Elegir la decoración navideña para nuestro hogar siempre es un momento de diversión, pero también debe ser un ejercicio de responsabilidad con nuestras mascotas. "Y es que los adornos típicos de estas fechas conllevan riesgos asociados a la atracción de las mascotas por los colores y materiales más llamativos utilizados y esto, sin duda, hace que debamos extremar las precauciones para que toda la familia, incluidos los peludos, puedan disfrutar de una Navidad segura", señala Ana Ramírez, directora técnica veterinaria de Clínicas Kivet.
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Por ejemplo, a todos nos gusta poner el árbol. Pero antes de decorarlo debemos tener en cuenta qué elementos decorativos pueden conllevar un riesgo si tenemos mascotas en casa. En este sentido, Ana Ramírez señala que lo primero que tenemos que pensar es el lugar donde lo vamos a colocar.
Si tenemos perros, lo ideal es que sea en un lugar alto de difícil acceso. Sobre todo, si nuestro animal de compañía es un cachorro. Las bolas, las tiras y otros elementos decorativos resultan muy atractivos para nuestro pequeño peludo, deseoso de encontrar diversión en cualquier rincón de la casa.
Ancla bien el árbol
Además del lugar, es importante fijarlo bien para evitar que su caída pueda suponer un riesgo de aplastamiento o traumatismos para gatos, perros y otros animales. Fijar con peso el pie o utilizar anclajes a la pared o el techo pueden ser buenas ideas en este sentido. No es necesario que diseñes una obra de ingeniería para fijar bien el árbol. Lo importante es que el árbol quede fijo y que no pueda vencerse y causarte un disgusto.
Evita adornos esféricos
En cuanto a los adornos que colgamos del árbol, hay que tener en cuenta, como decíamos, la predilección de los perros y gatos por los elementos brillantes y de colores. Por ello, "lo mejor es, o bien colocarlos en la parte alta, donde nos aseguremos de que están fuera de su alcance, o bien decantarse por tonos más neutros y materiales menos llamativos. Además, si tu mascota está acostumbrada a jugar con pelotas, será mejor evitar las bolas esféricas, para que no las asocien con los objetos de juego", alerta la experta en veterinaria de Clínicas Kivet (de Kiwoko)
Si pones luces, mejor a pilas
Por otro lado, las luces también resultan muy llamativas para los gatos y perros, por lo que siempre es conveniente colocarlas lo más pegadas al tronco que sea posible. De esta manera, evitamos que puedan morder las bombillas, pero también los cables. Y es que en caso de que esto ocurriera, los animales podrían sufrir peligrosas descargas. En este sentido, es también recomendable desenchufar las luces cuando no se está en casa. O usar luces a pilas. De esta manera, minimizas el riesgo de un accidente.
Revisa los materiales
Los materiales de los que están fabricados los adornos también son muy importantes de cara a elegir una decoración segura, ya que "debemos decantarnos por aquellos que no impliquen un riesgo si, por ejemplo, caen del árbol y se quiebran, como puede ocurrir con las bolas de cristal, o si se los comen, por tener una textura atractiva para nuestros peludos, como el caso del espumillón, que puede provocar obstrucciones intestinales al ser ingerido". Cuidado también con los adornos navideños con cascabel. Pueden resultar atractivos para tus mascotas y pensar que es un juguete al que hincar el diente.
Las piezas pequeñas pueden causar atragantamiento y asfixia
Al igual que los niños más pequeños, tus mascotas también pueden sufrir atragantamientos si cogen los adornos pequeños del árbol o las figuritas del belén. Por lo que el tamaño de las figuritas es otro aspecto que debes valorar.
Otros de los peligros para tu mascota en Navidad son las velas y las plantas. La razón de por qué las velas suponen un riesgo para nuestros peludos es obvia. Pueden quemarse. De ponerlas, asegúrate de que estén colocadas en lugares altos y de difícil acceso.
Pero no siempre tenemos en cuenta que algunas plantas decorativas pueden ser tóxicas para perros y gatos. Como nos aclara la experta en salud animal, hay determinadas especies que, en caso de ingesta o contacto intenso con la piel o los ojos, pueden acarrear problemas gastrointestinales, como diarreas o vómitos; o bien urticarias si el contacto es por la piel, irritación de las mucosas e hipersalivación. Entre aquellas más empleadas para dar el toque navideño a nuestros hogares se encuentran el muérdago, el acebo, la planta de navidad o el eucalipto; todas ellas especies muy tóxicas para gatos y perros, tanto sus hojas como sus frutos, y que, por tanto, es mejor evitar.
Chocolate, turrones y otros 'premios' que no les debes dar
Por último, no podemos dejar de insistir en que nuestros animales no deben comer lo mismo que nosotros. Y para lo que para nosotros no supone ningún peligro siempre que lo consumamos con moderación, hay dulces y otros alimentos que pueden amargarnos las navidades si nuestro perro o gato los consume.
Es el caso, por ejemplo, del chocolate. Contiene una sustancia, la teobromina que, como nos recuerda Noelia Suárez de Nutritienda.com es tóxica para nuestras mascotas. Tampoco debemos darles las sobras, aunque pensemos que les estamos haciendo un favor, nuestras comidas navideñas suelen ser ricas en grasas, ser demasiado saladas o dulces, lo que les puede costar digerirlas y provocar problemas gastrointestinales.
Esto no implica que también ellos puedan disfrutar de snacks y postres para mascotas en Navidad, afirma la experta de Nutritienda. Hay premios y golosinas especialmente fabricadas para ellos.
Por último, no está de más que llevemos un botiquín para nuestra mascota. Nunca se sabe qué puede pasar. Quizá un pequeño corte, un golpe o una leve quemadura. Siempre debemos tener a mano el teléfono de nuestro veterinario de urgencia, pero, para los incidentes leves, todo lo imprescindible debe estar en un pequeño botiquín. Gasas, vendas, espray cicatrizante, suero fisiológico o tijeras no deben faltar.
En definitiva, las mascotas forman parte de nuestra familia y, como tal, debemos y tenemos que disfrutar de unas fantásticas Navidades en su compañía, pero siempre tienen que ser seguras. seguras.
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