Después de años de lucha en los tribunales, la justicia ha dado la razón a Christian Louboutin y a su suela roja, convertida en icono universal y símbolo absoluto de glamour y elegancia. El maestro zapatero ha conseguido que finalmente el Tribunal de Justicia de la Unión Europea reconozca que la firma de lujo puede registrar como marca su sello más característico. Un exitoso distintivo, en concreto, el color rojo Pantone 18 1663TP, que provocó que otras firmas comercializaran sus zapatos de tacón alto con tapa revestida en el mismo tono. Ante la proliferación de competidores, el diseñador tomó cartas en el asunto en busca de la distinción y la exclusividad, registrando su característica suela, en 2010, en Benelux (la unión aduanera y económica de Bélgica, Países Bajos y Luxemburgo) en la categoría de 'zapatos', clasificación que, en 2013, cambió por la de 'zapatos de tacón alto'.
Sin embargo, la estrategia del francés no fue bien recibida por todas las firmas, especialmente por la sociedad de venta de calzado al por menor Van Haren, que comercializada calzado de mujer con la tapa escarlata a precios más asequibles. La empresa holandesa pidió a Christian Louboutin anular el registro de la suela tras ser denunciado, en 2012, por la firma de lujo. Ahora, tras seis años de confrontaciones, el Tribunal de Primera Instancia de La Haya ha sentenciado que la marca es válida y está protegida. La exclusividad de los 'stilettos' de suela roja del francés, que pueden superar fácilmente los 1.000 euros, queda por tanto intacta.
Toda leyenda guarda detrás una gran historia o, como en este caso, un impulso que acaba convirtiéndose en una brillante idea. En 1993, el maestro zapatero recibió el prototipo de un colorido modelo de zapatos que había diseñado. Sin embargo, el resultado no terminó de convencer a Louboutin, quien decidió voltear el calzado para observarlo desde otra perspectiva. En ese preciso momento, su secretaria se encontraba pintándose las uñas con un esmalte rojo, que, tras una pequeña riña, el diseñador le arrebató para 'barnizar' la aburrida suela negra de los zapatos que estaba analizando. El resultado gustó tanto al creador que acabó trasladándolo a todas sus colecciones. No obstante, y aunque en un principio la idea era que fuese cambiando de color cada temporada, la casa Louboutin ha permanecido fiel al color fetiche de sus zapatos, que se han convertido en los favoritos de 'celebs', como Oprah Winfrey, Carolina de Mónaco, Melania Trump, Sarah Jessica Parker, Charlize Theron o Blake Lively.