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El Savannah es un gato doméstico que más bien parece un leopardo, un felino salvaje. La primera vez que se tuvo conocimiento de la existencia de esta raza de gato fue en 1986, cuando en Estados Unidos nacieron las primeras crías del cruce entre un serval africano y distintas especies de gatos domésticos. El mestizaje tuvo sus críticas y la polémica estuvo servida. En el año 2012, sin embargo, The International Cat Association (TICA) la reconoció como una raza oficial.
Características físicas de los gatos Savannah
Estos felinos tienen características físicas muy llamativas, especialmente, si lo comparamos con cualquier otro gato. Son animales altos, pueden alcanzar los 70 centímetros de altura, ya que sus patas son largas y estilizadas, como el resto de su cuerpo. Su peso puede duplicar al de cualquier otra raza de gatos. Existen ejemplares que llegan a pesar 18 kilos, aunque el promedio suele rondar los 10 kilos. La cola de estos animales es otra de sus peculiaridades, mide entre 25 y 40 centímetros de largo.
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Cuando decidieron crear esta raza, la intención fue conseguir un 'minino' con expresión salvaje. Y así es. Su mirada es aguda, profunda y los ojos suelen ser de color oscuro. Cuando se siente en peligro no emite el clásico ronroneo de los gatos, el sonido que produce es más parecido al de una serpiente que al de un felino. La mayoría de los gatos domésticos con los que se cruzó al serval africano, eran animales de pelo corto y fino, por eso no es de extrañar que el pelaje de los savannah sea similar.
Presentan diformismo sexual, las hembras son más pequeñas que los machos, probablemente, por la carga genética de sus ancestros. La esperanza de vida de estos animales puede llegar hasta los 20 años, aunque con frecuencia viven entre 10 y 15 años. En algunos países su tenencia está prohibida o regulada, como ocurre en España, al ser considerada una especie exótica.
© Adobe StockLas variedades de gato savannah que puedes encontrar
Al descender de un felino salvaje, los gatos savannah cuentan con una clasificación según la cercanía que tengan con su antecesor. Los gatos considerados F1 son las crías nacidas del primer cruce entre el serval y el gato doméstico. Los gatos F2 son los que nacen de un gato savannah cruzado con un gato doméstico. Y así sucesivamente hasta la categoría F5 que es la menos pura.
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¿Puedes tener en casa un gato savannah?
Es una especie que puede considerarse exótica por su apariencia, pero sus gustos y características no difieren mucho de animal doméstico. Al tener un tamaño considerablemente más grande estos animales necesitan hacer más ejercicio que otros gatos domésticos. Por ello, muchos dueños optan por sacarlos a dar paseos con una correa, algo que les encanta. Son gatos cariñosos y sociables que pueden convivir con niños y adultos por igual.
El savannah no requiere cuidados especiales, ni se tiene constancia de que padezcan enfermedades congénitas o específicas de esta raza. Generalmente, basta con que visites al veterinario dos o tres veces al año y que le cepilles el pelo con regularidad porque mudan varias veces su pelaje. Así le ayudarás a retirar el pelo muerto.
Uno de los mayores impedimentos para tener en casa a un gato de esta especie es su coste. En España pueden adquirirse desde los 2 mil euros hasta los 10 mil. Al tratarse de una especie exótica es importante que lo adquieras en sitios de confianza y regulados.
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