte de manera profesional, que sea colaboradora con el equipo, que dé lo mejor de mí, que hay que trabajar mucho para progresar. Mis padres, los dos, no solo mi madre, nos aconsejan y nos guían.
© Papo Waisman
© Papo Waisman-¿Cómo es vuestra relación ‘madre e hija’?
-Nos llevamos muy bien, siempre puedo contar con ella para hablar de cualquier cosa. Muchas veces nos reímos porque creo que, de pequeña, no me han castigado nunca. Ella dice que es porque siempre he sido muy buena… no sé.
“A mi madre y a mí nos encanta ver películas de época: Cary Grant y Audrey Hepburn, Romy Schneider y Alain Delon, descubro muchos actores y directores a los que la gente de mi edad ya no conoce tanto…”
-A la hora de vestir, ¿compartís armario?
-¡Me hubiese gustado poder llevar sus zapatos de tacón! Son lo que más me gusta de su armario, ¡pero me quedan grandes! Le ‘robo’ lo que puedo: muchos jerséis, chaquetas y algún abrigo.
-¿Algún consejo estilístico que te haya dado?
-He heredado su gusto por lo básico. Menos es más.
© Papo Waisman
© Papo Waisman-Además de la moda, ¿qué otras aficiones tienes?
-Por ejemplo, ver películas de otras épocas, es algo que a mi madre y a mí nos encanta hacer juntas: Cary Grant y Audrey Hepburn, Romy Schneider y Alain Delon, descubro muchos actores y directores a los que la gente de mi edad ya no conoce tanto…
-Por último, ¿cuáles son tus planes de futuro?
-Por ahora, terminar mis estudios y seguir trabajando todo lo que pueda.
