Para contextualizar la colección de primavera-verano 2019 presentada por Ana Locking en esta edición de Fashion Week Madrid, con la presencia de Begoña Gómez en primera fila, hay que retroceder en el tiempo, concretamente a finales de los 80 y comienzos de los 90. Un periodo de tiempo en el que las pistas de baile acogieron un movimiento denominado Voguing, motivo inspiracional para la diseñadora en esta ocasión. Una nueva forma de expresarse bailando y una nueva estética marcada por el exceso, la ambigüedad y una creatividad que rompía con las etiquetas de géneros. Su impactó quedó reflejado en el documental Paris is Burning (1990), decisivo para concebir estas novedades.
Englobadas bajo el título de Realness, las novedades de Ana Locking se han presentado en un espectáculo que vas más allá de un desfile de moda habitual. Sobre la pasarela junto a las modelos, bailarines, drags y el icónico de la escena parisina Matyouz LaDurée que hizo las funciones de maestro de ceremonias de este show. Fue presentado cada parte del espectáculo que, al final, recibió un '10' por parte del público, impreso en unos carteles de mano a modo de tabla de puntuación.
En cuanto a moda, la diseñadora toledana juega con acabados plastificados y cortes slim en leggings y cuerpos elásticos que se ajustan al cuerpo. Nexo de unión de las diferentes partes del show son sus estampados que van del clásico Príncipe de Gales a acabados psicodélicos, así como la utilización del cuero a modo de arneses y cintas que recorren todo el cuerpo. El color también tiene especial protagonismo en esta pasarela y encontramos desde tonalidades neutras a otras muy llamativas, sin olvidar las pastel. Tampoco faltan diseños texturizados con bordados de paillettes o con largos flecos. Para concluir, grandes volantes crean volúmenes extravagantes en los hombros, un broche de oro para una rompedora colección.