Ayuda a tu gato a ser más sociable
Los gatos domésticos pueden ser animales muy sociables si se les estimula desde pequeños para conseguirlo y crecen en un entorno de cariño y amabilidad.
Aunque los gatos se caracterizan por ser animales muy independientes y territoriales, es posible lograr que sean más sociables de lo que en principio parecen. Si nos lo proponemos, podemos estimular y adiestrar con facilidad a nuestro gato para lograr que se relaciones con su entorno de manera positiva.
Cuanto antes socialicen, mejor
Enseñar a un gato adulto a ser sociable es mucho más complicado que enseñar a uno pequeño. Si queremos que nuestro gato sea sociable, no hay nada mejor que educarlo para ello prácticamente desde que nace. Si desde el primer día de vida se siente acompañado y no aprecia la distancia con su entorno, se acostumbrará a la compañía y la normalizará. Su primer contacto será con su madre y sus hermano, con los que aprenderá a comunicarse como hacen los felinos. Y será a partir de los tres meses cuando podrá ampliar ese círculo de relación y afecto a personas y a otros animales (si, por ejemplo, hay algún perro en la casa).
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Tu gato también necesita contacto físico
Y que este contacto se haga con amor y cariño. El afecto es un arma poderosa, tanto para las personas como para los animales. Háblale despacio, con dulzura, y acaríciale siempre que puedas, siempre sin agobiarle y sin invadir su espacio. Puedes darle golosinas específicas para gatos, jugar con él, peinarle… todo esto hará que se sienta querido y empezará a mostrarse, de manera progresiva, cada vez más cercano.
Involucra a la familia
Es importante que toda la familia pase tiempo con el gato y colaboren a la hora de darle comida y mimos. Así os verá a todos como seres cercanos a él, protectores y amigos, y creará con vosotros un vínculo muy positivo y cercano. Encontrad cada día un momento para darle cariño, y aprenderá tanto a darlo como a recibirlo.
Una de las formas más efectivas de crear un vínculo fuerte con un gato es alimentándolo. Puedes tomar la cantidad de comida que le das en un día y repartirla en varias tomas. Así reforzará la idea que ya tiene de quién le da de comer a diario con tanto cuidado y cariño, especialmente si le hablas o le haces un gesto de afecto mientras le sirves el pienso.
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Qué hacer cuando hay visitas
Si recibimos la visita de personas que no suelen ir a nuestra casa, nunca debemos obligar a nuestro gato a mostrarse sociable, porque seguramente no le apetezca. Es mejor esperar a que pase un rato y el gato se haya acostumbrado a la presencia de los desconocidos en el hogar. Entonces podemos cogerle en brazos y acercarlo con delicadeza a las visitas para que pueda olerlas. Luego cerraremos la estancia, si es posible, para que no se pueda ir y le dejaremos en el suelo. Puede que al principio busque un rincón para apartarse de la gente, pero poco a poco irá sintiendo la confianza suficiente para acercarse a vosotros.
No te olvides de jugar
Jugar ayuda a los gatos a desarrollarse no solo físicamente, sino también emocionalmente. Además necesitan jugar a diario, porque para ellos son muy importantes las rutinas. Aprovecha los momentos de juego para involucrar a la familia o para que se relacionen con otros animales que pueda haber en la casa. Busca juegos no invasivos, apoyándote en la gran variedad de juguetes para ellos que existen en el mercado, y que os harán pasar ratos de diversión, a la vez que se refuerzan vuestros lazos afectivos.
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