Blanca Barrera-Cuadra ha dado varios giros a su vida muy gustosa y conscientemente. Primero fundó uno de los catering más demandados de Madrid (Aguacatte), favorito de celebrities, modelos y socialites, que ahora compagina con su faceta de interiorista y de galerista. Íntima amiga de la duquesa de Huéscar, Sofía Palazuelo, y madrina de su primera hija, Rosario, futura duquesa de Alba, nos recibe en su segunda residencia, en el corazón de Marbella.
-Estás volcada en tu estudio de interiorismo (@esttudioblancabarrera). ¿Significa esto que has abandonado tu faceta gastro?
-Esto siempre me va a acompañar y nunca lo voy a dejar. Aunque estiro mis días para que me dé tiempo a todo y hacemos incluso más eventos que antes de la pandemia, no tenemos tanto tiempo para compartirlos en redes. Cuando tienes mucho trabajo, no hay tanta necesidad de usar las redes. Creo que estas son precisamente para generar más trabajos. Y ahora mismo no podemos abarcar más, tenemos mucho a la espalda.
“En Navidad me gusta decorar con mucho árbol y plantas, bolas, un bonito Belén y luces doradas. Para mí es algo muy espiritual”
-¿Cuándo empezaste en el mundo de la decoración?
-Hace casi diez años; estudié cuatro años de Arquitectura de Interiores en la Universidad Politécnica de Madrid y al salir me embarqué de lleno en varios proyectos. He hecho casas en Madrid, Toledo, Cantabria, Mallorca, Baqueira, Málaga…Además de mi formación de carrera, desde que soy pequeña he ido visitando, especialmente con mi madre [Marta Cuadra, pintora e interiorista], anticuarios por todo el mundo. Esto me ha ido nutriendo de ideas que después empleo en mis proyectos.
-¿Has decorado entonces tú misma tu casa de Marbella?
-¡Sí! Hicimos tanto la obra como la decoración.
-¿Qué te han aportado todos estos años en el mundo gastro?
-Disciplina férrea, aprender a sacrificar, ha sido el máster de mi vida. Emprender te coloca muy bien la cabeza y te hace tener los pies constantemente en la tierra. He aprendido a trabajar de lunes a domingo desde las seis de la mañana y hasta muy tarde por la noche, siempre con una sonrisa en la boca. Por supuesto, no me he puesto enferma en casi diez años de empresa. Los empresarios no sabemos cuándo hay puentes o fiestas ni cuándo te tienes que ir a casa.
-Háblanos de esta casa en Marbella, ¿desde cuándo la tienes?
-Esta casa la compró mi bisabuela Lola. Con muchísima ilusión, ella empezó a venir mucho antes de que se pusiera de moda Marbella, era una moderna. Mi familia ha estado siempre llena de mujeres emprendedoras y con una visión muy abierta del mundo; mi abuela estudió en La Sorbona, algo insólito para aquella época. Este carácter familiar nos ha ido marcando a las siguientes generaciones y puedo decir, muy orgullosa, que tanto mis hermanos como mis primos son unos cracks en todo lo que hacen. Despuntan tanto con sus empresas como en empresas de otros, pero en todos los casos llamando la atención por hacer las cosas bien.
“En Nochebuena hago un menú semifrío para que todo el munedo se pueda servir fácilmente”
-Cuéntanos en qué zona está la casa y cómo son los alrededores.
-Está en un entorno idílico. Te asomas por la ventana y ves Gibraltar, el mar, los barcos y, por el otro lado, La Concha. Da mucha paz. Marbella es un sitio fantástico, lleno de vida y con una luz preciosa y en invierno está animadísimo. Es un lugar muy alegre y único, no me extraña nada que los extranjeros se maten por venir a vivir aquí.
-¿Cómo definirías el estilo de decoración de tu casa?
-Me gustan las casas frescas y con mucha personalidad. El estilo de esta casa es así, fresco, clásico, muy colorista; en definitiva, muy marbellí. He combinado muebles antiguos, con piezas especiales que he ido trayendo de viajes: Guatemala, Marrakech, Fez, Holanda, Úbeda, Córdoba…
-¿Es muy diferente a la de Madrid?
-Sí, la de Madrid es mucho más clásica. Aunque la esencia y el estilo se nota que es el mío. Es bastante reconocible.
-Hablando de Navidad, ¿cómo la celebras?
-¡Siempre en familia!
-¿Eres de las que la amas o prefieres que pase rápido?
-Me encanta la Navidad y, en general, me encanta celebrar. No me tienen que convencer para montar una cena e invitar a 80 personas. Lo hago feliz y disfruto haciéndolo.
