Puede que la opción de castrar o esterilizar a tu gata te parezca muy radical, porque quieres tener la libertad de que tenga gatitos más adelante. Para evitar los cambios en el comportamiento que provoca el celo y para atajar embarazos no deseados existen otras alternativas reversibles para limitar la fecundidad de tu gata, pues, de la misma forma que los humanos podemos recurrir a medios anticonceptivos, tu gata también.