En febrero de 2017, Juanjo Oliva mostraba en Fashion Week Madrid, Oliva, su “bebé” como el mismo nos definía su nueva firma que tomaba únicamente con sello su apellido. Meses después, en septiembre, se ausentaba de la pasarela madrileña. Sin embargo, no era un adiós, sino un hasta luego, pues retorna a esta 67ª edición para seguir asentando su marca y, como hace casi 12 meses, siguiendo la tendencia del See Now, Buy Now.
Si ayer la pasarela madrileña encontraba su inspiración en los años 80, en la jornada de hoy los diseñadores dirigen su mirada al mundo del arte. Oliva también se apunta a esta tendencia. Lo vemos en el maquillaje arty de las modelos, así como en su pasarela decorada con muebles de estética Bauhaus. En cuanto a moda, el diseñador madrileño, que presenta tanto propuestas masculinas como femeninas, opta por unas creaciones muy urbanas en su denominada Collection.II. Para ellas, triunfan los vestidos, prenda icónica del creador. Se presentan en seda, con línea recta con escotes asimétricos y cut outs. Además, incorpora un estampado de rayas con transparencias muy seductor. De entre todos, no olvida incluir algunos en color negro, un básico, que sirvió para cerrar el desfile. En contraposición a estas líneas muy primaverales, trabajos en punto muy grueso en los que se teje el nombre de la firma, lo que nos denota una intemporalidad de la colección capaz de adaptarse a un entretiempo propio de estos meses.
Como calzado, opta por realzar el toque tan de tendencia como son las botas planas con cordones de estética militar. Una decisión que nace por laa colaboración de la firma Dr.Martens.