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perros riesgos primavera© Adobe Stock

¿Puedo recurrir a los remedios caseros para las pulgas y garrapatas?

Una veterinaria nos aclara si podemos recurrir a las plantas o a otros remedios para evitar las picaduras


Actualizado 7 de abril de 2022 - 20:02 CEST

Con la primavera y el buen tiempo, llegan también esos molestos y peligrosos bichitos, las pulgas y las garrapatas, que no solo producen picor y malestar en el animal, también causan enfermedades muy graves en las mascotas e, incluso, en los humanos. Por ello, si no lo has hecho ya, es el momento de proteger a tu perro o gato con los productos más adecuados para evitar que infesten al animal o acaben poniendo huevos en nuestro propio hogar. Pero, ¿podemos utilizar remedios naturales o caseros para combatirlo? Se lo preguntamos a la veterinaria Elena Dieguez, dermatóloga y Practice Manager de AniCura Abros Hospital Veterinario, quien nos explica qué productos son los más eficaces para nuestros animales de compañía y si las plantas o los aceites pueden servirnos.

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Los productos más eficaces para pulgas y garrapatas

Hoy en día tenemos en el mercado veterinario productos para prevenir y eliminar las pulgas y otros parásitos muy eficaces y fáciles de usar. El cuidador puede elegir, asesorado por su veterinario, el que mejor se adapte al estilo de vida y la edad de la mascota y que le proteja a lo largo del año frente a los parásitos habituales de la zona geográfica en la que vive.

Existen diferentes presentaciones con sus ventajas e inconvenientes:

  • Los collares antiparasitarios son una buena elección por precio y comodidad. Algunos tienen duración de hasta 12 meses. Sin embargo, la tranquilidad que aporta su larga duración puede ser una desventaja si no se lleva un calendario de desparasitación periódico actualizado y el cuidador se despista en la fecha de caducidad. En algunos casos pierden eficacia con los baños o se los quitan unos a otros cuando conviven varios perros. Tampoco es la mejor opción en gatos con acceso al exterior porque pueden quedar enganchados en algún obstáculo.
  • Las pipetas son una alternativa excelente para la prevención y tratamiento de la infestación por pulgas. Es necesario aplicarlas en puntos donde no se alcancen con la lengua, para evitar la ingesta del producto, y en algunas formulaciones no se debe bañar al animal uno o dos días antes y después de su administración porque puede restarle eficacia.
  • Los antiparasitarios externos en forma de comprimidos masticables tienen la ventaja de que nos aseguramos de su acción al ser ingeridos por el animal y la desventaja de que, a pesar de tener sabor y textura de golosinas, algunos perros no los aceptan de buen grado.

Finalmente, hay que aclarar que la mayoría de los antiparasitarios que se usan como tratamiento y prevención de las infestaciones de pulgas no repelen la picadura, sino que la pulga pica para ingerir sangre, absorbe el antiparasitario y muere sin reproducirse. La prevención se consigue por el efecto antiparasitario continuado.

Los champús antiparasitarios o algunos parasiticidas en forma de aerosol, polvos o loción no deben usarse como tratamiento preventivo, solo como tratamiento puntual. Matan las pulgas que estén en ese momento sobre el animal, pero no previenen que otras suban a picar y cuando lo hagan ya no estará protegido y podrán reproducirse.

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¿Pueden ser nocivos para la salud de nuestras mascotas?

Aunque sean poco frecuentes los efectos adversos, cualquier producto antiparasitario puede ser potencialmente nocivo. Es muy importante usar antiparasitarios registrados para la especie, el peso y la edad del animal. Y también que la vía de administración sea la que indica el prospecto.

Si seguimos las pautas del laboratorio y los consejos del veterinario, los antiparasitarios que tenemos en el mercado son muy seguros para las mascotas y siempre será mucho mayor el beneficio, para los animales y las personas, de una desparasitación periódica adecuada que el riesgo de los posibles efectos secundarios.

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¿Cómo funcionan las pastillas contra pulgas y garrapatas en comprimidos?

El principio activo de estos antiparasitarios son unas moléculas llamadas isoxazolinas. Se comercializan desde hace apenas una década y supusieron una revolución por la presentación novedosa en comprimidos, pero sobre todo por la eficacia y seguridad para eliminar y prevenir pulgas y garrapatas y también otras enfermedades parasitarias como la sarna demodécica o sarcóptica.

No solo se utilizan en animales de compañía, también en ganadería y agricultura, y se están estudiando en medicina humana como tratamiento y prevención en enfermedades como la malaria o la fiebre del Zika.

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¿Bastaría con desparasitar al animal?

Cuando detectamos una pulga sobre el pelaje o la piel de una mascota, estamos viendo un individuo adulto. Una pulga adulta pone alrededor de 50 huevos cada día y viven unas 4 semanas. Esa gran cantidad de huevos y larvas están en el ambiente no en el animal. Por lo tanto, si vemos pulgas además de aplicarle un antiparasitario, debemos limpiar también el hogar para prevenir reinfestaciones y que piquen a otros animales y personas convivientes.

También me parece importante resaltar que a veces tenemos la idea errónea de que no es necesario desparasitar a las mascotas de vida interior (ej. gatos o perros que salen poco a la calle) y nada más lejos de la realidad. Aunque el animal no salga de casa, las pulgas pueden llegar desde el exterior portadas por algún perro del edificio o por nosotros mismos.

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¿Sirven los remedios naturales?

Los remedios naturales no tienen evidencia científica que avale su eficacia, sin olvidar que pueden resultar tóxicos para los animales y que confiar en su efecto antiparasitario puede ser una negligencia. Algunas plantas tienen cierto efecto repelente y se comercializan en forma de aceites, champús, collares, etc. Sin embargo, se desconoce el grado de protección que proporcionan y esta depende en gran medida de la carga parasitaria del entorno.

Como conclusión, debemos proteger la salud de las mascotas y la nuestra siguiendo un estricto calendario de medicina preventiva diseñado por un veterinario acorde al riesgo de parasitación de cada animal y usando antiparasitarios con evidencia científica y eficacia avalada.

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