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© Adobe StockUn ave rapaz
Si pudiéramos viajar en el tiempo y ver el planeta tierra hace 65 millones de años, veríamos búhos. Se trata de una especie animal muy antigua, que sin embargo incrementó su presencia cuando llegaron los mamíferos, en el período terciario, ¿por qué? Porque somos un alimento mucho más nutritivo que los peces. Los búhos son aves rapaces, se alimentan de pequeños mamíferos, peces, insectos y reptiles, pero hay algunas familias de búhos que no descartan cazar humanos. Sí, algunas especies de búho no le harían ascos a nuestra especie, como lo haría un águila ante una situación de necesidad.
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© Adobe StockPueden girar su cabeza 270º
No son famosos por sus giros de cabeza, pero lo cierto es que es una de sus peculiaridades anatómicas más sorprendentes. Generalmente el movimiento de cabeza de las aves es muy amplio, mucho más que el de los mamíferos, porque ellos no pueden desplazar el globo ocular en sus cuencas, por lo que cada vez que precisan hacer un reconocimiento total del espacio, la forma de no perder detalle es girar toda la cabeza. El caso de los búhos es bastante impresionante porque consiguen giros de hasta 270º sin forzar ningún tendón ni generar daños en su vasos sanguíneos, eso lo logran gracias a que se trata de una especie muy flexible y la cabeza no está asentada sobre el tronco más que por un asentamiento que funciona como pivote, no como en el caso de los seres humanos que disponemos de columna vertebral. Disponen de unas arterias secundarias por las que pasa la sangre cuando sus giros son muy extremos, y así evitan decapitar su sistema circulatorio al realizar los giros.
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© Adobe StockSon asesinos letales
Son aves rapaces procedentes de los halcones, aunque popularmente nos encandila su aspecto calmado e incluso “intelectual”. Los búhos son aves de presa con un ingenio asesino muy agudo. Su principal cualidad es el silencio, el vuelo que desarrollan puede pillar desprevenida a cualquier víctima, tan sólo se hacen presentes mediante la sombra, pero como la mayoría de los tipos de búho son nocturnos eso tampoco es un problema. Son capaces de volar a altas velocidades, para dar caza a cualquier presa que trate de escapar, preferiblemente mamíferos. El silencio lo consiguen de dos formas: planeando al desplegar sus enormes alas, y por medio de sus plumas, que son especiales y producen menos ruido en el aleteo.
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© Adobe StockHay hasta 250 especies distintas
Hay tantas especies de búho porque es un ave que se ha extendido por todo el planeta, podemos encontrar ejemplares en todo el mundo, salvo en la Antártida. Eso hace que cada variedad se haya adaptado a la alimentación y a la climatología de cada zona. Existen tipos de búhos que solo comen plantas, se trata del búho elfo, y es bastante curioso si tenemos en cuenta que se trata de un ave rapaz. El búho águila es el tipo más letal, capaz de agredir y acabar con la vida de jabalíes, monos o incluso águilas, sí: los búhos también pueden ser caníbales.
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© Adobe StockNo todos son noctámbulos
Es muy poco conocido popularmente, pero no todos los búhos son nocturnos. Depende de su familia, los búhos pigmeos, grises y halcones, son diurnos, lo que significa que cazan de día, porque están diseñados para sacarle más provecho a la luz y porque en la oscuridad no se desenvuelven tan bien. Lo más importante es acompasar su visión a la luz existente, y poder llegar así a las presas. En todo caso, se cree que los ancestros de los búhos eran diurnos, todos ellos, pero según evolucionaron se hicieron mayoritariamente una especie nocturna para aprovechar el silencio con el que son capaces de cazar.
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© Adobe StockEl color intenso de su iris tiene una explicación
Si pensamos en un búho lo primero que nos viene a la mente es su iris amarillo, uno de los ojos más reconocibles del panorama animal. Varios estudios científicos recientes han relacionado el color de los ojos de los búhos con su periodo de actividad. Los que tienen los ojos amarillos cazan de día, aquellos que su tono es mucho más anaranjado o casi rojo, son crepusculares y cazan al amanecer, y los que hacen vida nocturna tienen ojos oscuros, entre marrón y negro. Además, esto les sirve para reconocerse entre sí, existe también un código de color familiar. Por otro lado, como puedes imaginar, tienen una calidad óptica envidiable, se estima que superan 100 veces la visión humana, no en vano se trata de un ave rapaz que debe otear el espacio desde muy alto en búsqueda de presas, comúnmente muy pequeñas, como roedores u otros mamíferos de poco tamaño.
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© Adobe StockPueden alimentarse hasta de peces
Los búhos no le hacen ascos a casi ninguna presa, les apasiona cazar y también tienen un hambre voraz. Los búhos que viven en la rivera de los ríos basan su alimentación casi estrictamente en peces, pueden planear fácilmente sobre el agua, introducir sigilosamente sus garras bajo el río y extraer el alimento. Gracias a sus grandes alas y a la velocidad de su vuelo no tienen problema en mojarse, pueden emprender el vuelo con facilidad. Sin embargo, el manjar favorito de los búhos son los pequeños mamíferos, como ratones de campo. Aun así, tampoco rechazan lagartijas o incluso insectos.
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© Adobe StockPueden agredir a seres humanos
No es común, pero los búhos sí atacan a los humanos, pero no todos. En concreto se ha documentado que la especie ‘Veraux’ no tiene remilgos en tratar de cazar seres humanos y que, incluso, lo ha hecho. No olvidemos que se trata de un ave rapaz, y aunque su aspecto pueda ser entrañable, su cuerpo está diseñado para la caza de mamíferos. Es famoso, además, el caso de Katheleen Peterson, una ejecutiva de Carolina del Norte que en 2001 fue hallada muerta en su hogar, todos los indicios apuntaban a que fue su marido quien le asesinó, pues tenía marcas de un forcejeo agresivo y cortes en el cráneo, su marido acabó en prisión, y años más tarde se reconstruyó la hipótesis de que en la zona residencial donde ella vivía existen búhos muy agresivos, y su cadáver presentaba algunas plumas pegadas al pelo, trozos de hojas, e incisiones que corresponden más bien a la garras de un ave.
© Adobe StockPueden nadar
El tipo más común de búho, al que se denomina “cornudo” porque tiene dos protuberancias en la cabeza que parecen dos cuernos, es el tipo de búho capaz de nadar, gracias a sus enormes alas, que planean sobre el agua y sumergen parte de su cuerpo con el objetivo de pescar. Realmente no llega nunca a mojarse del todo, pues tendría difícil emprender de nuevo el vuelo con las alas empapadas, de hecho: las agita con mucha velocidad mientras se desliza sobre el agua para secar su cuerpo. Este tipo de aleteo te podrá recordar a los colibríes, y es que se ha determinado que uno de sus parientes cercanos es este tipo de ave, además del martín pescador. Por lo que el búho, además de ave de presa pariente de los buitres, también está relacionado con colibríes y gorriones.
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