Es momento de aprovechar el paso del Sol y Mercurio por tu signo para replantearte algunas cosas y poner al día tu agenda, pero, sobre todo, para centrar en ti y no perderte en medio del ruido, como puede haber pasado últimamente. Sin embargo, te adentras en una larga etapa de varios meses en la que deberás prestar especial atención a las relaciones personales más estrechas o de mayor compromiso, como pueden ser pareja, socios o contratos.
Una etapa que, bien enfocada, será apropiada para asumir retos conjuntos, buscar estímulos mutuos o participar en nuevas iniciativas de gran interés. Un tiempo apropiado para hacer equipo o crecer con los demás.
Pero, si no lo canalizas bien, podrían surgir enfrentamientos, diferencias de opinión, situaciones de fuerza o incertidumbre en tus relaciones y guerra de nervios. Anclarse ahora o encastillarse en determinadas posturas podría ser contraproducente.
También será cuestión de reordenar tus ideas, pensamientos y forma de comunicarte, sobre todo, en relación con la vida laboral, puesto que todo cuanto hagas ahora puede tener mayor repercusión, ya sea en un sentido u otro.