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Un perro adulto duerme diariamente entre 12 y 14 horas, puede que te parezca demasiado teniendo en cuenta que esa cantidad de sueño equivale a la mitad del día, sin embargo tiene su explicación científica.
Los perros solo pasan el 20% de su tiempo activos, es decir, en actividades físicas, lúdicas o de interacción. Eso es muy poco tiempo, sin embargo suelen ser picos de uso de energía muy altos, con una actividad intensa y con una forma de experimentar vivencias muy a flor de piel. Notarás que cuando tu perro pide algo, cuando juega o cuando persigue siempre lo hace dando el 100% de sí, como si fuera la última cosa que hace.
El tiempo que duerme un perro está relacionado con su raza y su tamaño. En función de su musculatura o temperamento le corresponderá una forma distinta de descansar. Los perros pequeños duermen más porque su cuerpos precisan ejercitarse menos, y los perros corpulentos y muy atléticos necesitan justo lo contrario. También, con el paso del tiempo, los perros necesitan dormir más, en una medida inversamente proporcional a los ancianos humanos
Cuando los perros duermen lo hacen a un nivel menos profundo que los humanos, pues a cualquier hora del día pueden surgir amenazas o sorpresas para las que ellos son especialmente receptivos. Sus periodos de sueño son más cortos, sólo un 10% del sueño de los perros es REM, es decir, de máxima profundidad, por lo que la calidad de su descanso en relación a la forma de dormir de los humanos resulta menor. Es decir, una hora de sueño de perro es de mucha menos calidad que la de los humanos y por esa razón deben dormir más horas.
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La duda sobre si los perros sueñan fue resuelta
Primero hubo estudios que midieron la reacción de los perros ante el sueño, su carencia, y la actividad física. Desde hace varias décadas se estima que los perros también sueñan, es decir, reviven situaciones modificadas en tu mente y reaccionan activamente a estímulos oníricos durante el tiempo en el que permanecen dormidos.
Es común que los perros sean vistos por sus dueños estirando las patas como si estuvieran en movimiento, reaccionando con el hocico o simulando una especie de gruñido soñoliento. De forma empírica se tuvo en cuenta que los perros eran capaces de soñar porque durante el tiempo que permanecían dormidos reaccionaban de una manera similar a los humanos.
Posteriormente se confirmó esta tesis realizando estudios profundos y pormenorizados de las fases de sueño de los perros mediante encefalogramas, en los que se pudo concretar que los canes pasan, efectivamente, por las mismas fases del sueño humano y que estos datos asociados a la actividad eléctrica de sus cerebros durante el sueño se corresponden de forma paralela y muy similar a gestos involuntarios, gruñidos o sacudidas de su cuerpo.
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En qué consiste el sueño de tu perro
Se estima que, de la misma forma que los sueños humanos sirven para asentar experiencias en el recuerdo, los perros tienen frente a sí un repaso de lo que les ha acontecido el día en forma de historia simbólica, mezclada y repleta de deseos, miedos y estímulos automáticos.
Como en el caso de las personas, el sueño de los perros funciona de reparación del cansancio y de refuerzo sobre lo aprendido. Varios estudios, tanto en humanos como en perros, demuestran que aquellos conocimientos aprendidos un día, son mejor recordados si se pernocta con un sueño de calidad. De la misma forma, los perros que realizan adiestramiento o viven situaciones significativas, logran integrarlas mejor en su educación o aprendizaje si su descanso es pleno durante la noche siguiente.
De esta forma, se ha determinado que los cachorros duermen más y con mayor profundidad y que los más ancianos, que no logran conciliar un sueño profundo. Esto se explica con la diferenciación de aprendizaje de ambas etapas, el cachorro lo tiene todo por descubrir y su cerebro está en constante desarrollo y aprendizaje. Sin embargo, los perros más ancianos duermen con menos profundidad y se estima que sueñan menos porque sus cerebros ya no admiten más conexiones, ya no están predispuestos a aprender ni a profundizar en las vivencias del día anterior, su nivel de memoria es profundamente menor y todo ello está acrecentado una actividad física menor, que les hace vivir menos experiencias.
Tú eres la protagonista de su sueño
Los científicos parecen estar de acuerdo en que los perros probablemente sueñen con su humano de referencia. Esta situación se explica mediante la clave de importancia sobre la que los perros ponderan a su dueño, su educación y su modus vivendi está asociada a un solo humano, son animales fieles en el sentido de que su dueño se convierte en la llave para interactuar al mundo y su olor, su voz y su personalidad son el eje sobre el que gira su vida.
Es por eso que se cree que gran parte del tiempo en el que el perro sueña lo hace rememorando juegos y situaciones vividas el día anterior, especialmente las que corresponden al tiempo pasado con su dueño, y estas vivencias se mezclan (como ocurre en el caso de los humanos) con experiencias no vividas pero construidas a raíz de su experiencia junto a ti y que reflejan momentos cotidianos, miedos, deseo o situaciones de alerta.
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