Lavanda, lila, malva claro… los colores empolvados siempre parecen ser un buen punto de partida de cara a una nueva estación. Tal vez por su efecto relajante y su carácter sereno, esta temporada la gama más suave del Ultra Violet (color Pantone para este 2018) se ha convertido en la tonalidad predilecta a la hora de teñir nuestros looks de transición. De hecho, las firmas parecen querer clausurar el invierno “sin hacer demasiado ruido”, apostando por la delicadeza, la inocencia y ese punto naïf que aportan estos tonos. ¡Si es que a nadie le amarga un dulce!
A la hora de edulcorar tus estilismos, ya te anunciamos que el tricote tendrá un lugar preferente. Si este invierno fue el abrigo, de cara a la primavera el jersey de punto grueso en tono lavanda se convertirá en la prenda más deseada. Eso sí, seguido de cerca por los vestidos fluidos (incluyendo las propuestas de fiesta), las blusas románticas y los pantalones aptos para tus estilismos working más refrescantes. Último consejo: presta especial atención al calzado si quieres marcar la diferencia.
¿Todavía no tienes ninguna de estas prendas en tu vestidor? ¡Fíchalas antes de que vuelen!