Centra tu atención en dos cuestiones tan esenciales como la salud y el trabajo. Tienes una gran oportunidad de efectuar pequeños cambios que generen grandes mejoras. Con frecuencia, caemos en rutinas sobre las que no reflexionamos y eso lleva a inercias que no siempre son las más apropiadas, o que conviene corregir con el paso del tiempo. Es momento de tomar conciencia e introducir nuevas dinámicas en los cuidados de tu cuerpo, como la alimentación o el ejercicio. Pero también en las tareas laborales y las relaciones con compañeros. La vida doméstica también estará en esta misma tesitura: piensa cómo utilizas los tiempos y los espacios. También es tiempo de transformación espiritual, algo que puedes notar especialmente en estos meses.
Por otra parte, es tiempo de sacar chispas con tus ideas, poner tu mente a trabajar en nuevos conocimientos o la organización de cosas que ya sabes, proyectos, etc. Una etapa que puede llevarte a una especial actividad con los hermanos o vecinos, y quizá debas arrimar el hombro.
La segunda mitad del mes será apropiada para entablar negociaciones o buscar nuevos equilibrios en tus relaciones personales.