La palabra refugio cobra especial significado en la casa de Menorca de Blanca Miró Scrimieri, con el campanario de la iglesia de San Luis como telón de fondo y donde los originarios muros de piedra seca, preservados intactos, recorren la parcela a modo de intrincado laberinto. Dentro aguarda una antigua construcción de payeses reconvertida en joya rústica, que no ha perdido su esencia. Y todo gracias al buen hacer de Rosarietta Scrimieri, madre de Blanca e interiorista. “Ella se ha encargado de todo. Cuando pusimos un pie aquí por primera vez ¡no había ni baños!”, cuenta una Blanca embarazada de siete meses, a quien su madre, a cambio del halago, concede el del art de la table. “De todo el tema de vestir las mesas se encarga mi hija”, precisa, mientras Blanca, ufana, escoge manteles, vajilla y flores, aportando de forma innata el guiño de trazo colorista y vital que con tanto éxito ha logrado imprimir a sus marcas de moda, La Veste, creada junto a su íntima amiga María de la Orden, y de la que nos adelanta que abrirán tienda física a finales de año, y Delarge, la firma de gafas de sol que creó hace dos junto a otra buena amiga, Olivia Álvarez. “Mi padre -Carlos Miró, fallecido en 2017- era un gran coleccionista de gafas y de él heredé esta pasión”.
-Además de la moda, está la decoración. No hay más que ver tu 'arte' en À table! by Blanca, tu cuenta alter ego en Instagram.
-Es algo que he visto toda mi vida en casa. Desde pequeña he acompañado a mi madre a buscar muebles para sus proyectos. Es una gran anfitriona y siempre le ha gustado organizar comidas y cenas con amigos en casa. Me encantaba ver cómo lo preparaba todo, me explicaba los pasos y de ahí nació mi pasión por cada detalle que compone una mesa, lo que yo llamo L’art de la table.
-¿Qué has heredado de tu madre?
-Diría que su estilo, aunque ella siempre se supera. Mi madre y mi abuela me inspiran muchísimo. Ambas son mujeres fuertes e independientes, con mucho carácter y personalidad.
-Hablemos de Menorca. ¿Qué significado tiene para ti?
-Es gran parte de mi vida, mi infancia y guardo recuerdos llenos de nostalgia. Es una isla que tiene algo más especial que el resto, al menos para mí. Cuando la piso siento que entro en un estado de paz muy puro. Parece como si el tiempo se detuviera cuando estoy aquí, y disfruto cada segundo. Estoy muy orgullosa de ver cómo está 'abriendo la mente' y de la gente tan interesante que está llegando a ella. Diría que se encuentra en un gran momento; cada día pasan cosas culturales diferentes, la gente quiere venir y, sobre todo, ¡quiere quedarse!
-¿Cuál es tu rincón favorito de esta casa?
-El porche donde están los sofás que yo llamo del chill out, donde pasaba las horas con mis padres escuchando los pájaros y sintiendo la brisa de la tarde. Además de los sofás, aquí cada pieza tiene su historia, ya que mi madre se pasa el día comprando antigüedades (una de las más preciadas es la colección de vírgenes de Cap i pota, muy populares en la zona del Levante en el siglo XVII y que Rosarietta luce expuestas en una balda en la habitación principal de la casa, como si fuese un oratorio particular). La planta superior es la que alberga este cuarto y en su origen fue una cámara para el secado, que todavía conserva la identidad de sus raíces payesas.
-El mar queda cerca de la casa. ¿Sueles escaparte?
-Está al lado. Cuando era pequeña lo tenía enfrente de la urbanización donde pasábamos los veranos, la que fue mi primera casa en la isla. Ahí sigue estando mi rincón más especial, en las rocas, donde crecí y donde todavía visitamos a mi padre. Ahora estamos en una casa en el interior, pero diría que incluso me gusta más porque estamos más aislados y tranquilos. ¡Solo se oyen los pajaritos!
-¿Cómo estás llevando el embarazo?
-Está siendo algo mágico y cada día es un misterio. Ya me siento muy conectada a ella (será una niña, Matilda).
-¿Piensas tomarte un descanso?
-No lo he pensado. Es muy importante escuchar a tu cuerpo y, de momento, el mío no me pide frenar al 100%. Mi trabajo es mi vida; me da energía y despierta algo en mí sin lo cual no sería tan feliz.
-¿Un consejo para decorar la casa y vestir la mesa?
-Mezcla sin miedo, con naturalidad. Para la mesa, crea combinaciones inesperadas utilizando mantelería y menaje tanto nuevo como vintage. En decoración, evita adquirir todo de golpe y crea cada rincón sin prisa, comprando en viajes para que así tengas una historia que añadir a tu hogar.
Sus direcciones secretas
Dónde dormir
Son Blanc Farmhouse (Torre Soli Nou), Cristine Bedfor (Mahón)
Hora de comer
Oysters Menorca, Anna y Pepe (Mahón), En Caragol (Biniancolla), Sa Llagosta, Es Cranc (Fornells), La Cantina en Hauser and Wirth (Isla del Rey)
El chiringuito
Es Pop (Son Parc), Som Sis (Binidalí) para aperitivo
Comprar el pan
Pigalle (Mahón)
...Y los dulces
Sucreria Can Vallés (Mahón)
Comida a domicilio
S’ambosta Obrador (Es Mercadal)
Las flores
2 Many Flowers (Mahón)
Moda y complementos
Tabouret, Can Sab, Casa M (Mahón), Cafe Central, La Puríssima (Ciudadela)
Entre galerías y museos
Galería Cayón, Hauser and Wirth (Isla del Rey), Galeria Albarrán Bourdais (Mahón)
Artesanía
Blanca Madruga para cerámica, Bobas Menorca para alpargatas (Mahón), Port Menorca para abarcas (varios puntos de la isla)
Vamos de excursión
Ciudadela, Mahón, Alaior
Calas donde perderse
Cala Pregonda, Cala Torant, Binimela, Alcaufar, Macarella, Biniancolla