Uno de los placeres de la acuariofilia es poder observar la sinfonía de colores en movimiento que representan los peces nadando. Existen especies muy llamativas, incluso provocadoras, que manifiestan sus aletas como si fueran vestidos de gala, con colores alegres, eléctricos y personalidades románticas. La belleza de los peces no sólo es una cuestión estética, cada especie tiene una forma de socializar, de nadar y de protegerse, por lo que cada vez que miras a la pecera estás viendo una nueva composición de ese pequeño mundo, un mosaico distinto a cada instante.
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Pez ramirezi (Mikrogeophagus ramirezi)
Esta especie es natural del río Orinoco, que recorre Colombia y Venezuela. Se trata de un pez con unos colores muy vivos y moteado con manchas negras. Los machos tienen un color más llamativo, además de ser más grandes. Se trata de una especie monógama, suelen vivir en parejas y hacerse cargo juntos de las crías. Por tanto, es un pez muy tranquilo, pero a la hora de proteger a su prole puede ser algo territorial e incluso desarrollar conductas agresivas con otras especies.
Pez platy (Xiphophorus maculatus)
Estos peces son muy sociables por lo que puede ser recomendable tener más de uno de la misma especie para que se relacionen y naden juntos. Se trata de un pez pequeño, mide entre 3 y 6 centímetros. En su caso el macho es el pequeño y la hembra mayor, porque se trata de una especie ovovivípara, es decir, que la hembra mantiene en su vientre los huevos fecundados y no los expulsa hasta que eclosionan. El color de estos peces es muy variado, va desde los rojos y amarillos hasta los verdes y azules.
Pez gurami enano (Thrichogaster lalius)
Este pez no solo es bonito por su apariencia, sino también por su comportamiento. Se trata de una especie muy pequeña, no llega a medir más de 6 centímetros, lo que le hace bastante único porque los peces con forma rectangular, como este, suelen ser mayores. Sus colores tienden a ser vivos, casi eléctricos, siendo sus aletas laterales las que adquieren generalmente un tono más claro. Son muy tímidos y solitarios, no les gusta estar cerca de peces rápidos, y suelen nadar en la zona superior de la pecera.
Pez dorado común (Carassius auratus)
Es el pez más popular de los acuarios de todo el mundo porque, además, fue uno de los primeros en criarse en cautividad como animal de compañía, fue en China, donde además se consumía para la alimentación. Este pez dorado es una carpa, y se le conoce también como “carpín dorado”. Es bello aunque bastante común en los acuarios de todo el planeta, sin embargo es un inquilino necesario siempre y cuando los demás peces no entren en conflicto con su especie y pueda adaptarse a las condiciones térmicas de nuestro ecosistema doméstico.
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Pez tetra neón (Paracheirodon innesi)
Se trata de una de las especies de peces de acuario más pequeñas, apenas llega a superar los 4 centímetros. Debe su nombre a que los colores que muestra bien podrían ser eléctricos, al mantener unos tonos de azules o rojos muy intensos que brillan con la luz y parecieran estar conectados a una batería. Es muy bonito ver a varios peces neón nadar al unísono o componer un mosaico, así parecen también como si de una composición eléctrica se tratara. Lo más interesante de su color es que son capaces de cambiar de tono para protegerse o aparearse. Más oscuro cuando pretenden mantenerse a salvo y más brillante cuando quieren conseguir pareja.
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Pez disco (Symphysodon)
Es uno de los peces más demandados por quienes aspiran a componer un acuario exótico y colorido, sin embargo se trata de una especie de agua dulce muy sensible, con la que debemos tener mucho cuidado a la hora de mantener siempre un nivel de calidad del agua muy alto, una alimentación adecuada y saludable y la correcta depuración de su entorno, pues el pez disco es muy propenso a padecer infecciones. Su apariencia es muy llamativa, primero porque tiene ese aspecto casi redondo que le da nombre (disco) y también por las ocho franjas que pigmentan su piel, siempre en colores llamativos y muy alegres.
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Pez guppy (Poecilia reticulata)
Esta especie procede de sudamérica, generalmente vive en ríos y lagos de Perú o Venezuela. Es un pez muy sencillo en cuanto a su mantenimiento, por lo que se ha convertido en una especie popular en los acuarios de todo el mundo. Su gracioso nombre no significa nada descriptivo sobre su apariencia o comportamiento, sino que se trata del apellido del zoólogo británico que presentó esta especie en Europa en 1886. El tamaño de su aleta caudal, su colorido y el movimiento que genera al nadar da la impresión de que se trata de un abanico. Si están en pareja les verás siempre en movimiento: los machos de esta especie buscan aparearse siempre que sea posible, generando comúnmente persecuciones y disputas, pues las hembras son muy selectivas, y éstas tratan de rehuir la cópula siempre que pueden.
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Pez betta (Betta splendens)
Para los aficionados a los acuarios el pez betta (o pez luchador de Siam) es uno de los más preciados. Su aleta es inconfundible, parece que se despliega formando cabellos de una larga melena, y al nadar se mueve como ondeando al viento. Podría asemejarse también a un vestido de cola. Además, sus colores suelen ser muy vistosos: rojos intensos o azules llamativos. Procede del sudeste asiático, donde es muy común, podríamos encontrarlo en las aguas de los campos de arroz de China, Vietnam o Tailandia, como si de una aparición colorida se tratara. Sin embargo, no podemos dejarnos llevar solo por su belleza, el pez betta puede ser muy violento, de ahí que se le denomine también como “pez luchador”, los especímenes macho luchan hasta destrozarse las aletas, lo cual representa una acción territorialista para afear al oponente. Sin embargo, las hembras son tranquilas y en principio no describen comportamientos agresivos.
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Pez cíclido convicto (Amatitlania nigrofasciata)
Se trata de una especie grande, que puede llegar a los 15 centímetros, las rayas negras sobre el fondo blanco de este pez hacen que su denominación común sea “pez convicto”, no solo porque parece que lleva el uniforme clásico de los presos de las películas de los años 20, sino porque además tiene un carácter que puede ser agresivo. El peor momento para encontrarse con él en el acuario es durante la puesta de huevos, esta especie se muestra muy a la defensiva ante cualquier posible depredador que pudiera acabar con su progenie.
Pez ángel (Pterophyllum scalare)
Se trata de una especie tropical que proviene originalmente del Amazonas. Es uno de los peces más demandados en los acuarios que buscan diferenciarse e introducir especies más llamativas y atrayentes. Los colores que tendrán pueden variar bastante entre cada espécimen, lo que más le caracteriza además de su forma triangular son las manchas negras y, generalmente, los colores vivos que muestran bajo éstas. Se trata de un pez con mucho apetito, uno de sus principales peligros para su salud es que es capaz de comer hasta enfermar. Vigila su voracidad, pues los peces muy comilones son un peligro para ellos mismos y para los demás, pues pueden dejar sin comida a otras especies.
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