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Una vez más, tras sus llamativos pantalones deportivos y el pijama de calle, la modelo Irina Shayk ha vuelto a encontrar el que será el último 'hit' del verano, tal y como confirman varias 'celebs'. En términos de moda, la 'top' salió a dar uno de sus conocidos paseos por Nueva York con una elección estética sencilla y muy cómoda. Se trata de un vestido camisero ligero, veraniego y de largo 'midi', con estampado a rayas mostaza y azul. A nivel de estilismo, ha sabido darle un giro con un cinturón muy fino, sus clásicas Rayban Wayfarer en negro y unos mocasines de aspecto babucha. En clave 'beauty' decidió recogerse el pelo en un sencillo moño, que revelaba que la noticia con la cual sorprendió días atrás -un largo flequillo 'baby bangs'- era solo una peluca.
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No es la primera vez que la pareja de Bradley Cooper escoge una pieza fluida y versátil como esta, al menos en otras dos ocasiones se la ha podido ver con propuestas similares en la ciudad que nunca duerme. La tendencia de diseño estival de esta temporada -el vestido camisero original- es muy cómoda y sofisticada, por eso conquista tanto a jóvenes como a mamás. Con todo tipo de 'prints', por debajo de la rodilla, de tirantes o de manga al codo, se trata de la inversión segura en estas rebajas.
Desde el de Meghan Markle en versión 'royal' de blanco absoluto en las Carreras de Ascot a Sara Carbonero con uno oscuro estilo maxifloral en el Mundial de Rusia, pasando por el que triunfa entre las 'influencers' -mini, con escote y un pequeño volante en la falda-, la camisa se hace larga y gana vuelo. Puesto que la temporada de rebajas ha comenzado en muchos comercios españoles, y para las grandes marcas lo hará a finales de este mes, la pieza de fondo de armario más atemporal es una túnica como esta.
Cada año una nueva generación de vestidos camiseros consiguen combinar a la perfección elegancia con altas temperaturas. Desde el trabajo a una boda, cambiando los tejidos, o mejor aún, los accesorios, el resultado es completamente diferente y ganador a partes iguales. Este gesto se hizo evidente gracias a casas de la moda como Jacquemus, Jil Sander o Missoni, que devolvieron su esplendor a materiales como el lino, el crochet o la seda. Opciones minimalistas que llenaron la pasarela y ahora, del mismo modo, conquistan el 'street-style' y a todo tipo de mujeres. Las grandes marcas se suben al tren de esta prenda en 2018. Ya sea en Zara o en Bimba y Lola las posibilidades a la hora de combinar son infinitas: la colección admite tanto unas chanclas como unas deportivas y las 'estrellas de la temporada' -las alpargatas-. La firma de Inditex propone uno a rayas marineras con fajín (39,95€), mientras que la segunda apuesta por la estética 'retro', con mangas cortas, botones y unas pequeñas margaritas (60€).