-¿Te gusta decorar mucho e imbuirte del espíritu navideño?
-Sí, cuando lo hago pongo villancicos. Mi madre era de las que sacaba el árbol de Navidad en octubre y llamaba a todos nuestros amigos para ponerlo.
“Cuando decoro pongo villancicos. Mi madre era de las que sacaba el árbol en octubre y llamaba a todos mis amigos para montarlo”
-¿Cuál de los días de celebración es tu favorito?
El 24 de diciembre. Es una fecha en la que estamos todos; este año se ha casado mi hermana, pero espero que no fallen. El año pasado me faltó mi prima Inés y no me gustó nada el tema (risas). Me encanta que nos juntemos todos y, si tienen que venir los suegros, sobrinos e hijos de unos y de otros, mejor, pero que no me falte nadie. Me gusta la piña y las risas en familia.
-¿Hay alguna tradición que hagáis siempre en tu familia?
-Cantar y bailar sin parar en todas las celebraciones. Además, no nos perdemos algún concierto en el Teatro Real. Tampoco el discurso del Rey. También es muy agradable lo de la chimenea y el chocolate caliente mientras escuchas villancicos.
-¿Sueles viajar en las fiestas navideñas?
-En fin de año y las vísperas siempre hacemos un viaje por algún sitio de Europa. Y donde vayamos, solemos ir a la ópera. Viena, Venecia, Milán, Florencia, Múnich, Budapest, Brujas, Estrasburgo y Praga son algunas de las ciudades que hemos elegido para viajar en Navidad.
-Cuéntanos cuáles son tus menús ideales en estas fechas.
-En Nochebuena, un menú semifrío para que todo el mundo se pueda servir fácilmente compuesto de tablas de quesos, tablas de patés, blinis con salmón y huevas de Spherik, pudding de cabracho, langostinos y diferentes tartas. En Navidad, consomé al jerez, roastbeef con patatitas al horno y tarta Tatin; y en Nochevieja y Año Nuevo generalmente nos adaptamos a lo que nos sirvan en el sitio en el que estamos. Pero podría estar bien una crema de boletus, un salmón al horno con espárragos y de postre tarta de limón. El día de Reyes solo comemos roscón, ¡somos muy fáciles!
“En fin de año siempre hacemos un viaje por algún sitio de Europa y allí donde vamos solemos ir a la ópera: Viena, Venecia, Milán, Florencia...”
-¿Cuál es la receta familiar que nunca te falla en estas fechas?
-Un caldo de pescado y marisco que me enseñó mi abuela.
-¿Cómo te gusta decorar para Navidad?
-Mucho árbol y plantas, bolas de Navidad, un bonito Belén, luces doradas…
-¿Eres de las clásicas o te gusta innovar?
-Me encanta ir cambiando, como en la vida.
-¿Cómo decorarías tu mesa navideña ideal?
-Muy alegre, llena de flores, velas, con una vajilla bonita. Castañas, nueces, granadas y alguna escultura de los artistas que llevo en mi galería de arte, en la Calle Monte Esquinza, 8. Tengo alguna pieza de cerámica que queda de morir como centro de mesa.
-¿Para ti la Navidad tiene un sentido solo familiar o también te gusta salir y quedar con amigos?
-Para mí la Navidad tiene un sentido muy espiritual, y para llegar a la espiritualidad hay que celebrar como concepto. La vida hay que celebrarla con familia y amigos, y la Navidad es un momento perfecto de inflexión en el que valorar, agradecer, sembrar, celebrar y, especialmente, perdonar.
Crema de calabaza y curry
Ingredientes (para 4 personas)
● 800 g de calabaza ● 1 patata ● 1 cebolla dulce ● 4 zanahorias ● 1 puerro ● 1 litro de caldo de verduras o agua ● 5 cucharaditas de curry ● sal al gusto ● pimienta al gusto ● aceite de oliva virgen extra al gusto
Elaboración
- Lava, pela y corta todas las verduras en trozos pequeños.
- En una olla, calienta el aceite de oliva y pocha la cebolla sin que llegue a dorarse, solo con que esté transparente ya nos sirve. Es importante que la cebolla no se pase porque le daría un sabor muy fuerte a la crema.
- Rehoga el resto de verduras (zanahoria, puerro y calabaza) unos minutos junto a la cebolla.
- Añade el caldo (o el agua), las cinco cucharaditas de curry y salpimienta al gusto.
- Deja cocinar unos 25 minutos a fuego medio.
- Cuando esté todo bien cocido, bate con una batidora o un robot de cocina hasta conseguir la textura deseada.
