El inicio de una nueva década y el cambio de temporada es la oportunidad perfecta para reflexionar sobre nuestros hábitos de consumo, poner orden en el armario y analizar si el tipo de compras que estamos haciendo es acertado, tanto para nosotros como para el medio ambiente. Y es que parece que en 2020 está más claro que nunca: lo sostenible está de moda, y ha llegado para quedarse. Cada vez vemos más lejanos aquellos días en los que el término de fast fashion gobernaba el bolsillo de las mujeres para dar paso a diseños icónicos y atemporales. Finalmente, ha llegado el momento de tomar consciencia y valorar la durabilidad y atemporalidad frente a la vestimenta de menos calidad. Te ayudamos a depurar tu repertorio de prendas y a generar menos basura textil.
Sí, en la teoría parece muy fácil, pero la verdad es que poner en práctica el arte de la sostenibilidad a la hora de ir de shopping puede ser más complicado de lo que pensamos. La tentación de entrar a una tienda low cost y salir con las manos vacías es bastante grande. Pero lo cierto es que sí tiene cabida llevar prendas clásicas sin sentirnos anticuados. Así lo asegura Adolfo Domínguez con su última colección, Ropa vieja, en la que recupera y reedita diseños míticos de su firma con hasta 40 años de historia, y demuestra que siguen tan vigentes y actuales como el primer día.
¿Por qué será que rehuimos lo viejo? ¿En qué momento se instaló en nuestra mente que lo nuevo es mejor? ¿Por qué parece que repetir looks es de mal gusto? Estos son algunos de las interrogantes que la campaña Ropa vieja, de Adolfo Domínguez, despierta en nosotros. Bajo el lema de Sé más viejo, la firma de moda gallega nos enseña cómo iniciarnos en el slow fashion con 3 simples claves:
No hay que invertir en lo último, sino en lo que permanece
La ilusión de tener ropa nueva más económica es solo eso, una ilusión. Es preferible invertir en una prenda buena que en tres malas. La durabilidad y la calidad es algo que debemos tener en cuenta a la hora de adquirir artículos que queremos nos acompañen más de una temporada o en la tendencia de turno. Y sí, es posible. Para demostrarlo, Adolfo Domínguez ha hecho un llamamiento en sus redes sociales a sus clientes más fieles para recuperar piezas icónicas de la marca, eso sí, con el requisito de que fueran vintage (con 20 o más años desde su creación). Así ha conseguido que asiduos a la marca donaran 29 piezas, con entre 20 y 40 años de antigüedad, para esta iniciativa. De esta forma, reivindican la esencia de creatividad atemporal y respetuosa con el medio ambiente que caracteriza a la marca española.
Si algo te encanta, no dejes de usarlo
No se trata de seguir tendencias, sino de que tu estilo prevalezca en el tiempo. Para ello, es necesario invertir en vestimenta de calidad para que pueda vencer el paso del tiempo y crecer contigo. Con esta colección, Adolfo Domínguez demuestra la vigencia de varios de sus diseños más antiguos que aún siguen siendo usados por sus clientes, incluso décadas después de su creación.
Piensa. Luego compra
Antes de apostar por una pieza que solo vayas a usar una vez (o peor, que se quede colgada en el armario con etiqueta incluida), piensa, ¿realmente te representa esa prenda? ¿Puedes idear por lo menos tres looks o más en tu mente? ¿Es un aporte a lo que ya tengo? Si la respuesta a estas preguntas es sí, entonces estás lista para realizar tu compra. El objetivo es detenerte a meditar si realmente tienes que hacer ese gasto. Conéctate con la ropa en lugar de simplemente hacer otra adición innecesaria a tu repertorio.