Maestros de la costura ha llegado a su fin. Después de diez semanas de complicadas pruebas, retos y muchos nervios, el ‘atelier’ de La 1 de TVE ha cerrado definitivamente sus puertas con la celebración de una gran final en la que los cuatro finalistas, Alicia, Antonio, Eduardo y Luisa, han vuelto a poner a prueba su destreza con la aguja para disputarse el título de ganador. Una última noche marcada por los nervios, la emoción y, por supuesto, la moda, con los miembros del jurado -Lorenzo Caprile, María Escoté y Alejandro Gómez Palomo-, junto a la presentadora Raquel Sánchez Silva como mejores embajadores del diseño 'made in Spain'.
Semana tras semana, los estilismos de la placentina se han convertido en uno de los temas que más interés han suscitado entre los seguidores de Maestros de la costura. A lo largo del programa, la conductora del 'talent' ha sorprendido con bonitas creaciones de David Delfín, Juan Vidal, Maya Hansen y Vicky Martín Berrocal, entre otros, y su elección para el esperado 'sprint' final ha mantenido en vilo a los amantes de la moda española. No obstante, y como era de esperar, Sánchez Silva no ha decepcionado con su triple apuesta.
Para dar el pistoletazo de salida a la noche, la presentadora se decantó por un diseño de su amigo y compañero de plató Palomo Spain. La 'celeb' irrumpió en el taller con un original minivestido brillante con manga larga y acabado metalizado firmado por el modisto cordobés, protagonizado por un gran volante y 'cut out', que acompañó con sandalias de Jimmy Choo y bisutería de Uterqüe.
Después de lucir el modelo más arriesgado de la velada, el equipo de Maestros de la costura se desplazó hasta el taller de Pronovias, donde la placentina se rindió ante la sofisticación y sobriedad del 'total black' con una creación del director creativo de la firma nupcial, Hervé Moreau. Raquel se decantó por un mono de estilo 'smoking' con solapas de raso, cuello 'halter', cuerpo cruzado en pico y espalda al descubierto, bautizado como 'Glosa' y valorado en 590 euros. Raquel combinó el ‘jumpsuit’ con zapatos bicolor de Manolo Blahnik y bisutería firmada por Majorica.
No obstante, y pese a la buena elección de los dos primeros estilismos, el plato fuerte de la gala final estaba reservado para la última prueba del programa. Tanto es así que la conductora sorprendió con una creación del miembro del jurado más veterano y exigente, Lorenzo Caprile. Un delicado diseño rojo con escote 'bardot', capa y fruncidos, que aderezó con joyas de Cartier y calzado de Jus Ene. Así, rindiendo un nuevo homenaje al diseño 'made in Spain', Raquel Sánchez Silva ha despedido el primer asalto de Maestros de la costura por todo lo alto.