- La crema se puede decorar con un poco de cebollino o perejil, o unas pipas de calabaza combinadas con un poco de crema agria.
Tartaleta de limón y frutos rojos
Ingredientes (para 10 tartaletas)
Para la masa: 300 g de harina todo uso ● 2 huevos ● 100 g de azúcar ● 100 g de mantequilla fría ● ralladura de limón.
Para la crema de limón: 200 ml de zumo de limón ● 300 ml de agua ● 50 g de Maizena ● 3 yemas ● 180 g de azúcar ● 40 g de mantequilla
Elaboración
- Pon en un bol la harina, la ralladura de limón, el azúcar y la mantequilla.
- Agrega los huevos batidos y trabaja con las manos hasta que se forme una masa lisa.
- Deja reposar 30 minutos en la nevera.
- Pasado el tiempo, estira la masa sobre la mesa con un rodillo hasta que quede de unos 5 mm de espesor.
- Usa moldes especiales para tartaletas.
- Pon una bolita de masa en el fondo del molde y presiona con una cuchara.
- Antes de hornear pincha con un tenedor y hornea unos 15 minutos a 180°.
- Para la crema de limón, disuelve la Maizena con zumo de limón, mezcla la preparación con el resto del limón y ponlo en una olla con la ralladura de limón y el azúcar.
- Una vez rompa a hervir, incorpora las yemas batidas y sigue cocinando un par de minutos, revolviendo continuamente.
- Retira e incorpora la mantequilla cortada en trozos y revuelve hasta que se disuelva.
- Cuando las tartaletas estén listas, ponles la crema de limón y decora con los frutos rojos.
Ravioli de ricotta al pesto
Ingredientes (para 4 personas)
Para la pasta: ● 400 g de harina de trigo ● 2 huevos ● 2 pizcas de sal ● 2 chorritos de aceite ● Para el relleno: ● 1 bolsa de espinacas congeladas ● 1 terrina de queso ricotta ● 3 peras
Para el pesto: ● 1 ramillete de albahaca ● 1 diente de ajo ● 30 g de piñones ● aceite de oliva virgen extra ● sal
Elaboración
- Coloca la harina haciendo un volcán y pon en el centro los huevos batidos, la sal y el aceite. Mezcla con un tenedor y amasa con las manos 10 minutos.
- Tápalo con un film y déjalo reposar media hora. Una vez reposada utiliza una mesa enharinada, parte la bola de masa en cuatro partes y dale al rodillo hasta dejarla de un grosor de 3 milímetros.
- En una ollita pon las espinacas a cocer con una pizquita de sal.
- Pela las peras y córtalas en pedacitos tamaño bocado.
- Cuécelas en agua con dos cucharaditas de azúcar.
- Corta la masa en cuadrados tamaño ravioli, toma uno de ellos, con una cucharilla pon una porción de espinacas, otra de queso ricotta y otra de compota de peras, y coge otro de los cuadrados y solapa el anterior.
- Ciérralo bien por los bordes con un tenedor. Así hasta terminar los raviolis.
- Cocemos 3 minutos y añadimos pesto.
- Para prepararlo, tritura el manojo de albahaca, el ajo, los piñones y el aceite de oliva virgen extra, ajusta de sal, y listo.
Blinis de anchoas, queso crema y huevas de salmón
Ingredientes (para 12 blinis)
● 1 huevo ● 300 ml de leche ● un chorrito de zumo de limón ● 50 g de harina de trigo sarraceno ● 50 g de harina de repostería ● 40 g de levadura seca de panadería ● 3,5 g de sal ● 10 g de mantequilla y un poco más para cocinar ● 5 ml de miel ● anchoas ● queso crema ● huevas de salmón
Elaboración
- Mezcla las harinas en un recipiente, añade la levadura y una pizca de sal.
- Separa la clara de la yema y reserva.
- Separa 60 ml de la leche y mezcla con el limón.
- Calienta el resto de la leche con la mantequilla y la miel en un cazo, sin hervir.
- Espera a que temple y añade la yema, batiendo con las varillas.
- Incorpora la leche reservada con el limón, sin dejar de batir.
- Agrega a la mezcla de harinas y combina con las varillas hasta tener una masa homogénea.
- Tapa con un paño limpio y deja fermentar una hora.
- Monta la clara reservada con una pizca de sal, casi a punto de nieve.
- Incorpora a la masa con movimientos envolventes.
- Engrasa una sartén con mantequilla y calienta a temperatura media.
- Forma pequeños discos dando forma redondeada con el dorso.
- Cocina 2 minutos por cada lado y cuando los blinis estén fríos decóralos con el queso, las anchoas y las huevas.