Dilyn, el nuevo residente de Downing Street
El primer Ministro Británico Boris Johnson y su pareja Carrie Symonds han adoptado a un perrito abandonado que ya es toda una celebridad
El nombre de Boris Johnson no deja de ocupar titulares en todo el mundo. El Primer Ministro británico continúa en el centro de la actualidad mediática debido a las negociaciones que mantiene con Bruselas y el Parlamento británico por el Brexit, sin embargo, en esta ocasión su protagonismo no está directamente relacionado con la política. El nuevo líder del Partido Conservador ha vuelto a convertirse en noticia tras adoptar a un perrito callejero que, a partir de ahora y mientras dure su mandato, convivirá con él y con su pareja Carrie Symonds en el famoso número 10 de Downing Street.
Se trata de un pequeño cachorro de la raza Jack Russell que había sido abandonado por una granja de criadores de perros. La adopción del can, que ha recibido el nombre de Dilyn, fue tomada por consenso de los trabajadores de la residencia del Primer Ministro y, tras ello, Johsnson y Symonds se pusieron en contacto con la protectora de animales de Gales en la que se encontraba para realizar los trámites de adopción. En un comunicado, la protectora, que el pasado 2 de septiembre se acercaba a entregar al perrito a Downing Street, ha querido agradecer a la pareja el gesto de "abrir sus corazones y su hogar a un superviviente de una granja de cachorros, y ha calificado a los adoptantes como "grandes amantes de los perros".
Larry, el 'cazador de ratones oficial'
El terrier, utilizado en numerosas ocasiones como perro de caza, deberá convivir con el otro 'peludo' de Downing Street, Larry, conocido también como "el cazador de ratones oficial" de la casa del Primer Ministro. Según alertaba un portavoz de la perrera a la revista Tatler, el cachorro convivió "con un gato durante varias semanas y es solo un bebé, creo que se adaptará bien. Tal vez haya más problemas por parte del gato, pero mientras que el cachorro aprenda quién manda ahí todo irá bien", explicaba mientras se refería al minino, que fue adoptado en el año 2011 por el entonces Primer Ministro David Cameron para lidiar con el problema de roedores en la residencia oficial.
A favor de la 'Ley Lucy'
La adopción del animal es una muestra de apoyo a la conocida Ley Lucy, que prohíbe la venta de cachorros y gatitos de menos de seis meses en las tiendas de mascotas, para frenar la explotación y los malos tratos infligidos a los animales. Se prevé que la ley, que pretende controlar además las irregularidades de los criaderos de perros y fomentar la adopción y no la compra-venta de animales, entre en vigor a partir del año próximo en Inglaterra. Una iniciativa a la que cada vez se unen más gobiernos. Hace unos meses, por ejemplo, el estado de California aprobaba un decreto por el cual prohibía la venta de animales que no hubiesen sido rescatados, exigiendo a los comerciantes justificar la procedencia de los mismos.