La princesa Charlene reaparece con un look que ha enamorado de pies a cabeza

La esposa del príncipe Alberto ha elegido el tartán y las perlas para acudir a la tradicional festividad de Santa Devota 

Por Gtresonline

Charlene de Mónaco ha regresado a la escena pública. Un año más, la Princesa, que el pasado jueves 25 de enero cumplía cuatro décadas, ha acudido a la tradicional festividad de Santa Devota, la patrona del Principado, donde ha hecho acto de presencia en el balcón del Palacio Grimaldi acompañada por su marido, el príncipe Alberto. A diferencia de anteriores ocasiones, que se habían dejado arropar por otros miembros de la familia Grimaldi, Alberto, Charlene y sus dos hijos, los pequeños Jacques y Gabriella, han presenciado esta vez en solitario a la tradicional misa y procesión. 

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Para ver la ceremonia que tiene lugar en honor a la santa, y después de más de un mes alejada de los flashes, Charlene reapareció con un estilismo con el que, además de no pasar desapercibida, ha demostrado que continúa atenta a las tendencias del momento. En sus infinitas versiones, los cuadros nunca pasan de moda y, pese a que el estampado Príncipe de Gales es el favorito de la temporada, el tartán es otro de los 'print' que tiñe un importante número de prendas en los escaparates.

Así, la princesa de Mónaco se ha decantado por un conjunto muy sobrio y elegante, tal y como marca el protocolo 'royal', protagonizado por una chaqueta de tweed con cuello redondo, estampado de cuadros tartán en tonos invernales, como el rojo y el azul marino, doble botonadura y pequeños flecos en la parte inferior. La ex nadadora profesional ha acompañado la sofisticada prenda exterior, que pertenece a la colección Invierno 2017 de la firma de lujo Loro Piana, con una falda negra de tubo y largo 'midi' de The Row, medias tupidas y salones clásicos de tacón también negros firmados por Gianvito Rossi. 

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A priori, un look sencillo que, sin embargo, la esposa del príncipe Alberto ha personalizado a través de una acertada elección de complementos, que aportaban aún más sofisticación al resultado final del conjunto. La Princesa del Principado se ha decantado por unos guantes largos de piel de Barneys New York (290 euros) y unos llamativos pendientes de perlas de la prestigiosa marca de joyería Samira 13, valorados en 5.200 dólares (aproximadamente 4.200 euros).  

Así, con este sobrio y elegante estilismo, pero sin dejar de lado algunas de las tendencias del momento, Charlene ha reaparecido en una de las festividades tradicionales más importantes para la pareja, ya que se trata de la Virgen que los acompañó en el gran día de su boda.