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© Adobe StockGatos de pelo largo
El pelo de los gatos es muy importante, pero hay que tener en cuenta que si tienen un pelaje frondoso es porque proceden de zonas frías, donde necesitan este abrigo extra para no perder el calor de su cuerpo. Por cada kilo de gato, se estima que los no excesivamente peludos tienen unos 30 gramos de pelo, pero en el caso de las razas con los pelajes más extensos esta medida llega a los 50 gramos. El crecimiento diario de los forúnculos es imparable, se estima que el pelo de un gato crece unos 0,25 o 0,30 mm diarios, no es de extrañar que puedan albergar hasta 1.600 pelos por centímetro cuadrado.
© Adobe StockPersa
Aunque el gato persa tenga cara de travieso, lo cierto es que es un gato muy tranquilo y silencioso. Por lo general los gatos de pelo largo se comportan de una forma menos activa que los de pelo corto, y el persa confirma esa regla. Es un gato bastante independiente, con él no hay problema si trabajas fuera, son gatos que generalmente no echan en falta la presencia constante del humano, incluso a veces parece que agradecen de forma muy especial que se les deje a su aire. Su pelo le caracteriza, es un pelaje largo y con un grosor palpable. Esto implica un aseo por superior al que tendríamos con un gato de pelo corto, es necesario que siempre esté aseado.
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© Adobe StockHimalayo
El gato himalayo es comúnmente confundido con el persa o con el siamés, eso tiene bastante lógica: se trata de un cruce entre ambas razas. El gato himalayo mantiene siempre una constante en sus ojos, son azules, y por lo general la zona de la cabeza es marrón oscuro, con cierta degradación a marrón claro según se avanza en el pelaje, y el cuerpo es blanco. Para que su pelaje esté impoluto debes cepillarlo diariamente, de lo contrario se generarán nidos de pelo muy molestos para él y difíciles de desenredar para ti. Ten en cuenta que sus ojos pueden sufrir alguna infección producida por el pelo sucio que se acumula en el lagrimal, por lo que no dudes en aplicar suero fisiológico en sus ojos y limpiar el pelo cercano.
© Adobe StockCurl americano
El pelaje de este gato tiene un aspecto silvestre bastante marcado, sus mechones erizados recuerdan a los lindes, y también el color del pelaje. Sin embargo, otra cualidad que hace único al curl americano son sus orejas: en forma de croissant. Se trata de un gato muy activo, le encanta jugar y suele buscar hacer algunas travesuras. Su pelaje es muy variado, negro, naranja e incluso azulado. Estos gastos son propensos al sobrepeso, vigila su alimentación y no rompas las porciones que le das, además, trata de que realice ejercicio todos los días, apoltronarse es su peor costumbre.
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© Adobe StockSiberiano
Lo cierto es que esta raza de gato es originaria de Rusia y de origen salvaje, sin embargo pronto se domesticó y empezó a popularizarse en todo el mundo, especialmente porque se trata de un gato muy sociable que logra desarrollar rápidamente un cariño muy especial por los miembros de la familia con la que convive. Son gatos con un estado de salud envidiable, que se puede medir por el pelo, generalmente vivo y muy lustroso. Como imaginarás, el gato siberiano vive con más agrado las épocas y los climas invernales: su pelo les prepara para las ventiscas y los temporales, pero no tanto para el calor ibérico.
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© Adobe StockMaine coon
Si algo caracteriza al maine coon es su tamaño, no solo se trata de un gato de aspecto contundente (gracias a su pelo parece incluso mayor), sino que su tamaño efectivamente es de los más grandes en felinos domésticos. Su comportamiento es peculiar, porque de la misma forma que los perros toman como referencia a un humano del hogar y le encumbran al puesto máximo de la jerarquía, los maine coon son gatos que también responden a esta estructura familiar “gregaria”, y asimilan que uno de sus dueños es el que tiene la opinión más relevante: es a quién seguir. Son gatos muy equilibrados, cálidos, curiosos y muy serenos.
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© Adobe StockChinchilla
Si dudas en reconocer a un gato chinchilla, ten en cuenta que esta raza sólo existe con pelaje de tono blanco y sus ojos siempre son verdes. Proviene de la raza persa, sin embargo tiene alguna diferencia estructural con esta raza, sus huesos son más frágiles y sus patas más gruesas y cortas. Este gato necesita de higiene diaria en su pelaje, el cepillado es indispensable para poder conseguir que este pelo tan grueso y exuberante no se enrede y se produzcan nudos. Como el persa, el gato chinchilla es tranquilo, silencioso, enérgico y muy independiente.
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© Adobe StockBobtail americano
Como muchos gatos que ahora adoramos, el bobtail apareció por sorpresa: ni es un cruce ni forma parte de una larga estirpe, sus orígenes se remontan a finales de 1960 y debe el sobrenombre “americano” por un motivo más que razonable: la primera vez que se vio fue en Arizona. Sin embargo, se denomina bobtail, como otro de origen japonés, pero ambos gatos no están emparentados aunque sí guardan un parecido muy evidente. Los bobtail americanos parecen gatos comunes, pero con el pelo algo más largo y encrespado, generalmente de colores rojizos.
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© Adobe StockBalinés
Esta raza de gato no siempre tiene el pelo largo, hay varios tipos. Cuando su pelaje es largo su semejanza a los siameses es mayor, son de color claro salvo en las extremidades y algunas zonas de la cara. Son gatos que no necesitan grandes cuidados, pero por tener el pelo largo es conveniente cepillarlos dos o tres veces por semana y estar atentos a la época de muda, pues necesitarán hierba para gatos para así expulsar convenientemente la bola de pelo que se les forma en la garganta tras su aseo personal. Son gatos muy inteligentes, les gusta mucho jugar cuando reciben un estímulo intelectual.
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© Adobe StockBirmano
Se considera que el gato birmano es una raza procedente de los siamés, pero con una melena mayor, que se caracteriza también por tener las patas blancas. El rostro de este gato es algo diferente a los demás, no tiene ese aspecto salvaje o cazador, sino más bien meloso y divertido. Se considera que llegaron a Europa en 1916 y durante la segunda guerra mundial estuvieron al borde de la extinción completa, sin embargo, se hallaron dos ejemplares: un macho y una hembra, y ellos fueron los que rescataron a la raza.
