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“Hay amores que matan” dice la voz popular, y esta relación puede realmente ser muy tortuosa. Se trata de dos signos muy diferentes; mientras que Aries es impulsivo y muy seguro de sí mismo, Escorpio es más introvertido y se mueve por instinto. Esto puede provocar profundos altibajos entre ambos con discusiones e incomprensión constantes.
A menos que os esforcéis por canalizar hacia objetivos comunes las poderosas y potentes cargas de energía de energía de ambos signos corren el riesgo de chocar. Tanta pasión puede dejar a ambos signos sin aliento.
Lo mejor. Admiración y respeto. Acción y aventura. Afán de superación.
Lo peor. Los comportamientos radicales y extremistas. Los prontos de carácter y la ira.
