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Nació en River Falls, un pueblecito de Wisconsin (Estados Unidos). Sin embargo, Frankie Rayder pronto tuvo que hacer las maletas y marcharse a recorrer mundo, ya que su escultural cuerpo y la belleza de su rostro llamaron la atención de personas importantes del mundo de la moda, que la convencieron para que fuese modelo. Lleva ya más de cinco años trabajando, y sin duda actualmente se la puede calificar como una de las top models del siglo XXI.
Sin embargo, Frankie Rayder, a la que se compara 'por su gran temperamento' con la top Naomi Campbell, ocupa ahora los titulares de la prensa por una noticia en la que sus éxitos como maniquí no tienen nada que ver. Según diferentes informaciones, la joven norteamericana, de 26 años, mantiene una relación con el director de cine Roman Coppola, que debutó el pasado mes de mayo en el Festival de Cannes con la película CQ. De hecho, la modelo y el hijo de Francis Ford Coppola podrían contraer matrimonio en breve. Una vez más el mundo del cine y la moda se unen en brazos del amor.
Meteórica carrera
Frankie, que realmente se llama Francesca, ha triunfado en todos los ámbitos de la moda. Por ejemplo, como maniquí ha desfilado para importantes firmas como DKNY, Valentino, Victoria’s Secret, Christian Dior, Gucci o John Galliano, entre otras. Igualmente, su sensual mirada de color verde ha seducido desde las campañas de marcas como Givenchy, Chanel, Versace o Dolce & Gabbana.
Todos estos éxitos la encumbraron a la fama y se convirtió en una de las modelos más cotizadas. De hecho, este prestigio la llevó a posar en el calendario Pirelli 2001, donde también aparecían las modelos Gisele Bündchen, Carmen Kass, Fernanda Tavares y Ana Claudia Michels. En concreto, Frankie representaba al mes de noviembre.
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